El jugador
Jim Bennett es un profesor de Literatura con una fuerte adicción al juego, de hecho, es un yonqui del juego. Una noche se pasa de la raya y termina contrayendo una gran deuda con mafiosos coreanos y afroamericanos. Ahora sólo tiene siete días para hacerse con el dinero y pagarles. ¿Lo conseguirá? (Cineycine).
Rupert Wyatt, director de ‘El origen del planeta de los simios’ (2011), se volvió a sentar en la silla de mando para rodar otro remake. En esta ocasión del film de 1974 dirigido por Karel Reisz y protagonizado por el duro James Caan. Es hora de volver a apostarlo todo. Es la hora de la victoria total o de la nada. Mark Wahlberg se lo juega “todo al negro” en… ‘El jugador’.
“Eres de esos tipos a los que les gusta perder”
Crítica de El jugador
En este film toda la trama se desencadena a partir de la deuda que contrae Jim Bennett en los minutos iniciales. A partir de ahí, el director Rupert Wyatt entrega una dirección correcta y sin ningún tipo de florituras. Una dirección en la que la acción se va desarrollando en los siete días que los mafiosos han dado de plazo a Bennett para pagar. A lo largo de esa semana seremos testigos de cómo este “nihilista” profesor de Literatura se las ingenia o no… para conseguir el dinero. De esta forma, nos adentraremos en su vida personal y profesional y, sobre todo, veremos de qué pasta está hecho.
Efectivamente, ‘El jugador’ es ante todo una película de un personaje. El personaje de Jim Bennett, interpretado por Mark Wahlberg (Mark Wahlberg películas). No es que no haya otros protagonistas con cierta trascendencia, lo que pasa es que todos ellos están puestos al servicio, de una u otra manera, de Bennett. Unos están para acosarle, otros para intentar apoyarle y otros simplemente para hacer “bulto” o completar el reparto.
Siguiendo con lo anterior, el guión firmado por William Monahan (‘Al límite’), destaca por lo mismo que la película, esto es, por Mark Wahlberg. El actor tiene a su cargo unas buenas frases que repartir cargadas de negatividad. También hay que destacar momentos puntuales tremendamente acertados como son: todos aquellos en los que coinciden en pantalla Wahlberg y una hoy olvidada Jessica Lange y, sobre todo, el momento en el que Frank (John Goodman) le enseña a Jim Bennett lo que significa estar en una posición de “que te jodan”.
Como vengo exponiendo a lo largo de esta reseña, toda esta película está concebida para el lucimiento interpretativo de un intencionadamente demacrado Mark Wahlberg. Y la verdad es que actor nacido en Dorchester está francamente bien en su papel de Jim Bennett. Especialmente destacadas son las secuencias en las que imparte clase o los minutos finales del film.
Bennett es un tipo totalmente desencantado de la vida. Un casi (y sin el casi) nihilista cuyas máximas son: “Si no eres un genio… no lo intentes” y “O eres el mejor y triunfas por todo lo alto o no vales nada”. Además, es un jugador incontenible para el que los juegos de azar significan su válvula de escape sin importarle mucho si gana o pierde. Para él lo importante es la evasión que el juego le produce. Ahora bien, todo este nihilismo se empezará a volver en su contra cuando su personalidad, y particular adicción, empiece a afectar de manera peligrosa a todos los que le rodean.
Y entre todos esos que le rodean cabe destacar a una olvidadísima Jessica Lange, que en los minutos de los que goza en pantalla luce muy bien como Roberta, la temperamental madre de Bennett. Una madre que tiene una particular relación de amor-odio con su hijo. También destaca Michael Kenneth Williams como uno de los mafiosos a los que debe dinero Bennett.
Otros papeles con cierta importancia van para la hoy muy cotizada actriz Brie Larson como Amy, una de las alumnas de la clase de Literatura que se interesará por Bennett más allá de las aulas. También llamar la atención sobre un John Goodman (Frank) que nunca pasa desapercibido. En esta ocasión llena literalmente la pantalla. Por último del veteranísimo George Kennedy nada que comentar. Si Kennedy sale dos minutos ya son muchos (hace del abuelo moribundo de Jim). Como curiosidad recordar que el oscarizado actor falleció el 28 de febrero de 2016, siendo esta la última película de su larga carrera cinematográfica.
“Al final la deuda se hace demasiado grande” (Mister Lee)
En conclusión.
Termino esta crítica de El jugador, una película en la que destacar algo que no sea Mark Wahlberg se hace complicado (quizás algunas escenas con buenos diálogos junto a Jessica Lange y John Goodman). Wahlberg es el principio y el final del film, quedando esta como una cinta que bien podría haber dado bastante más de sí y haber resultado más atractiva, ya que, por ejemplo, visualmente se queda en un producto un tanto triste o cuanto menos poco llamativo, tal y como le sucede al propio póster del film.
Tráiler de El jugador
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Como dice Latura, Mark Walhberg es la pelicula, esta sobresaliente en el filme, mas que nada, porque su personaje es un c***n que se gasta el dinero de quien no debe por su adiccion al juego, ademas hay algunos dialogos brillantes entre el y el personaje de Jessica Lange… pero no es suficiente para lograr un notable o una nota mas alta.
El problema que veo es que la pelicula tiene potencial para ser mas profunda de lo que es, falta garra en su direccion (Rupert Wyatt, no tiene garra alguna ni fuerza ni pulso, le paso en la de los Simios y le pasa en esta), casi toda la fuerza reside en el guion, el problema es el director, el correcto entre los correctos.
Ya lo decía Snipes en ‘Pasajero 57’ apuesta siempre al negro.
jajaja… ¡cierto, cierto! mucho me acordé de eso al poner la frase… jajaja.