Black Hawk derribado
En octubre de 1993, los cuerpos de las fuerzas especiales de los EE.UU, Rangers y Delta Force, son enviados a la capital de Somalia: Mogadisicio. Su misión es capturar a objetivos de alto valor leales al señor de la guerra que controla la zona matando de hambre a los habitantes del país. Lo que, a priori, parece una misión sencilla, se convertirá en un infierno cuando sus dos helicópteros, Black Hawk, sean derribados en medio de la operación y dejando a los soldados acorralados en territorio comanche. (Cineycine).
Lo que se suponía iba a ser una misión sencilla de “entrar y salir”, se convirtió en un infierno para los Rangers y la Delta Force. Un infierno de casi 24 horas atrapados en el fuego incesante de las calles de Mogadisicio. El productor Jerry Bruckheimer, con Ridley Scott a los mandos, se encargó de llevar a la gran pantalla esta impresionante producción basada en hechos reales. Hoy celebramos el ¡20 Aniversario! de ‘Black Hawk derribado’.
“Cuando suene la primera bala… los políticos y toda esa mierda se irán directamente a la basura” (Hoot)
Crítica de Black Hawk derribado
Nuevamente hay que recordar que 2001 Jerry Bruckheimer era el rey de las producciones taquilleras. Hablamos de un productor que, cuando su sello aparecía en pantalla, literalmente convertía en taquillazos a las películas. No obstante, ya le empezaban a llover bastantes críticas de que sus producciones eran demasiado vacías: mucho ruido y pocas nueces… Por ello, Bruckheimer quiso poner su propio punto y final al asunto. En este cambio hacia aires más serios decidió producir dos films que iban más allá del blockbuster “palomitero”. Me refiero a ‘Pearl Harbor’ y ‘Black Hawk derribado’. Ambas cintas estrenadas el 2001 con apenas unos meses de diferencia.
‘Pearl Harbor’, con Michael Bay detrás de las cámaras, fue masacrada por la crítica e incluso nominada a varios Razzies. Pero esto no le impidió ser un loable éxito de taquilla. Por su parte, ‘Black Hawk derribado’ con Ridley Scott a bordo tuvo una mejor aceptación por parte de los críticos. También fue un aceptable éxito de taquilla y se coló en los premios gordos. Recordemos que nominaron a Ridley Scott como mejor director y a Slawomir Idziak en el apartado de mejor fotografía. No obstante, la película finalmente tan sólo se llevó los Oscars al Mejor Montaje y Mejor Sonido.
Respecto al guión, decir que fue obra de Ken Nolan y traslada con enorme exactitud el libro de Mark Bowden, el periodista que entrevistó a los combatientes supervivientes. El propio libro recoge entrevistas de unos 100 soldados que participaron en la operación. El guión del film también contiene algunos de los más crudos detalles de las historias personales. Un ejemplo sería la toma como rehén del piloto de combate Mike Duran.
‘Black Hawk derribado’ forma parte de lo mejor de Ridley Scott en su filmografía. En mi opinión puede codearse con ‘Alien’ (1979) o ‘Blade Runner’ (1982). Aquí tenemos una demostración de ese gran Scott que surge cuando está inspirado. El mítico director filma de una forma arrolladora. Además, es capaz de crear una simbiosis entre imagen y sonido con la narrativa de una forma tremendamente impecable y sobresaliente. Si ‘Salvar al soldado Ryan’ (Steven Spielberg, 1998) demostró que la II Guerra Mundial fue un infierno, ‘Black Hawk derribado’ hace lo mismo con las guerras modernas.
Ridley Scott no se reprime en mostrar al espectador el horror y la visceralidad del combate moderno. En la cinta vemos cómo, aun contando con la mejor tecnología y armamento, un enemigo numeroso puede poner en serios aprietos a las fuerzas más preparadas. En el film esto queda reflejado en una serie de set-pieces descomunales, vibrantes y tremendamente agresivas. Un auténtico horror de arena, sangre, casquillos y granadas volando sobre las cabezas de los soldados americanos atrapados en la ciudad somalí.
Tampoco se puede olvidar uno de la impresionante labor musical del teutón Hans Zimmer. El compositor alemán se luce de forma bestial. Su score está muy apegada a lo visual y refuerza todos y cada uno de los elementos que Scott busca en el plano de la dirección. Sinceramente estamos ante una impagable banda sonora. Por supuesto, mencionar también la brillante edición de Pietro Scalia, consiguiendo que el público pueda empatizar con el enorme cast de la película antes de que lleguen los cruentos combates.
Todo lo anterior nos lleva al apartado técnico. En este aspecto, ‘Black Hawk derribado’ es “top notch”. Un ejemplo vibrante de las capacidades técnicas para lograr sacar adelante el film (costando tan solo 90 millones) y dotarlo de un aire agresivo. En la filmación se usaron auténticos helicópteros Black Hawk y, cuando caen derribados, se utilizaron tanto efectos visuales como elementos prácticos reales. La intención era conseguir el máximo realismo posible. Por ello también se emplearon vehículos militares, miles de extras y una filmación que tuvo lugar en Rabat (Marruecos). Lógicamente, en aquel entonces, era imposible rodar en Somalia. Pese a esto, se usaron fotos reales de la capital somalí para lograr el máximo parecido con el lugar de rodaje.
Evidentemente, todo lo comentado no sería posible sin un realizador sólido. Es cierto que Ridley suele ser irregular en alguna ocasión, pero también es justo decir que aquí el realizador británico esta pletórico en todos los sentidos, tanto en su capacidad visual como en la narrativa. ¡Ojo! estamos hablando de un film con la friolera de casi 100 personajes. Para controlar todo esto hay que tener un muy buen pulso. Decir o afirmar que ‘Black Hawk derribado’ es mucho fuego de artificio y poca chicha… es quedarse demasiado en la superficie de una cinta que, perfectamente, compite con la ya citada ‘Salvar al Soldado Ryan’.
El casting es interminable. Por aquel entonces como intérpretes más reconocidos estaban Josh Hartnett, Tom Sizemore, Ewan McGregor, Sam Shepard, Eric Bana o el eterno secundario William Fitchtner. Pero entre las filas de los soldados también podemos encontrar a actores ahora reconocidos como Tom Hardy, Orlando Bloom o Nikolaj Coster-Waldau. Todos ellos se prepararon duramente varias semanas antes de iniciar el rodaje con un entrenamiento físico muy duro que incluía ¡cómo no! bajar de un helicóptero con cuerdas. Esto último entrenado para las secuencias de aterrizaje de los helicópteros. Se añade así otro descomunal plus de realismo. Así pues, la labor del reparto también es tremendamente potente a la hora de sacar emoción en el espectador. En este campo, Scott también consigue que el centro de la atención sean los actores. Y todos ellos son reconocibles en sus personajes, incluso los más secundarios.
Por último, también hay cierta cabida para la denuncia. El film trata el fracaso de la operación norteamericana de una forma tremendamente crítica. ¿Realmente era necesario que los Estados Unidos se involucraran en un conflicto que no era suyo? Podemos decir que era entendible, puesto que antes de la entrada de las fuerzas especiales, varios soldados de Naciones Unidas fueron asesinados por los rebeldes. No obstante, el film incide enormemente en ese detalle. Y se nos muestra realmente hasta qué punto el tema pudo haberse desarrollado de otra forma…
En conclusión.
Termino esta crítica de Black Hawk derribado, una cinta que hizo lo mismo que ‘Salvar al soldado Ryan’, solo que con las guerras modernas. Me refiero a lo de mostrar el horror, la sangre y el fuego de la forma más realista y cruenta posible. Ridley Scott está pletórico y metido hasta el fondo en esta tremenda producción. Un sincero, y puro y duro, aplauso.
AVISO: Existe un montaje extendido de 152 minutos frente a los 142 originales. Sin embargo, no aporta ninguna diferencia sustancial al metraje estrenado en salas y analizado en esta reseña.
Tráiler de Black Hawk derribado
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