Marlowe
Un maduro Philip Marlowe está pasando por una mala racha cuando es contratado por una dama de la alta sociedad llamada Clare Cavendish. La bella aristócrata quiere que el reputado detective encuentre a su amante que ha desaparecido misteriosamente. Lo que, a priori, parecía un caso fácil de resolver… pronto se convertirá para Marlowe en una red de mentiras en la que todos los implicados tienen algo que esconder. (Cineycine).
Según IMDb, estamos ante la película número 100 en la filmografía de Liam Neeson. ¡Y qué mejor ocasión que esta para recuperar para la gran pantalla a un mítico detective del cine negro! Hoy toca volver a contratar los servicios de todo un clásico sabueso llamado Philip ‘Marlowe’.
“Todo el mundo quiere algo de alguien. Al final son todo chantajes” (Nico)
Crítica de Marlowe
Después de estrenar ‘La viuda’, en 2018, Neil Jordan regresa a cines. Y lo hace con una película en la que intenta rescatar y traer de regreso a nuestros días el clásico cine negro de los años 40. La intención es loable, pero la propuesta no es todo lo brillante que podía haber sido. Claramente hay aspectos en ‘Marlowe’ que lucen unos más que otros. Por ello, no creo que se pueda afirmar que estemos ante un film redondo. En las siguientes líneas ahondaremos en ello…
Para empezar, resulta obligatorio destacar que esta película revive para el cine a Philip Marlowe. Recordemos que este inolvidable detective fue creado por Raymond Chandler, el reconocido escritor norteamericano de novela negra y policíaca. La primera aparición de Marlowe tuvo lugar en ‘El sueño eterno’, obra publicada en 1939. Posteriormente, el libro sería llevado a cines en 1946 por Howard Hawks en un film con título homónimo y protagonizado por una pareja legendaria: Humphrey Bogart y Lauren Bacall. Con el paso del tiempo, serían otros actores los que también encarnarían a Marlowe. Algunos de estos intérpretes serían: Robert Mitchum, James Garner, James Caan,… y así hemos llegado a Liam Neeson.
La trama adapta lo narrado en ‘La rubia de ojos negros’, una novela escrita por John Banville resucitando al mito de Marlowe en 2014. El propio Neil Jordan y el oscarizado William Monahan son los autores del guión. Un guión muy típico del cine de detectives que se va enrevesando según avanzan los minutos y afloran los descubrimientos. Por supuesto, aquí están presentes: la típica visita inicial de la dama elegante al despacho del detective, las entrevistas e interrogatorios a sospechosos, la búsqueda de pistas, los intercambios con la policía, las visitas a lugares poco recomendables, alguna pelea a puñetazos, los personajes importantes que tienen algo que tapar y, claro, las mujeres fatales. Esta es la atmósfera del film que no creo decepcione a los amantes del género…
También quisiera destacar el aire de metacine que exhibe el libreto. El mismo le viene provocado porque el amante desaparecido trabajaba en la ascendente industria del Hollywood del momento. Esto da lugar a una serie de referencias fílmicas, entre ellas a directores como Alfred Hitchcock o Leni Riefenstahl. Y también sirve como medio para denunciar los abusos que tenían que soportar algunas estrellas femeninas para intentar conseguir una carrera de cierto renombre. Realmente este aporte sirve para mejorar el conjunto del script.
No obstante lo anterior, todo lo que en su tiempo sirvió para encumbrar grandes títulos, actualmente se ve por muchos espectadores como algo desfasado y sin valor. Esa es la realidad en la que nos movemos actualmente con cientos de miles de películas vendidas al poder de la imagen… De ahí que cintas de estilo clásico como esta tengan tan poco reconocimiento y/o valor en taquilla con independencia de su calidad final.
Por otro lado, para la ambientación del film sólo caben elogios. Hay que recordar que ‘Marlowe’ se rodó, principalmente, en tierras catalanas e irlandesas. Estos lugares se hicieron pasar en la producción por la Baja California. Y lo cierto es que ambos territorios dan perfectamente el pego en pantalla. Tan es así que, si uno no conoce los lugares de filmación, puede quedar perfectamente engañado. Ya sólo por esto, la película merece ser tenida en cuenta. Específicamente, ‘Marlowe’ se rodó en exteriores e interiores de Sitges, Alella, Blanes, Manresa, Terrassa, Dublín y, por supuesto, también en algunas zonas de la propia California. Apuntar que la fotografía corresponde al barcelonés Xavi Giménez, un director que ya ha participado en propuestas importantes a las que hace mejores con su trabajo. Y esto es algo que también sucede en ‘Marlowe’, tal y como acabo de exponer.
La banda sonora sigue el estilo marcado por Neil Jordan para la producción. Con esto quiero decir que su aire es totalmente clásico con cero estridencias y ayudando a meterte en la atmósfera. Su autor es el británico David Holmes.
El casting, a priori, era lo mejor de toda la propuesta por sus grandes, aunque olvidados, nombres. Sin embargo, no todos consiguen brillar en sus respectivos papeles. Para empezar me cuesta mucho ver a Liam Neeson en los zapatos de Marlowe. Quizás esté el hecho de que nunca he conseguido sacarme de la cabeza al mítico Humphrey Bogart. Este detective de Neeson nos dicen que es Marlowe, pero lo malo es que podría ser cualquier otro… También esperaba bastante más de Diane Kruger, que se controla excesivamente como Clare Cavendish, la rica heredera que contrata los servicios de Marlowe. La última “decepción” es la de Adewale Akinnuoye-Agbaje limitándose a plantar su gigantesco físico en pantalla haciendo de chófer.
Dejando atrás las “decepciones”, es justo resaltar lo mucho que se luce Jessica Lange en su rol de Dorothy Quincannon. La veterana actriz saborea con sumo gusto sus intervenciones como esta rica viuda que antaño fue una gran estrella de cine. Otro que también está bastante correcto es Danny Huston como Floyd Hanson, el duro gerente de “La Corbata”, una especie de chalé para el disfrute de la gente de clase alta que oculta un sórdido secreto. Y otro que siempre está bien interpretando a personajes miserables es Alan Cumming. Aquí se vuelve a lucir como Lou Hendricks, un tipo que piensa que tiene a todo el mundo vigilado. Y ya por último nos quedan François Arnaud y Daniela Melchior. Ambos quedan en terreno de nadie por culpa de sus pocos minutos. El primero interpreta Nico, el amante desaparecido… y la segunda a su hermanastra.
“Quizá Cavendish sí sea nombre de pila…” (Clare)
En conclusión.
Termino esta crítica de Marlowe, con sus luces y sus sombras estamos ante una más que correcta propuesta por rescatar un tipo de película que ya no se lleva. Los que somos amantes del cine clásico de detectives sabremos apreciarla mejor que el espectador casual… aunque sólo sea por su intento de devolvernos a una época en la que el cine era algo más que efectos especiales, presupuestos millonarios, CGI y pantallitas verdes.
Tráiler de Marlowe
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Vista en Amazon prime.
La verdad es que como amante del cine negro la peli para mi cumple. Pero ya. Como bien dice David se podía hacer mas con este guión y plantel.
Y no me ha gustado su final totalmente anticlimático.
Sobre Neeson, lo veo algo desubicado como Marlowe, no termina de creérselo. Si me ha gustado Diana Kruger, Ian Hart, Danny Huston y la siempre gigantesca Jessica Lange. Ojo a la quimica que desprende con Neeson en sus escenas conjuntos rememorando su trabajo juntos en Rob Roy.
También estoy de acuerdo con David en cuanto a la sensacional fotografía y ambientación. Las cuales son notables.
En definitiva, un film que va de mas a menos y que sin duda con otro actor para este Marlowe y un mayor esmero en cerrar la tramas propuestas hubiese llegado a notable.
D: 7 G: 6 R: 6,5= 6,5.