La primera película de Daniel Craig
Los inicios nunca son fáciles, y el actor que hoy viene a visitarnos no rompió con dicha norma. Debutó en un lejano 1992 en un film que no fue precisamente un éxito. Desde aquel año 92, y hasta su siguiente aparición de importancia, pasaron una década de papeles menores. 10 años de transitar por televisión y patear castings. Actualmente, aquel joven rubio de ojos azules, es uno de los emblemas por antonomasia de la elegancia con un carisma equiparable al de los grandes. Su rostro y fuerza recuerdan a un gigante como Steve McQueen. Su licencia para matar le dio la eternidad. Ya mismo rescatamos del olvido…
La primera película de Daniel Craig
John G. Avildsen (el “King of the Underdogs”) director de, entre otras, ‘Rocky’ (1976), ‘La fórmula’ (1980) o ‘Karate Kid’ (1984), y su guionista de cabecera Robert Mark Kamen (Saga Karate Kid), fueron los que más lucharon por sacar adelante un film que aunaba las inquietudes políticas con el cine por el que Avildsen era famoso: las historias de superación con puños de por medio. De esta forma, y desde la novela de Bryce Courtenay (basada en su propia vida y milagros), nació ‘The Power of One’. Película estrenada en España en 1992 como ‘La fuerza de uno’.
‘La fuerza uno’ fue recuperada legalmente gracias a Netflix. Su DVD, editado por Warner Bros en 2008, se encuentra descatalogado. La cinta fue protagonizada por, entre otros, Stephen Dorff (como la versión ya adulta del protagonista llamado PK), Morgan Freeman (fogueándose para su posterior interpretación de Nelson Mandela en ‘Invictus’), Armin Mueller-Stahl y John Gielgud. Además de por quien hoy nos visita en su primera aparición para la gran pantalla: ¡Daniel Craig! Aquí dio vida al Sargento Botha (en su versión adulta). Botha es el rival de PK desde su niñez en un orfanato de Ciudad del Cabo (Sudáfrica).
No conocía de nada este film. Si lo visioné fue porque lo vi en el catálogo de Netflix y por ver en qué gastaba el tiempo, y el crédito de ‘Rocky’ y ‘Karate Kid’, el bueno de Avildsen. Globalmente ‘La fuerza de uno’ debe estar entre lo mejor de su carrera. Aquí estamos ante un film que, en muchos momentos, roza el notable… siempre que uno crea en lo que se va narrando. Esto es: las penurias de un joven blanco de procedencia inglesa durante tres décadas.
En la película conocemos a PK (interpretado siempre verazmente por Guy Witcher, Simon Fenton y Stephen Dorff). PK es un huérfano rubio y de gran corazón al que le ha tocado nacer en la Sudáfrica de antes del estallido del Apartheid. Posteriormente viviría la entrada de Hitler y el nazismo. Así hasta los años cincuenta ya como un adulto. Durante su periplo vital se encontrará con varios personajes: un compositor alemán (Armin Mueller-Stahl), un prisionero afrikaans ex-entrenador de boxeo (Morgan Freeman) y, finalmente, con un sudafricano blanco racista con afiliación al partido nazi (Daniel Craig). Este último le hará la vida imposible durante décadas. A pesar de todo, con su fuerza, sus puños y su inquebrantable fe, luchará por unir las dos Sudafricas en una sola nación.
En pocos films se puede ver, sin edulcorante alguno, el tremebundo bullying y los despreciables abusos a los que PK se va sobreponiendo. Se levanta gracias a sus encuentros con algunas buenas personas, y a su fe y perseverancia. Ojo a cuando tres niños acorralan al PK de siete años y le orinan encima. Una escena filmada de lleno por Avildsen.
La aparición de Daniel Craig no tiene lugar hasta pasada la hora de película. Primero es asignado al seguimiento de la hija de un importante político de la que está enamorado PK. Pasado el tiempo, y ya una vez con la joven adolescente fuera de la ecuación, su misión pasa a hostigar a todo aquel miembro del círculo de amigos y mentores de PK. Finalmente llega el momento crucial del relato, en mitad de un tumultuosa sublevación ciudadana, cuando ambos personajes se enfrentan cuerpo a cuerpo.
A lo sumo, Craig aparece en el film durante unos veinte minutos repartidos en el segundo y tercer acto del film. Daniel es claramente el villano de la película. Su físico (muchísimo menos musculado que el actual) es aún el de un post-adolescente (a pesar de contar con 24 años cuando se rodó la cinta, por los 19 de Stephen Dorff). No obstante, es rápidamente reconocible debido a sus pelo rubio y a su rostro adulto.
La Warner trató pesimamente ‘La fuerza de uno’ y sólo pudo verse en una centena de cines USA en 1992. En consecuencia, no logró llegar a los 3 millones de $ de recaudación. Aquello, unido al fracaso de ‘Rocky V’ (la menos exitosa de toda la franquicia), llevó a John G. Avildsen a no rodar nada relevante en los años siguientes, salvo ‘8 segundos’ en 1994 (una producción a mayor gloria de Luke Perry) y ‘Van Damme´s Inferno’ en 1998. Esta última fue directa a vídeo en EEUU, tras un remontaje que no fue del gusto del director.
Por su parte, Daniel Craig alcanzaría la inmortalidad gracias al papel de James Bond. Seguramente ahora tenga más millones amasados que todo el elenco de ‘La fuerza de uno’ juntos. Sin embargo, antes de eso tuvo que peregrinar por la televisión en Gran Bretaña y EEUU. Además de aceptar pasar castings en films como ‘Aventuras en la corte del Rey Arturo’ (Michael Gottlieb, 1995), ‘El amor es el demonio’ (John Maybury, 1998) o ‘Soñé con África’ (Hugh Hudson, 2000).
Su primer rol de cierta importancia llegaría en 2001 como Alex West en ‘Lara Croft: Tomb Raider’ (Simon West, 2001). La «saga» donde también vimos (en su segunda parte) a Gerard Butler. Al año siguiente sería el hijo de Paul Newman en la magistral ‘Camino a la perdición’ (Sam Mendes, 2002). Fue tras verle en ‘Layer Cake: Crimen organizado’ (Matthew Vaughn, 2004) cuando Barbara Broccoli y Michael G. Wilson se decidieron por Craig como sustituto de Pierce Brosnan.
Fuera de sus cuatro incursiones como James Bond (‘Casino Royale’, ‘Quatum of Solace’, ‘Skyfall’ y ‘Spectre’), lo mejor de Craig desde su salto a primera plana como estrella de la función serían: ‘Historia de un crimen’ (Douglas McGrath, 2006), ‘Cowboys & Aliens’ (Jon Favreau, 2011) y ‘Millennium: Los hombres que no amaban a las mujeres’ (David Fincher, 2011). Por el camino, varapalos de taquilla en 2007 como ‘La brújula dorada’ (Chris Weitz) e ‘Invasión’. Esta segunda contó con dos directores diferentes y necesitó de un rodaje posterior de salvación con escenas adicionales. Se da la coincidencia de que ambos largometrajes los co-protagonizó con Nicole Kidman. Otra que no fue muy bien recibida fue ‘Detrás de las paredes’ (Jim Sheridan, 2011).
En 2017 lo pudimos ver en ‘La suerte de los Logan’, una comedia criminal a las órdenes de Steven Soderbergh. No podemos olvidar tampoco que destacó muchísimo en ‘Puñales por la espalda’, un nuevo éxito de Rian Johnson que parece va para saga con Craig como cabeza de cartel. Finalmente, el año pasado protagonizó su última aparición como James Bond en ‘Sin tiempo para morir’. En el plano sentimental comentar que tiene una relación asentada con la también actriz inglesa Rachel Weisz. Con ella se casó en 2011 y tienen un hijo.
Y hasta aquí este rescate a la primera y ya electrizante aparición en pantalla de un actor llamado a hacer historia como 007: Craig, Daniel Craig. ¡Nos leemos próximamente en esta sección de La primera película de…!
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