Sin ley (Lawless)
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En tiempos desesperados… medidas desesperadas. Y eso es lo que se vive y respira en este film. Para poder verla en España tuvimos que esperar más de tres años desde de su estreno en Estados Unidos. El haberse visto durante tanto tiempo postergada la sitúa dentro de la dupla maldita de Tom Hardy en nuestro país junto a ‘Warrior’. Además la lleva directa a la lista de films hundidos gracias a sus mismos creadores, los impresentables hermanos Weinstein. Dicho esto, valoremos el contenido y que hierva el alcohol. Es tiempo de prohibición. Es el momento de vivir… ‘Sin ley (Lawless)’.

“Somos los Bondurant… y no nos doblegamos ante nadie” (Forrest)

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Crítica de Sin ley (Lawless)

Tremendamente áspera y, en muchos momentos, devastadora película firmada por John Hillcoat. Los antecedentes del realizador, ‘La carreteray ‘La propuesta’, ya avanzaban que aquí, nuevamente, estaría muy presente ese desolador tono con el que impregna a sus films. ‘Sin ley (Lawless)’ se apoya en torno a un grupo de hermanos que en el Condado de Franklin (Virginia) llevaron a cabo un firme enfrentamiento contra las autoridades. Todas ellas corruptas y que pretendían extorsionarles durante los tiempos de la ley seca… El film supone la adaptación a la gran pantalla de The Wettest Country in the World’, una historia verídica de la América menos recordada y escrita por uno de los hermanos Bondurant. En esos relatos se basó Nick Cave (habitual colaborador de Hillcoat) para redactar el libreto. Un guión cuya trama abarca desde los años 20 hasta pasados los 30.

Aunque fuera en 2015 cuando nosotros la pudimos ver editada en España, fue en 2012 cuando vio la luz tanto en USA como en el Festival de Cannes. En el citado evento fue incluso nominada al máximo galardón del certamen, la Palma de Oro. Y ¡ojo! aunque el espectador pueda pensar que este largometraje no fue visto en nuestro país por ser un fracaso en USA… esto no es del todo cierto. En territorio americano recaudó unos correctos 36 millones de $. Y, a pesar de la poca confianza con la que se movió por The Weinstein Company, logró llegar a los 53 millones mundiales con un presupuesto estimado en menos de 30.

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‘Sin ley’ está protagonizada, casi a partes iguales, por un trío de actores que llevan a cabo un notable trabajo. Me refiero a Tom Hardy, Jason Clarke y el antes famoso Shia LaBeouf. Los tres son seguidos muy de cerca por Jessica ChastainLaBeouf tiene a su cargo el rol con más minutos y el que más simpatías debe despertar al espectador. El resto de personajes apenas hacen nada por resultar agradables a ojos del respetable… simplemente van buscando su lugar en el mundo en unos tiempos en los que a la mínima te señalaban por no ser parte de la manada. En la cinta vamos a ver a muchos seres humanos puestos al límite en tiempos tan duros en los que al final la deshumanización, y la represión de los sentimientos, es lo que tocaba… si querías sobrevivir.

No hay nada en ‘Lawless’ que invite a pensar en un mundo de color y fiestas sin fin del estilo deEl gran Gatsby(Baz Luhrmann, 2013). Aquí estamos para: nacer, vivir (más bien) malvivir, y morir… Esto último muy posiblemente de hambre o levantando del piso por una bala, o si te pillaban huyendo/robando/jodiendo a quien no debías por una lluvia de balas proveniente de las imponentes metralletas Thompson de tambor.

Como consecuencia de todo lo comentado hasta ahora, la nota para su dirección y fotografía no pueden ser más que notables, valorando lo visto en pantalla. Igual nota va para el reparto de intérpretes que, recitado de carrerilla, es de aúpa. Atención porque además de los tres ya mencionados, por el film también veremos a: Mia Wasikowska, Dane DeHaan, Noah Taylor y un actor tan dado a los tour de force como Gary Oldman. Este último hay que reconocer que en el film está tristemente desaprovechado.

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Del elenco conviene destacar sobre todo a un inmenso Tom Hardy. ‘Sin ley (Lawless)’ es su enésima demostración de talento y de cómo un actor es capaz de usar todo su cuerpo, transformándolo y cincelando a la perfección, para ofrecer una interpretación imponente. Atención a cómo llena las botas de su personaje, un tipo que mide mucho las palabras, las cuales son tan contundentes como sus puños. Su Forrest Bondurant era un hombre de movimientos muy controlados y con fama de indestructible. Al igual que el Hércules de Brett Rattner, Bondurant poseía una leyenda que traspasaba su propia vida…

Tampoco conviene dejar pasar a un LaBeouf más que correcto. Incluso con destellos de carisma. LaBeouf aguanta con encomiable aplomo el tipo como el saco de boxeo del resto de los protagonistas, ya sean sus propios hermanos… o el villano repelente. Un malvado al que da vida el siempre excelente y un auténtico experto en transformaciones al límite como es Guy Pearce (en este film con un horroroso peinado). Electrizante, sobre todo, la labor de Pearce en el clímax ya totalmente fuera de control y queriendo llenar la ciudad de cadáveres.

También se deja ver Jason Clarke dando vida al mediano de los hermanos. Su personaje es un hombre alcoholizado que parece estar siempre alerta para meterse en problemas (un papel muy recurrente en su filmografía). Lástima la muy menor participación de Gary Oldman. Apenas tres-cuatro breves escenas, en un personaje que parecía prometer mucho al inicio… pero que, posteriormente, se demuestra que está claramente de pasada por el metraje. Seguramente los minutos de Oldman en pantalla se borraron en favor del personaje de Wasikowska y Chastain. Ambas actrices interpretan a los intereses amorosos de LaBeouf y Hardy.

“Somos supervivientes, controlamos el miedo. No tener miedo es casi como estar muertos” (Forrest)

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En resumidas cuentas.
Acabo esta crítica de Sin ley (Lawless), un durísimo drama con tintes de noir y relato criminal clásico. Una historia entorno a unos tiempos en los que la vida valía menos que una botella de alcohol destilado artesanalmente y se mataba como si aquello fuera normal. Y todo al mismo tiempo que uno no lograba diferenciar entre los tipos que llevaban placa, y supuestamente defendían la ley, y los contrabandistas. En definitiva, un film que en conjunto muestra a la perfección lo que debía ser vivir en aquellos años en la América profunda y rural. Y la confirmación de Hillcoat como un director cuya visión del arte es siempre digna de verse en pantalla grande.

Tráiler de Sin Ley (Lawless)

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