Hitman: Agente 47
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Nueva adaptación del famoso asesino de los videojuegos, el agente 47. Esta nueva aventura prometía ser más fiel que la cinta que dirigió Xavier Gens en 2007 con Timothy Olyphant. Ahora le toca el turno a Rupert Friend de convertirse en el calvo más famoso de los videojuegos. ¿Habrá estado a la altura de… ‘Hitman: Agente 47’?

“¿47? eso no es un nombre” (Sander)
“Es el mio” (47)

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Crítica de Hitman: Agente 47

Cuando se trata de adaptaciones de videojuegos al cine, el tema no está precisamente para estar muy contentos. Salvo un par de adaptaciones concretas (Silent Hill’ o ‘Prince of Persia’, entre ellas), las cintas de este estilo han sido muy pobres y escasamente atrayentes. La Fox ya lo intentó en 2007 con Hitman’. Esa película de Xavier Gens fue la primera adaptación del calvo más famoso de los videojuegos: el agente 47. Este personaje es un misterioso asesino que no tiene nombre (salvo el del código de barras). Además, es más frío que el hielo a la hora de cumplir los sucesivos asesinatos que se le asignan. La pregunta es: ¿Qué han mejorado frente a la versión de Gens? La respuesta es ¡prácticamente nada!

Entremos ya en materia en esta crítica de Hitman: Agente 47. El film de Gens, sin parecerme la leche, tenía sus elementos decentes. Recordemos que Olyphant era un buen 47, la trama tenía sus puntos y, al menos, no era de vergüenza ajena. Aquí sucede todo lo contrario, aunque el film tiene una o dos virtudes. Empecemos primero por lo más rescatable. En esta nueva adaptación se mantienen ciertos guiños al material de procedencia bastante divertidos (aquella imagen del tío dentro de una bañera totalmente electrocutado) cosa que el film de Gens no tenía. Por descontado que la banda sonora de Marco Beltrami, macarra total, es lo mejor de esta nueva propuesta. Su BSO queda muy por encima del film.

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¡Y ya hemos terminado con las cosas buenas! Revisemos ahora las malas. El primer desacierto es el guionista del meollo, Skip Woods. Este hombre es quizás el peor guionista de acción de los últimos años, responsable de La jungla 5”… ahí es nada. En esta ocasión se las intenta dar de listo con el libreto. Todo a la vez que intenta despistar al espectador avispado con ciertos detalles y demás, sobre todo con los personajes y su lealtad…

No obstante lo anterior, lo peor es la absurda intentona de “humanizar” hasta los extremos a 47. El agente 47 siempre ha sido un témpano andante. Además, por mucho que su adversario sea hipermejorado, él siempre va un paso por delante de sus objetivos… Sin embargo, el señor Woods se las da de Nolan e intenta hacer de 47 un «pelele». Incluso le enchufa un “sidekick” con la forma del personaje de Hannah Ware (ojito con su rol).

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El otro problema es que el reparto apenas tiene espacio para sacar adelante a los personajes. Quizás Rupert Friend es el que sale más o menos airoso, pero queda un tanto por debajo de Olyphant. Tampoco destaca lo que se dice enormemente la presencia de Zachary Quinto en su personaje de Smith. Quinto pintaba ser el mejor actor de toda la peli, pero es que el personaje tampoco da para más.

Por otro lado, veteranos como Thomas Kretschmann y Ciaran Hinds pasan sin pena ni gloria. El primero como el malo maloso que apenas tiene desarrollo. Y el segundo, que tiene más minutos que el primero, obtiene un desarrollo paupérrimo. Esto, nuevamente, es culpa del guión de Woods.

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Llegamos entonces a Aleksander Bach, un completo debutante en esto de dirigir películas (era director de videoclips). Aquí su dirección pasa bastante desapercibida, a pesar de cierta set-piece que transcurre en el centro de Singapur (quizás la más decente de todas las que pueblan la cinta). También se nota un sobreabuso de ‘Matrix’ (y no me refiero al “Bullet Time”). El problema es el mismo que tienen todas las pelis de acción de presupuesto medio-bajo, esto es: sus realizadores no tienen personalidad y esto le pasa factura a la cinta. Lo que sí es de agradecer es que los efectos visuales no sean tan cantosos y algunos más o menos son decentes. Amén también de la calificación R. No obstante, estos no son alicientes para mejorar la cinta ni convertirla en algo mínimamente entretenida.

“Dicen que eres una leyenda” (Smith)
“Eso es para los que están muertos” (47)

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En conclusión.
‘Hitman: Agente 47’ no hace sino engrandecer la correcta cinta de Xavier Gens estrenada anteriormente. ¿Por qué? Pues por culpa de un libreto espantoso y pobre, unos loables intérpretes que no sacan para nada buenos personajes y un director al que le venía grande el proyecto. Lo mejor, sin duda, sus guiños a la saga de videojuegos y la macarra banda sonora de Marco Beltrami.

Tráiler de Hitman: Agente 47

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