Rocky
Rocky Balboa es un desconocido púgil de Filadelfia que malvive como matón portuario del mafioso del barrio mientras intenta conquistar el amor de Adrian, la tímida hermana de su mejor amigo, Paulie. Un día visita la ciudad Apollo Creed, el imbatible campeón de los pesos pesados. Apollo se acaba de quedar sin oponente para su próxima velada. Entonces, y haciendo uso de su ingenio, se le ocurre montar un show para ofrecer a un boxeador local la oportunidad de pelear por el título. El boxeador elegido será Rocky. El resto ya es historia... (Cineycine).
“Rocky era mi gran oportunidad. Si la película se hubiera hecho sin mí y hubiera sido un éxito… mi vida habría estado acabada. Me habría arrojado a las vías del tren” (Sylvester Stallone)
“Es la gran oportunidad de su vida. No puede dejarla escapar” (Jergens)
Crítica de Rocky
Como bien comentaba mi amigo Carlos G. cuando escribió la crítica de ‘Star Wars. Episodio IV: Una nueva esperanza’, ya poco o nada se puede aportar sobre un film tan mítico como es ‘Rocky’. Un film del que también se han escrito auténticos “ríos de tinta”. No obstante, voy a aportar mi pequeño granito de arena con esta crítica de Rocky. Y ¡qué mejor forma de hacerlo que empezar por su origen! Porque aunque el mismo sea de sobra conocido para el cinéfilo de pro, pues me parece a mí que las nuevas generaciones de los superhéroes no lo van a saber. Así pues, comienzo…
Y todo comenzó con un joven Sylvester Stallone que quería, por encima de todo, triunfar en el mundillo del cine. Stallone hizo grandes sacrificios para conseguir su sueño. El joven aspirante a actor llegó a vivir en la más absoluta miseria aceptando casi cualquier trabajo: acomodador, limpiador de jaulas del Zoo, participación en películas de nula trascendencia e incluso alguna pornoerótica. Sly estaba arruinado y sólo tenía 106 $ en su cuenta bancaria.
Un buen día decidió tomarse un descanso y asistir a un “intrascendente” combate de boxeo. El combate enfrentaba al todopoderoso Muhammad Alí contra el desconocido Chuck Wepner. El evento era un mero “trámite” para Alí. Sin embargo, y de manera increíble, el mediocre Wepner logró hacer besar la lona al poderoso campeón. Stallone, que estaba sentado en las primeras filas, tuvo una grandiosa iluminación. Al regresar a casa escribió el guión de ‘Rocky’ de un tirón en tres días y con un total de noventa páginas.
Stallone puso su script sobre la mesa de los productores, Bob Chartoff & Irwin Winkler, y a estos les encantó. No obstante, querían que el papel de Rocky lo interpretará una cara conocida como Ryan O´Neal. Stallone se negó porque este era “su golpe entre un millón” y, pese a que Chartoff y Winkler le llegaron a ofrecer hasta 350.000 $, no accedió a la venta. Sly lo tenía claro: si querían la historia sería contando con él en el papel de Rocky. Asombrados por el tesón del joven, los productores cedieron. El resto ya es historia del cine, del boxeo y de la vida.
Una historia que arranca el 25 de noviembre de 1975 en Filadelfia. Sylvester Stallone nos regala un grandioso retrato de entrañables perdedores. Perdedores como Rocky, Adrian, Paulie o Mickey que ven pasar su vida sin una oportunidad a la que aferrarse para salir de los tristes barrios bajos de la ciudad de los 76rs. Barrios sobresalientemente bien retratados en la película. Si queremos, ‘Rocky’ bien puede ser “el cuento de la Cenicienta” trasladado al mundo del boxeo. Algo que, dicho sea de paso, sugiere uno de los comentaristas en el combate final contra Apollo, el invencible campeón.
No obstante lo anterior, ‘Rocky’ es también una gran película de amor. Un amor hermoso y puro que es el que unirá a Rocky con Adrian. Un amor que nos llegará directos por lo bien “dibujados” e interpretados que están los personajes y lo diferentes que son. Tal y como bien sugiere el propio Balboa en la inolvidable escena de la pista de patinaje: “Somos la pareja perfecta: un bicho raro y una tímida”. A destacar lo increíblemente tierna y veraz que resulta la escena del primer beso de los personajes en el apartamento de Rocky.
El libreto del film “exhuma” sentimiento y cariño en cada una de sus palabras. Un guión que, insisto, hace un magnífico retrato de todos y cada uno de los personajes de la película. Casi todos ellos tienen una gran escena para el recuerdo: el ya comentado beso de Rocky y Adrian. Mickey tratando de convencer a Rocky para convertirse en su manager. Adrian haciendo frente a Paulie. Apollo en el ring disfrazado del tío Sam… En definitiva, entre manos tenemos una historia que llega directa al corazón del espectador y que te hará reír, emocionar e incluso llorar… ¿Se puede pedir más? Creo que no. ‘Rocky’ se llevó el Oscar a la “Mejor película”.
Esta fue una película enteramente familiar. Stallone coló en sendos cameos a su hermano Frank como uno de los vagos y cantantes del barrio. Su propio padre es el tipo que toca la campana en el combate contra Apollo. Además, Sasha Czack (por aquel entonces su esposa) colaboró en la fotografía del film. Por si fuera poco, Butkus (el perro de Stallone) se convirtió en la cinta en el perro de Rocky. Todo esto revela el escaso presupuesto con el que se filmó la cinta. De hecho, muchas escenas se rodaron sin cortar las calles de Filadelfia y Stallone interactuaba con la gente que transitaba por ellas. Por ejemplo, durante el entreno corriendo un hombre le lanzó de manera espontánea una naranja (esa escena se puede ver en el metraje).
Mención aparte merece la banda sonora de Bill Conti que, al igual que comentó mi compañero Carlos G. en “Una nueva esperanza”, contribuye a engrandecer más si cabe a la película. Es una BSO cuyas melodías suenan siempre en el momento justo con composiciones tristes, melancólicas y solitarias… pero también románticas y tremendamente optimistas con el absolutamente inolvidable “Gonna Fly Now” a la cabeza.
También muy buena culpa de redondear la función tuvo la dirección de John G. Avildsen (siempre lo recordaremos por esta película y por ‘Karate Kid’). Sin olvidar el excelente montaje de Scott Conrad y Richard Halsey que contribuye a que todas las secuencias se unan de una manera tremendamente natural y que no se sienta ningún corte ni bajada de ritmo. Avildsen fue premiado con un Oscar a la “Mejor dirección”. Por su parte, Scott Conrad y Richard Halsey con el Oscar al “Mejor montaje”.
“¿Quieres un buen consejo? ¡Retírate del boxeo!”… Perdedores de Filadelfia.
En el reparto de ‘Rocky’ destacan todos y cada uno de los protagonistas. No en vano, casi todos ellos estuvieron nominados a los Oscars de ese año en las diferentes categorías. Sylvester Stallone, Talia Shire, Burgess Meredith y Burt Young.
Sylvester Stallone da vida a Rocky en el que fue, sin duda, el papel de su vida. Este fue un personaje que Sly escribió a su imagen y semejanza de aquella época. Realmente lo bordó entregando a un joven perdedor de gran corazón que pasa el día dando consejos, contando chistes malos y peleando en tugurios. También recauda dinero en los muelles para el mafiosillo local e intenta conquistar el corazón de Adrian.
Adrian es interpretada sobresaliente y tiernamente por Talia Shire. La actriz nos entrega a una chica tímida y “derrotada” a la que todos querríamos proteger y dar cobijo. Como ya he comentado en párrafos anteriores, inolvidables son las escenas que Stallone y Shire comparten en la pista de patinaje, su primer beso o ese final con Rocky en el ring desesperado llamándola con sus últimas fuerzas.
También destacaron Burt Young y Burgess Meredith. Burt Young hizo suyo por completo al personaje de Paulie, el bruto hermano de Adrian que resulta ser a la vez el mejor amigo de Rocky. Paulie no era mal hermano, puesto que sólo quería lo mejor para su hermana. Sin embargo, le perdían por completo sus modales y el tenerla prácticamente sometida como a una “derrotada”. A destacar que Burt Young interpretaría a Paulie en todas y cada una de las secuelas de la saga.
Por su parte, Burgess Meredith dio toda una lección como Mickey. Mickey era un viejo y malhumorado exboxeador dedicado a entrenar a los jóvenes valores del barrio. Su relación con Rocky es totalmente de “amor-odio”. Mickey sabe del talento de Rocky y le duele verlo hacer de “cobrador/matón”. Absolutamente mítica es la escena que Meredith comparte con Stallone en la casa de Rocky. Esa escena destila por completo la nostalgia de los tiempos pasados de Mickey. Además, revela la relación de “amor-odio” antes comentada. ¡Sublime!
Finalmente, hay que mencionar también a Carl Weathers. El coloso de ébano entrega una interpretación repleta de carisma, brillantez y presencia como Apollo Creed, el invencible, poderoso y técnico campeón de los pesos pesados. Un campeón cuyo ego ha crecido tanto como sus victorias. Aquí tenemos el ejemplo de otro actor, Weathers, que también lo dio todo con este papel convirtiéndolo en el mejor y más recordado oponente de Rocky. Tan es así que su legado ha llegado hasta nuestros días con el film ‘Creed’ de Ryan Coogler.
Y sería totalmente injusto terminar este repaso a los protagonistas del film sin hacer mención a Tony Burton como Tony, el entrenador de Apollo. Su papel es totalmente secundario en esta película pero a la vez de gran importancia. Resalto su importancia porque, junto con Sylvester Stallone y Burt Young, era el único actor que estuvo repitiendo rol en todas las secuelas de la franquicia. En cada una fue cogiendo más minutos e importancia.
En conclusión.
La importancia de ‘Rocky’ no la representan todos los premios y nominaciones que recibió. Su importancia se debe a que es una de esas películas que logró trascender más allá de la gran pantalla para convertirse no ya en una “religión” (como es el caso de “Star Wars”) sino en una fuente de inspiración y modo de vida. Inspiración y modo de vida para todos aquellos que alguna vez hemos soñado en nuestro corazón con alcanzar un sueño. Eso es lo que es por encima de todo esta película: sueños y corazón.
“¿Rocky Balboa? Jamás he oído ese nombre” (Jergens)
Curiosidades.
-‘Rocky’ ganó 3 Oscars (Director, Montaje y Película) y fue nominada para otros 7. En esas siete se incluyeron las nominaciones de Stallone para “Mejor actor” y “Mejor guión”. Esto era un logro que sólo Charles Chaplin y Orson Welles habían conseguido con anterioridad.
-El montaje definitivo del film tenía otro final. En ese final Rocky se reunía con Adrian y se iban del estadio cogidos de la mano (imagen recogida en algunos pósters de promoción). Por el camino se encontraban a Spider Rico (Pedro Lovell) y hablaban con él sobre que ellos no pertenecían a las “Grandes Ligas del Boxeo”. Por motivos de dinero, y metraje, el propio Stallone decidió cortar todo eso. En su lugar decidió terminar la película congelando la imagen en el mayor momento de gloria en la vida de Rocky. Esa “congelación” de imagen se convertiría en costumbre en las siguientes secuelas.
Tráiler de Rocky
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Palabras mayores de la historia del Cine. Rocky es la lucha de un boxeador por boxear, y de un actor por llegar a lo más alto.
Coincido mucho la reseña del amigo David, es una película que tiene más corazón que puñetazos, un drama humano con el que Stallone demostró que era un tipo que sabía contar historias. Desgraciadamente hay mucha gente que es ver su nombre en el cartel y automáticamente se la caarga, me temo que eso no va a cambiar nunca. Pero los que sí hemos sido capaces de disfrutarla sin prejuicio alguno somos afortunados.
Clásico generacional y, afortunadamente, reivindicada a lo largo del tiempo. Intensa, pulcra y entretenidísima.
Obra absoluta. Mi película favorita de mi saga favorita. Poco voy a descubrir de este peliculón.
Es una de esas películas con las que ries, lloras y te levantan del asiento, como pocas lo hacen.
Enorme crítica, me ha encantado leerla. No puedo aportar nada más que no haya dicho ya Latura. Sin duda, Rocky ha sido para mí una fuente de inspiración, es puro corazón.