Dark City
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Hace 25 años Alex Proyas, director deEl cuervo (1994), escribió y dirigió una película cuya exótica mezcolanza de géneros la convirtió no en un éxito… pero si en un film de esos que, con el tiempo, logran alzarse con la etiqueta de “film de culto”. Bienvenidos a una ciudad sumida en una negra y eterna noche. Bienvenidos a ‘Dark City’.

“Al principio había oscuridad… luego llegaron Los Ocultos…” (Doctor Schreber)

Crítica de Dark City

Empiezo esta reseña sin rodeos: estamos ante todo un clásico de culto y, muy probablemente, ante la mejor película de Alex Proyas. El conocido cineasta nacido en Egipto dirigió esta interesantísima historia de la que luego beberían, en mayor o menor medida, muchas series y películas posteriores, especialmente la famosísimaMatrix’, estrenada tan sólo un año después por las hermanas Wachowski. Del guión se ocupó el propio Proyas con la colaboración de Lem Dobbs. También se sumó al libreto el prestigioso, y hoy muy reconocido, David S. Goyer, famoso sobre todo por sus colaboraciones con Christopher Nolan. Conviene resaltar que la historia original fue escrita por Proyas y que tanto Dobbs como Goyer perfilaron el guión. Ambos hicieron sugerencias y algunos cambios más o menos importantes.

Y lo que esta tripleta nos ofrece es un “mosaico” con muchas influencias. La trama combina de manera francamente sugestiva y original temas siempre atractivos como: los extraterrestres, el alma humana, los recuerdos, las trampas mentales, la realidad y la experimentación. Todo esto a través de un claro homenaje al “cine negro” y la ciencia ficción. La historia queda desnuda en su primer minuto cuando el Doctor Schreber pronuncia su monólogo de presentación del film y de “Los Ocultos” y sus habilidades, especialmente la conocida como “sintonización”. Conviene dejar claro que esta exposición fue impuesta por New Line, ya que los tests de proyección tuvieron resultados negativos. Se pensó que aclarando la situación desde el principio el film sería más entendible. Posteriormente, Alex Proyas se arrepentiría de haberse “esposado” ante el estudio.

Ahora bien, el hecho de “desnudar” la presencia de “Los Ocultos” nada más comenzar tampoco juega tan en contra de la propuesta. Al contrario, ayuda a entender desde el minuto uno muchas cosas que son importantes. Amén de que luego lo interesante es ir descubriendo, poco a poco (y al mismo tiempo que John Murdoch), lo que realmente está en juego y el increíble misterio que oculta esta ciudad en la que nunca sale el sol.

Pero ‘Dark City’ no sólo destaca por su genial guión/historia… también lo hace por su fabulosa ambientación. En la misma resalta el trabajo realizado por gente como Richard Hobbs (arte), Patrick Tatopoulos (producción) o Liz Keogh (vestuario). Este trio nos hace adentrarnos en una ciudad absolutamente apelmazada y opresiva. Una gran urbe de aspecto retro y deudora, en cuanto a su diseño y vestuario, de la Nueva York de los años 50-60. También destaca la cuidada fotografía monocromática de Dariusz Wolski, que combina la oscuridad de la ciudad con algunos brillantes tonos interiores como el amarillo del restaurante al que entra John Murdoch o la tremenda luminosidad del final.

En el vestuario de la anteriormente citada Liz Keogh destacan, sobre todo, los trajes de “Los Ocultos”. Trajes en los que podemos apreciar una doble influencia: por un lado, la del expresionismo alemán en sus “uniformes de calle” y, por otro lado, la del filmHellraiser (Clive Barker, 1987) en las vestimentas que llevan en el submundo. Tan es así que, salvo los clavos de Pinhead en el cráneo, bien se puede decir que “Los Ocultos” vestían en la misma sastrería que “Los Cenobitas”.

También digna de mención es la banda sonora de Trevor Jones. Su música se apoya sobre composiciones misteriosas y vibrantes. Especialmente destacado es su muy poderoso tema principal. Hablamos de uno de esos temas que contribuyen a dar grandeza a las películas en las que suenan.

En cuanto al elenco, comentar que el protagonismo principal recayó en Rufus Sewell, que aquí tuvo la oportunidad de su vida. De hecho, y para su papel, se llegaron a barajar los nombres de Johnny Depp o el mismísimo Tom Cruise. Ambos artistas se querían utilizar como reclamo comercial. Finalmente, el personaje de John Murdoch fue para el intérprete inglés. Rufus realiza una buena labor en el rol de este hombre que no recuerda nada de su supuesto pasado criminal…

Dándole la réplica, pero del lado de la Ley, nos encontramos a un gran William Hurt que encaja muy bien en su papel del Inspector Frank Bumstead, el policía al que se le encarga el caso del crimen inicial supuestamente cometido por John Murdoch. Tremenda la personalidad y el empaque de Hurt en este personaje. Quizás se pueda reprochar la forma en la que termina su andadura en la cinta, pero esto ya no es cosa atribuible al intérprete.

Por otra banda, la mejor interpretación se la lleva Kiefer Sutherland en una caracterización sensacional como el Doctor Daniel P. Schreber. El actor de ’24’ recrea a un hombrecillo cojo, miope y temeroso. Un psiquiatra que se ha vendido a “Los Ocultos” con tal de no sufrir cambios en su identidad. Al respecto de estos, poco hay que comentar… porque los actores llevan a cabo interpretaciones idénticas. Esto es así dada la ausencia de personalidad y carácter anti-empático de estos seres. No obstante, los que más destacan son Ian Richardson (Señor Libro, el jefe y el más poderoso) y Richard O’Brien (Señor Mano, el más sanguinario).

Finalmente, las únicas actrices con trascendencia son: En primer lugar una dulce Jennifer Connelly como Emma Murdoch, la amante esposa de John que quiere recuperarlo a toda costa. Y en segundo lugar tenemos a Melissa George interpretando a May, una prostituta que se fija en John. Como curiosidad cabe comentar que este fue el debut en cines de Melissa y no le hizo ascos al hecho de aparecer desnuda.

“Debemos tener a ese hombre” (Señor Libro)

En conclusión.
Termino esta crítica de Dark City, un film cuya calidad e influencia es indiscutible. Puede que haya caído en el olvido popular, pero es una obra que, en muchas escuelas de cine, se usa como referencia en todos sus aspectos: artístico, filosófico,… En definitiva, esta es la mejor película de Alex Proyas y su visionado resulta obligatorio para todo buen amante del cine negro y de la ciencia ficción. Película de culto claramente recomendada.

Tráiler de Dark City

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