The Prince
En los años 90 había dos hombres que luchaban por ser los caciques de la ciudad de Nueva Orleans, uno era Omar y el otro un tipo al que apodaban “El Príncipe”. “El Príncipe” era un solitario pistolero alcohólico que no dudó en colocar una bomba en el coche de Omar para eliminarle de la ecuación, con lo que no contaba era que en aquel vehículo no subiría su rival, sino la mujer e hija pequeña de este. Destrozado por la tragedia, Omar juró acabar con “El Príncipe”, mientras este, con la ayuda de su amigo Sam, desapareció del mapa iniciando una nueva vida como mecánico en la otra punta de Estados Unidos. Más de veinte años después, “El Príncipe” tendrá que regresar a Nueva Orleans en busca de su hija adolescente que ha caído en las garras de un traficante de drogas apodado “La Farmacia”. Omar usará la reaparición de “El Príncipe” para consumar su ansiada vendetta. (Cineycine).
Nuevo «trabajo alimenticio» para Bruce Willis, del que ya hemos hablado sobre su situación actual en los especiales: ¿Qué pasa con Bruce Willis? y Bruce Willis próximas películas. Ahora, recuperamos una de sus últimas cintas estrenadas en cines seleccionados y en formato casero. Un ejercicio de nostalgia noventera, que incluso se permite el lujo de recuperar a uno de los intérpretes que más prometían en aquella década, Jason Patric, quien es ni más ni menos que… ‘The Prince’.
“El Príncipe está en la ciudad, tráemelo”. (Omar).
Crítica de The Prince
‘The Prince’ es uno de esos films quiero-y-no-puedo que al final uno acaba, o pillándole algo de cariño por el ejercicio de nostalgia que representa, o aborreciéndolo por la mal llevada elección de elementos de la que casi siempre hace uso su director, Brian A. Miller, firmando su mejor trabajo… y, viendo ‘The Prince’, eso no es precisamente un cumplido.
Estamos ante una cinta de acción muy típica y tópica que va transitando todos los caminos de los films de maleante rehabilitado que tiene que volver a tomar el camino de las armas para salvar a la única familia que tiene, al mismo tiempo que su enemigo mortal le busca para ajustar cuentas. Pero el problema de esta película no está en sus limitados medios, en su trillada trama, o en sus tiroteos previsibles con desenlace final consabido… el problema es Jason Patric (El Príncipe), uno de los actores más aburridos, inexpresivos y con menos carisma de los últimos treinta años que, como ya demostrara en ‘Speed 2’, está totalmente perdido cuando le toca interpretar al héroe de la función. De esta forma, se ve incapaz de crear lazo alguno de unión con el espectador, y cuando el héroe de una cinta de acción no funciona como tal, mal vamos.
En el otro lado del espectro está Bruce Willis (Omar), en otro de esos papeles cómodos que tanto parecen gustarle últimamente, demostrando lo cansado que está ya de pasearse por actioners pistola en mano y recitando frases duras. Willis aquí es Omar, un viudo ex-padre de familia que lleva el dolor grabado en su rostro y en su alma desde hace veinte años, los mismos que han pasado desde que asesinaron a su mujer e hija delante de sus ojos sin que pudiera hacer nada para evitarlo, en un atentado que tenía como objetivo su persona.
Mejorando las prestaciones ofrecidas en cintas pretéritas como ‘Set Up’ o ‘Fuego cruzado’, Willis compone un villano mínimamente digno y que aparece de forma fugaz pero continuada por el metraje dando órdenes a su mano derecha, el joven, ágil y letal Rain, visto en ‘Ninja Assassin’. Los mayores minutos de Willis vienen en la consabida confrontación final con su némesis, en donde el mítico protagonista de ‘El sexto sentido’ se desfasa recordando con sus gestos y frases el clímax de ‘The Jackal (Chacal)’ a finales de los 90.
Para completar la “santa trinidad” de la nostalgia noventera, a medio metraje hace aparición un asombrosamente inexpresivo John Cusack (Sam), que parece no saber ni qué película está rodando, totalmente irreconocible, más aún si se le compara con el Cusack de ‘El encargo’, un más que curioso neo-noir estrenado también el pasado 2014. Ojo al pelo de Cusack porque es altamente sospechoso.
Y como traca final, tenemos aquí un cameo expendable de una sola escena por parte de 50 Cent (también productor, como en ‘Set Up’) dando vida al infame narcotraficante “La Farmacia”.
Ahora bien, no todo es negativo en esta crítica de The Prince, destacar que existe un tiroteo muy estilo ‘El clan de los irlandeses’ que tiene lugar en el garito clandestino de “La Farmacia” y… ¡Ah! también hay un combate entre Rain y “El Príncipe” que, aunque corto, sirve para que el cantante y actor asiático luzca alguna de las habilidades que ya mostró en la cinta de ninjas producida por los Wachosky en 2009. Además, y a pesar de la desapasionada dirección de Miller, la cinta no aburre del todo, aunque tampoco consigue enganchar, terminando en una especie de ‘Venganza’ (Taken) “versión televisiva”.
Por otro lado, y aun siendo bien visibles sus escasos medios (menos de 20 millones de presupuesto) la película intenta ofrecernos un producto que pueda pasar por una producción mayor, lástima que se le noten las costuras a leguas. Aunque, sin duda, lo mejor en el apartado de la dirección es ese fugaz intento de Miller (y su director de fotografía) por emparentar el film con cintas de acción míticas del género en los 90 como ‘Amor a quemarropa’ o ‘Dos policías rebeldes’, añadiendo una bruma de post-producción en la fotografía que le da ligero aire al Tony Scott de sus principios, claro está, salvando (muy mucho) las distancias.
En resumidas cuentas.
Rutinaria y ciertamente prescindible aportación a la filmografía de Bruce Willis que, aún y con todo, es mejor que las anteriores ‘Set Up’ o ‘Fuego cruzado’. Una cinta que no se beneficia en nada de la pésima elección de Patric como héroe de la función, y se nota que su presupuesto no está a la altura de sus pretensiones de hacerse pasar por un producto para la gran pantalla.
Tráiler de The Prince
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Ayer vi un cacho y ¡Oh, Dios!, Bruce Willis debe estar muy necesitado para esta clase de cosas.
Anda circulando por Internet un póster de esta película que imita descaradamente el estilo del póster de ‘ASESINOS DE ÉLITE’. Me da muchísima pena y rabia ver metido a Bruce Willis en estas FARSAS…