Creed. La leyenda de Rocky
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Es tiempo de regresar a Filadelfia para reencontrarnos con un viejo y querido amigo al que no hemos olvidado. Un amigo que ha estado presente en nuestras vidas a lo largo de más de 40 años. Me refiero, claro está, a Rocky Balboa. El mítico púgil de la ciudad de los 76rs regresa para entregar la antorcha al hijo de Apollo. Es tiempo de leyendas y legados. Es tiempo de… ‘Creed. La leyenda de Rocky’.

“Ahora el protagonista eres tú” (Rocky Balboa)

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Crítica de Creed. La leyenda de Rocky

La franquicia de Rocky parecía cerrada para siempre con la magistralRocky Balboa (Sylvester Stallone, 2006) en la que el púgil de Filadelfia se despedía de todos sus fans en un emotivo final. Sin embargo, ¡La campana volvió a sonar! Y esta vez quién la hizo sonar fue el joven director Ryan Coogler. Coogler es un fan declarado de la saga cuyo amor a estas películas le fue inculcado por su propio padre. Algunos años después del estreno de ‘Rocky Balboa’ se presentó ante Sylvester Stallone con un guión bajo el brazo. Un guión en el que la historia continuaba. Stallone, para el que hacer ‘Rocky Balboa’ había sido un auténtico milagro, lo rechazó porque consideraba que: “la gente pensará que lo hacemos por dinero. No saldrá auténtico. No debemos presionar más”. Todo parecía terminado.

Tiempo después, Coogler se formó como director y rodó con Michael B. Jordan como cabeza de cartel el film ‘Fruitvale Station’ (2013). La cinta recibió muchos premios y distinciones. Entonces, Coogler volvió a contactar con Stallone. Había nacido ‘Creed’, una película empujada por la pasión y el amor de Ryan Coogler hacia la saga y este es su legado al “Universo Rocky”.

“Paso a paso. Golpe a golpe. Asalto a asalto” (Rocky Balboa)

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Y su legado es una gran película que se sitúa casi a la altura de la original y de la “última” en todos los aspectos. Un legado que es todo un regalo de amor para los fans de la franquicia. Fans que es imposible no se emocionen según las imágenes van pasando por la película. Una película de facturación impecable y rodada con corazón, alma y sentimiento de alguien que sabe y conoce el Universo en el que se ha metido. Dejando al margen forofismos y fanatismos, resulta inexplicable que este film no fuera nominado a la «Mejor película» en los Oscars 2016.

Ryan Coogler nos habla en ‘Creed’ de temas muy americanos, “rockyanos” y universales. Temas como el legado que heredamos y el que estamos dispuestos a dejar con nuestro sacrificio y nombre propio. El amor y la familia a la que pertenecemos. Y  la enfermedad y cómo afrontarla. Todo esto repleto de gran cantidad de homenajes/guiños a todas las películas de la saga. Estos “easter eggs” convierten a este film en un emotivo y nostálgico recordatorio a los que, como yo, amamos esta franquicia por encima de todas las cosas. Y la amamos porque hemos crecido con ella y nos hemos formado con sus valores. Una foto por aquí, un póster por allá, cierta estatua jamás olvidada, cierto gimnasio remodelado, una frase que saca del olvido a otro personaje, esas míticas escaleras…

“Quiero que me entrenes” (Adonis Creed)

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Ahora bien, por encima de todos los guiños y homenajes se sitúa la figura de Apollo Creed, el inolvidable campeón al que diera vida Carl Weathers. Por diferentes motivos (ya explicados por mi compañero J. Glez en la crítica de ‘Rocky Balboa’) en la “última” película de la saga no hubo ni una sola referencia y tampoco imágenes de Apollo. De alguna manera, esta fue una puerta que quedó sin cerrar en aquella gran película.

Y esta ha sido la puerta por la que Ryan Coogler ha entrado ofreciendo al público una nueva historia. La franquicia que ya creíamos cerrada se ha vuelto a abrir. Si en ‘Rocky Balboa’ el recuerdo y “presencia” de Adrian era una constante, ahora sucede lo mismo con Apollo Creed. Un Apollo que recibe (el personaje, que no Weathers) su justo y merecido homenaje y recordatorio. No tenía sentido alguno que el que fuera mayor rival y amigo de Rocky cayera en el olvido sin más.

Y no puede haber una película de Rocky sin combates. ¿Qué ofrece aquí Coogler como novedad? Pues ofrece un gran montaje con diferentes secuencias que te meten (algunas de ellas) literalmente en el ring como si estuviéramos justo detrás de Adonis Creed (podéis tomar como base esos videojuegos en los que manejamos un púgil al que sólo vemos de espaldas). En otras hace un uso bárbaro del plano secuencia. Y, por supuesto, tampoco falta a la cita algún que otro guantazo “marca de la casa” que nos dolerá tanto o más que al púgil que lo recibe… y, sangre, bastante sangre mostrada sin pudor y con total valentía.

“El tiempo es invencible. Acaba con todos” (Rocky Balboa)

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“Tu padre era especial”… Recuerdos de familia.

Los cansados ojos de Sylvester Stallone (Rocky) “hablan” y dicen mucho. Los miras y, a través de ellos, ves toda la historia de su vida y de la saga. Una vida y una saga hechas a base de golpes, éxitos y fracasos… pero siempre mirando hacia delante y no dejándose tumbar. Stallone explota al máximo su lado dramático y consigue, en determinados momentos, ponernos a los fans de Rocky “la gallina de piel” (Johan Cruyff dixit) y emocionarnos al máximo. Cuando escribí la crítica de Rocky (John G. Avildsen, 1976) dije que este fue un personaje creado por Sly a su imagen y semejanza. Lo conoce tanto como se conoce así mismo. Ya no hay secretos, es el final de una estación y de una leyenda.

Pero Stallone también es listo, muy listo… y sabe situarse muy inteligentemente en un segundo plano de los focos, dejando que estos iluminen por completo a un hipermotivado Michael B. Jordan. El joven intérprete devora por completo la pantalla con una actuación que pone los pelos de punta por su entrega total al personaje con hambre, rabia, sentimiento y corazón. La antorcha ya está traspasada y uno no puede sino mirar al futuro con muchas esperanzas puestas en Adonis Creed y en el legado que ahora le toca construir.

“Con la campana empieza el infierno” (Rocky Balboa)

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Finalmente, cierro esta crítica de Creed. La leyenda de Rocky, haciendo tres menciones especiales: la primera para la actriz Tessa Thompson que entrega una muy natural actuación como Bianca, una joven cantante de Filadelfia a la que conocerá Adonis. Y la segunda y terceras van para el intérprete escocés Graham McTavish que da vida al manager/preparador de un campeón inglés al que interpreta en pantalla el boxeador profesional Tony Bellew.  McTavish ya trabajó junto a Stallone en John Rambo(Sylvester Stallone, 2008), y sin duda que este hombre (habitual de papeles duros), también merece cierto reconocimiento.

¡Ah! y ojo a los cameos de Liev Schreiber como narrador de una cadena de TV y del mítico anunciador Michael Buffer con su legendario grito de guerra: «Let´s go ready to rumble». (Recordad que Buffer ya estuvo presente como anunciador en ‘Rocky Balboa’).

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En conclusión.
Es cierto que cuando se anunció esta nueva película me pareció absolutamente innecesaria… no lo puedo negar. Además, el argumento filtrado me sonaba demasiado a ‘Rocky V’ (John G. Avildsen, 1990). Sin embargo, y una vez más, Stallone ha acertado uniéndose en esta ocasión a Ryan Coogler y Michael B. Jordan con esta película. Una película con corazón y alma propias que, seas seguidor o no de la franquicia, no debes dejar de ver. ‘Creed’, al igual que ‘Rocky’, es un film rodado con corazón y eso es algo que, a día de hoy, es muy difícil de encontrar. La antorcha ya ha cambiado de manos y uno se siente orgulloso alzando la vista hacia adelante y viendo como quién la porta es Michael B. Jordan. A dónde vayas, te seguiremos…

Tráiler de Creed. La leyenda de Rocky

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