X-Men orígenes: Lobezno
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‘X-Men orígenes: Lobezno’ nos ofrece una entretenida película de acción con los aspectos positivos y negativos del cine actual. Particularmente pienso que se ha perdido una gran oportunidad con este film. Una oportunidad de dar vía libre para que Hugh Jackman nos ofreciera una interpretación más violenta y salvaje. Especialmente al estar alejado de «X-Men» que venían a limitarlo.

“A dónde yo voy no hay redención alguna” (Lobezno)

Crítica de X-Men orígenes: Lobezno

Comenzando esta reseña es justo decir que estamos ante una buena película de acción. Ahora bien, es una buena película de acción superheróica “de las que se hacen ahora”. Esto significa que la misma tiene cosas buenas y cosas realmente malas. Primero vamos de forma breve con lo bueno. Para empezar, como precuela de las películas que forman la trilogía original de los “X-Men” funciona francamente bien. También funciona de manera correcta como película de «acción actual» contando un gran clímax final.

Evidentemente es obligado resaltar la presencia del carismático Hugh Jackman. El actor australiano se supo labrar una reputación como Lobezno digna de admirar y luciendo fenomenal como tal. No obstante, pienso que su performance podía haber dado más de sí. Para ello, ‘X-Men orígenes: Lobezno’ tendría que haber sido mucho más oscura y violenta. Jackman demuestra, en determinadas escenas, que sabía dotar a Logan de toda su rabia interior. Así las cosas, es una pena que no nos lo dejaran disfrutar al máximo en este film.

Destacar que Jackman entrenó muchísimo para volver a dar vida a Lobezno en la gran pantalla. El actor se levantaba a las 06:00 horas para hacer pesas vestido ya de Logan para motivarse el doble. Jackman quería que Lobezno esta vez diera miedo de verdad. También incrementó su consumo de calorías y proteínas hasta niveles propios de un atleta profesional. Los resultados saltaron a la vista… especialmente si los comparamos con la floja forma física que exhibió en X-Men (Bryan Singer, 2000).

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Al lado de Jackman hay que comentar también la muy buena aportación de Liev Schreiber. El actor californiano interpreta a un gran Victor («Dientes de Sable»). Parece que Schreiber lo pasó en grande con este papel. De esta forma, sabe transmitirnos todo su entusiasmo y la villanía de su personaje, regalándonos otra destacada actuación similar a la de Jackman. A buen nivel están también Taylor Kitsch como Gambito y Danny Huston en su rol del malvado Stryker.

Otro motivo de disfrute es ir viendo a los diferentes mutantes que asoman su careto por la película. No los citaré para evitar «spoilers» y porque prefiero seáis vosotros los que vayáis disfrutando con sus apariciones. Por otro lado, el hoy muy famoso Ryan Reynolds, alias Deadpool (Tim Miller, 2016), no lució aquí mucho más allá de formar parte del escuadrón del «Equipo X». Además, en la parte final de la película fue sustituido por un no-acreditado y brutal Scott Adkins. Con el tiempo, Reynolds convirtió su participación en esta cinta en motivo de risas y metacine.

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Y hasta aquí las buenas noticias. Ahora toca hablar de las malas noticias que básicamente son las siguientes… Antes he comentado que estamos ante una película de “acción actual”,  con esto quiero decir que no hay nada de sangre. Y cuando digo nada quiero decir eso exactamente: NADA. Si esto ya es un mal endémico en la mayoría de los films de acción superhéroica actuales, aquí el tema cobra mayor importancia. Es absolutamente rechazable que en una película en la que se cuenta la vida y andanzas de Lobezno no se derrame ni una gota de sangre, cuando cualquier aficionado a Marvel sabe que Logan es uno de sus personajes más violentos e incontrolables. Logan cuenta con un lado animal y feroz que hace palidecer a la versión más salvaje de Hulk.

Otro aspecto muy negativo es la escasa importancia que tiene el proceso de fusión del adamantium con los huesos de Logan. Un proceso que en el cómic ‘Arma X’ fue traumático, violento y asfixiante a más no poder. Sin embargo, en esta propuesta todo eso se ventila en menos de 10 minutos (más o menos) y con un escaso sufrimiento (en comparación al cómic) por parte de Lobezno. ¿Para eso tanto flashback en las películas de los “X-Men”?.

Da verdadera pena que una obra como la de Barry Windsor Smith se ventile de forma tan “rápida”. Puedo entender que se hiciera un breve homenaje al cómic Lobezno: Origen’ y se pasara casi de puntillas (y a través de los créditos iniciales) por los acontecimientos históricos más importantes en los que participó Lobezno. Lo entiendo porque había una precuela que contar. No obstante, si en las películas de los ‘X-Men’ algo que precisamente atormentaba a Logan era su creación militar, entonces, no puedes darle la “poca importancia” que se le da en esta película.

“Lo que busco es sangre no reglas de conducta… ni una ley” (Lobezno)

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En conclusión.
La conclusión es clara en esta crítica de X-Men orígenes: Lobezno, estamos ante una entretenida película superheróica actual. Una cinta que ofrece un buen espectáculo para que pueda ser disfrutado por casi toda la familia. En consecuencia, esto posibilita (o no) una mayor recaudación. A los que pedimos algo más de «realismo», traducido en mayores dosis de cruda violencia, siempre nos quedará esperar a la próxima vez.

AVISO: No dejéis de ver enteros los créditos finales. La película continúa a los breves instantes de iniciarse estos y finaliza al acabar totalmente los mismos.

Tráiler de X-Men orígenes: Lobezno

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