Argo
En 1979, y durante la revolución de Irán, un grupo de revolucionarios asaltan la embajada de los Estados Unidos tomando rehenes… pero logran escapar seis trabajadores que se refugian en la casa del embajador de Canadá. Ante esta situación, la CIA empieza a trazar planes para poder sacar a los seis del atolladero, ya que el país es un hervidero donde todo el mundo sospecha de todos. Pero el agente Tony Mendez tiene un plan. Una locura de plan: pretende rodar una película falsa para poder sacar a los trabajadores del país. Sin embargo, el tiempo corre y no precisamente a su favor. (Cineycine).
En 1979 estalla en Irán una revolución. Para colmo, culpan a los USA de la expulsión del antiguo regente poniendo a otro en su lugar. Además, asaltan la embajada americana obligando a seis trabajadores a esconderse en la casa del embajador de Canadá. Pero no todo está perdido. Afortunada, o desafortunadamente, ¡cuentan con Tony Mendez! Un agente de la C.I.A. que tiene un estrambótico plan para sacarles de allí. Bienvenidos a ‘Argo’.
“Si vamos a hacer una película falsa, quiero que sea un taquillazo falso” (Lester Siegel)
Crítica de Argo
Se dice que «detrás de un mal actor hay un gran director»… y parece ser que esa regla se aplica a Ben Affleck. No obstante, es de justicia afirmar que Affleck ha luchado por todos sus papeles. Además, y como director, se ha ganado todos mis respetos porque ha logrado ser mucho más maduro de lo habitual.
Desde su debut con ‘Adiós pequeña, adiós’ (2007) cautivó a crítica y público. Posteriormente vino ese sorpresón que fue ‘The Town’ (2010), un thriller en el que Affleck demostraba que podía ser un muy buen actor, personalmente siempre lo he considerado así, y mejor director de lo esperado. Por regla general, se tiende a que muchos directores en su segunda película bajen el nivel. Sin embargo, este no es el caso de Affleck. Todo lo contrario, subió mucho más su nivel y así se puede comprobar en ‘Argo’.
Con ‘Argo’ Affleck nos entrega una película de lo más completa de su filmografía. Para mayor mérito estamos ante un arriesgado cocktail de thriller político con dosis de comedia. Todo esto lo borda el cineasta de una manera soberbia. Por otro lado, el propio Ben Affleck se mete en la piel de Mendez, el agente de la CIA. Un tipo que, gracias al visionado de ‘La batalla por el planeta de los simios’, se le ocurre la idea de “rodar una película”. Hay que decir que Affleck está sobresaliente en su personaje. Como actor nos recrea a un hombre calculador, pero tremendamente humano y muy preocupado por las personas que tiene a su cargo.
Por otra parte, el actor y director cuenta a su lado con un buen puñado de estrellas en el plantel. Aquí tenemos a un Bryan Cranston impecable. Sensacionales resultan Alan Arkin (enorme diciendo esas frases de productor de cine) y John Goodman. Este último ofreciendo lo mejor de sí mismo. El resto de los actores también brillan a gran altura.
No se puede negar que ‘Argo’ es un film con una excelente factura técnica e interpretativa. Affleck destaca de manera brillante en la dirección manteniendo al espectador en vilo a lo largo de los 112 minutos. Destaca, especialmente, el último tramo donde, debo confesar, me emocioné tremendamente. Esto es un logro de su realizador y de su genial compositor: el brillante Alexandre Desplat. El músico logra implicar durante esos minutos finales al espectador ¡y de qué manera! También hay que destacar la sublime fotografía de Rodrigo Prieto.
Poco o nada se le puede reprochar a esta película. Obviamente no se puede decir que sea un film «perfecto». Por ejemplo, al principio puede ser un poco abusivo sobre los detalles históricos de la situación de por aquel entonces en Irán. De hecho, nada más empezar la película nos bombardean con montones de detalles sobre el estado del país y cómo se ha llegado a esos extremos. Sin lugar a dudas, el único «pero» que le puedo sacar a esta brillante cinta.
En conclusión.
Concluyo esta crítica de Argo, una muestra excelente de la pericia como director de Ben Affleck. Era una misión arriesgada y su director lo borda; también como actor protagonista del film. Es divertida, adictiva, emocional, trepidante… y eso que no hay ni una sola explosión, ni efectos digitales, ni monstruos o robots asesinos. Recomendable hasta decir basta.
Tráiler de Argo
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