No te preocupes querida
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¿Se puede cambiar el mundo y levantar una idílica comunidad trabajando en el desarrollo de “materiales progresivos”? Parece que la respuesta es ¡sí! Pero el medio para conseguir tanta felicidad y avance es un misterio. Por eso, cuando una mujer empieza a sospechar y desea marcharse se la intenta calmar con el típico ‘No te preocupes querida’.

“Aquí estamos cambiando el mundo” (Frank)

Crítica de No te preocupes querida

La actriz Olivia Wilde nos presenta su segunda película para cines después de sorprender en 2019 con ‘Súper empollonas’. Y la primera sorpresa de ‘No te preocupes querida’ es todo el ruido mediático provocado en torno al film. Y no precisamente para alabar su calidad o resaltar su mediocridad… sino por la rumorología sensacionalista (o no). En el siguiente párrafo haré un breve resumen para exponer las condiciones externas al rodaje del film. Incidencias diversas que, personalmente, considero le hacen puntuar más en positivo al sobreponerse, en mi parecer, a toda su problemática.

La producción no fue nada tranquila y su exhibición en Venecia no le fue a la zaga. Ya antes de comenzar la grabación el polémico Shia LaBeouf fue despedido de la misma. Supuestamente fue Olivia Wilde quien lo despidió. Sin embargo, LaBeouf la desmintió al publicar varios mails probando que fue él quien abandonó el barco… Durante la filmación el ambiente se enrareció cuando Florence Pugh sorprendió a Wilde y Harry Styles en actitudes comprometedoras. Por si fuera poco, Olivia intentó “promocionar” el film aludiendo a las escenas sexuales entre Pugh y Styles… lo que terminó por colmar la paciencia de Pugh. La actriz cortó cualquier relación con la directora, decidiendo además participar sólo lo justo en la promoción del film. Finalmente vino el famoso “escupitajo” de Harry Styles a Chris Pine en Venecia. Este hecho no se produjo, pero desvió toda la atención de la película.

Todo lo que he expuesto anteriormente es más propio de una crónica de “salsa rosa” que de una review de cine. No obstante, creo que es necesario conocer algo por encima la problemática en torno al film. Y lo creo para acercarnos a comprender con lo que han tenido que lidiar todos para que ‘No te preocupes querida’ saliera adelante. Y, visto el resultado, creo que las incidencias sacaron lo mejor del equipo. Para empezar, Olivia Wilde nos entrega una destacada dirección visual. La cinta resulta elegantísima con grandes planos y recursos visuales. No hay más que ver, por ejemplo, como filma la persecución del clímax… o toda la simetría de determinadas escenas. Por no hablar de las leves pero precisas pistas que Olivia nos va dejando acerca de lo que sucede realmente en la urbanización de “Proyecto Victoria”.

En relación con lo anterior tenemos la fabulosa ambientación que nos regala la película. Una ambientación con escenas que son puras postales de los años 50 en movimiento. Basta con ver la idílica y elitista urbanización con sus chalets, jardines, hamacas, piscinas,… También destaca y mucho el uso del color en los vestidos, en los coches clásicos y en el interior de los chalets. Y todo esto puesto en contraste con el desierto al que las familias tienen prohibido acudir. En ese ambiente seco destaca sobremanera el entorno natural y la curiosa casa conocida como Volcano House en Newberry Springs (California). Finalmente tenemos los flashes o pesadillas recurrentes de la protagonista con los espectáculos de danza de la edad dorada. En definitiva, ‘No te preocupes querida’ es una película de facturación impecable que explota cada dólar de sus 20 millones de presupuesto.

En cuanto a la trama decir que la misma se presenta como si fuera un film de Jordan Peele. Me explico, el gran enigma se va desvelando sin prisas para al final llegar a la impactante revelación. La historia, tal y como ya adelanté antes, nos presenta la vida en una idílica urbanización de los años 50. Los hombres acuden cada mañana a trabajar en sus impolutos coches y las mujeres se quedan en casa atendiendo el hogar. Tan sólo hay una prohibición: “No salir de los límites de Proyecto Victoria”. Averiguar el porqué de esto y en qué trabajan realmente los maridos es el principal leitmotiv de la película. En este sentido, la trama bebe clarísimamente de varios clásicos de antes y de ahora. No citaré ningún título para evitar dar pistas de por dónde va el asunto… pero, en este aspecto, el argumento no es original.

Al margen de no presentar una trama original, cuando el gran enigma es revelado te percatas de que hay ciertos agujeros y/o vacíos e incoherencias. Esto último queda patente a poco que hayas prestado atención al ver la película. Además, alguna que otra situación queda en el aire sin resolver y editada de mala manera.

Tampoco se puede obviar en ‘No te preocupes querida’ su apuesta o toque feminista. Comento esto porque la propuesta nos presenta a unas mujeres totalmente dependientes de sus maridos. Mujeres que no se hacen preguntas y que se dedican a llevar unas vidas placenteras. Hasta que una de ellas, Alice, empieza a sospechar que algo no va bien a raíz de un incidente con una amiga. Es entonces cuando nuestra protagonista empieza a cuestionarlo todo y a sentir que algo no va bien… pese a los intentos de su marido por aplacarla o de las alusiones a la paranoia del médico local. Claramente estamos ante una crítica ante aquel modo de vida que relegaba a la mujer a un segundo y sumiso plano.

“Mantén la calma y avanza”. La comunidad.

El reparto reúne una cantidad respetable de nombres conocidos… pero la gran protagonista es Florence Pugh, una de las actrices más en alza. Florence interpreta a Alice Chambers dejando patente su gran calidad actoral. Bien puedo decir que toda la trama descansa sobre sus hombros. Y Florence responde con una actuación top encarnando a una mujer que es una amante y tranquila esposa hasta que sospecha que algo está podrido en “Proyecto Victoria” y cae en la “paranoia”. Bien podríamos decir que en esta cinta Florence representa perfectamente a la típica heroína rubia de las películas de Alfred Hitchcock. Y esto, sin duda, es una gran alabanza y honor.

Al marido de Alice, Jack Chambers, lo interpreta Harry Styles. Pese a su escaso bagaje como actor, el famosísimo cantante le da una gran réplica a Pugh con momentos muy buenos discutiendo con ella sobre su futuro juntos en la comunidad. Para los más morbosos quedan las dos escenas sexuales que protagonizan Pugh y Styles. Realmente no se ve nada en ellas más que a Florence rendida al éxtasis… especialmente en la primera escena sexual: un cunnilingus.

Otra pareja importante como marido y mujer es la que forman Chris Pine y Gemma Chan. Chris da vida a Frank, el gran creador y responsable máximo de “Proyecto Victoria”. Nuevamente tengo que insistir en la gran evolución de Chris Pine como actor superándose en cada nueva encarnación. Aquí disfruta de un papel que lo convierte en una especie de líder mesiánico al que todos los demás siguen por su carisma, personalidad y fuerza de convicción. ¡No faltan ni sus discursos radiofónicos cual telepredicador cantando diariamente las bondades de “PV”! Por su parte, Gemma Chan queda tapada intencionadamente por Pine encarnando a una mujer de carácter que apoya incondicionalmente a su esposo. De alguna forma ella representa el liderazgo entre las esposas de la urbanización.

Del resto del elenco hay que hacer otras menciones obligatorias. La primera es para la propia Olivia Wilde como Bunny, la despreocupada y dominante amiga de Alice con la que comparte confidencias. También está KiKi Layne que es la que desencadena gran parte de las sospechas de Alice al sufrir una tremenda perturbación mental y quedar excluida del grupo de amigas. Finalmente es justo resaltar la inquietante y anti-empática presencia de Timothy Simons como el Doctor Collins, el responsable médico de “PV”.

“Aquí estamos a salvo” (Bunny)

En conclusión.
Concluyo esta crítica de No te preocupes querida, una película con una escenografía y filmación impecable que nos traslada a una auténtica postal de los años 50 en movimiento. Además contamos con un reparto que se desempeña a un nivel muy alto y una trama lo suficientemente intrigante como para mantenernos expectantes durante sus 122 minutos.

Tráiler de No te preocupes querida

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