Los siete magníficos (2016)
1879. El millonario cacique Bartholomew Bogue gobierna con mano de hierro el pueblo de Rose Creek atemorizando a sus indefensos granjeros. Además, los emplea como mano de obra barata en sus minas del valle. En estas circunstancias, y tras perder a un ser querido, la joven Emma Cullen contratará al cazarrecompensas Sam Chisolm en busca de justicia... pero aceptando venganza. (Cineycine).
En 1954, Akira Kurosawa estrenó ‘Los siete samuráis’. Seis años después, John Sturges trasladaba la obra de Kurosawa al oeste americano en ‘Los siete magníficos’. Y en 2016, el muy competente Antoine Fuqua revisitó de nuevo la mítica historia. Para ello contó con Denzel Washington que ahora es quien lidera a… ‘Los siete magníficos’.
“Lo que busco es justicia, pero aceptaré venganza” (Emma Cullen)
Crítica de Los siete magníficos (2016)
Vivimos instalados en una época cinematográfica en la que los remakes están a la orden del día. A nivel personal no es que me entusiasmen, más bien al contrario. No obstante, hay que reconocer que algunos mejoran notablemente la obra original o, al menos, se sitúan a su nivel. Este es el caso de ‘Los siete magníficos’ de Antoine Fuqua. Aquí tenemos un remake que se codea con la obra de Sturges y que, en algunos aspectos, la supera por completo.
No hay que autoengañarse, es cierto que ‘Los siete magníficos’ de John Sturges es una destacada película. Pero lo es más por su recuerdo y mito que la ha engrandecido más allá de su propia realidad, amén de que en determinados puntos cojeaba y mucho. Uno de sus puntos débiles fue la exposición en pantalla de la acción en los tiroteos. Una acción que devenía poco creíble, “anónima” (la gran mayoría de los magníficos morían por balas que “pasaban por allí”) y excesivamente teatral. Es aquí donde este film de Fuqua pasa totalmente por encima. Especialmente con un clímax de 15-25 minutos que es de lo mejor que se ha visto en el cine de acción reciente. Ya sólo por ver semejante despliegue de plomo en pantalla merece la pena ver la cinta. Al menos si te gusta la acción y te consideras fan del género.
El libreto Nic Pizzolatto y Richard Wenk no engaña a nadie. Ambos siguen la estructura de la historia original. Eso sí, con ligeros cambios y homenajes a la misma. En consecuencia, en el film encontraremos el conflicto en el poblado (cambiando a los granjeros mexicanos por yanquis y al bandido Calvera por el cacique Bartholomew Bogue), la presentación y reclutamiento de los magníficos (también aquí habrá cambios que luego comentaré brevemente), la llegada a Rose Creek (pueblo norteamericano por el original mexicano) y el conflicto a base de plomo (ya comentado anteriormente, y que es uno de los puntos fuertes de este remake con sorpresas incluidas).
En el terreno de los homenajes/guiños los hay de varias clases. Están aquellos que son muy sutiles, por ejemplo, ciertas frases que pronuncian Denzel Washington y Chris Pratt sobre “recibirlo todo” y “el tipo que cae de un edificio”. Estas frases son literales a las que, en su momento, pronunciaron Yul Brynner y Steve McQueen. Por otro lado, también los hay totalmente directos como la presentación del personaje interpretado por Byung-hun Lee que es todo un calco de la que protagonizó James Coburn.
Además, en el metraje también podemos apreciar ciertos “gestos” de Fuqua hacia otras grandes obras del western. Me refiero a películas como ‘El jinete pálido’ (Clint Eastwood, 1985). No hay más que ver a esos sicarios barbados de Mister Bogue que visten con largas gabardinas, a imagen y semejanza de los hombres de Stockburn en el film de Eastwood.
En la banda sonora trabajó James Horner antes de fallecer el 22 de junio de 2015. Su trabajo fue rematado por Simon Franglen. Las composiciones resultan muy acertadas. Las mismas evocan a la épica y al western. Y la melodía principal resulta atractiva a la vez que “intrigante/expectante”. También en ella encontraremos, llegado el momento, el justo y necesario homenaje al mítico tema compuesto por Elmer Bernstein. Lógicamente, no podía dejar de sonar aquí, ¡de ninguna manera!
Pasando al reparto del film vamos en primer lugar con los nuevos magníficos. El nuevo líder es Denzel Washington (1) como Sam Chisolm, personaje que viene a ser un claro reflejo del interpretado por Yul Brynner. Chisolm se presenta todo de negro (caballo incluido) y dice ser “un autorizado Agente de la Ley”… pero parece esconder algo más. Washington está bien en su rol, sobre todo, por su innegable carisma y personalidad. Ahora bien, ya va siendo hora de que alguien le diga que empiece a cuidar el físico si quiere resultar creíble en films de acción.
Al lado de Denzel tenemos a Chris Pratt (2) dando vida a Josh Faraday. Faraday vendría a ser el Vin Tanner de Steve McQueen con una baraja en la mano y muchos cambios. Cambios que proceden de la peculiar personalidad guasona que Pratt otorga a casi todos sus personajes desde que triunfó con ese estilo en ‘Guardianes de la Galaxia’ (James Gunn, 2014).
Sigo con Ethan Hawke (3), que realiza la más completa actuación en su papel de Goodnight Robicheaux. Este es un tipo complejo que representa (a la vez) a los personajes interpretados por Brad Dexter y Robert Vaughn en el original. Su mano derecha es Billy Rocks, un oriental de pocas palabras que nació con los cuchillos en las manos. A Rocks lo interpreta Byung-hun Lee (4) como si fuera el James Coburn original.
Cerrando tenemos las novedades más destacadas de estos magníficos de Fuqua. Novedades representadas por un gigantesco Vincent D’Onofrio (5). D`Onofrio reparte justicia hacha en mano interpretando al montañés Jack Horne, un auténtico «oso-humano» que gustaba de arrancarles las cabelleras a los indios. Sigo con el mexicano Manuel Garcia-Rulfo (6) dando vida a Vasquez, un feo individuo con cuentas pendientes con la Ley. Sin embargo, decide pasarse al lado de los buenos. El último magnífico que completa la diversidad del grupo es “Cosecha Roja”. Tal y como su nombre indica, es un comanche al que interpreta Martin Sensmeier (7). La suya es una actuación más física que otra cosa aportando el arco y las flechas al almacén de plomo.
De los sufridos habitantes del poblado es de justicia resaltar el coraje y ganas de Haley Bennett. La joven le pone mucho valor a su rol de Emma Cullen. Ella es la única del lugar capaz de ponerse unas cananas y empuñar un rifle. Finalmente, el papel de villano va para un demoníaco Peter Sarsgaard en el rol de Bartholomew Bogue, un cacique que lo mismo asusta a los niños que quema Iglesias. Bogue tiene como mano derecha a un gigantesco y renegado indio que nunca habla interpretado por Jonathan Joss. Como mano izquierda tiene a McCann con el que sorprende Cam Gigandet en los minutos que tiene. El resto de esbirros los componen todo un ejército de lacayos anónimos. De esos ejércitos que ya estamos acostumbrados a ver morir de mil formas en films de acción tipo ‘Los Mercenarios’ (Sylvester Stallone, 2010).
“Lo que perdimos en el fuego… lo hallaremos en las cenizas” (Sam Chisolm)
En conclusión.
Finalizo esta crítica de Los siete magníficos (2016), un nuevo y sólido trabajo de Antoine Fuqua muy bien ambientando y mejor ejecutado. Una película que tiene en la acción su mejor baza y que además honra muy dignamente al film de John Sturges. Un film al que incluso supera en determinadas facetas. No le hagan ascos por ser un remake, desenfunden sus pistolas y disparen al lado de estos nuevos magníficos.
Tráiler de Los siete magníficos (2016)
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Vista en Cines y bien disfrutado del divertimento que planea y ejecuta un Fuqua licenciado con casi notable en un genero de tanto respeto como el western.