Saw
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Hoy celebramos el 15 aniversario de la primera película importante de James Wan. Un film que supuso la creación de un nuevo icono del terror y el inicio de una larga saga. Todo eso es lo que supone un film tan “sencillo y pequeño” como este. Pasemos a descubrir quién es Jigsaw y cómo fue su debut en ‘Saw’.

“Quiero jugar a un juego” (Jigsaw)

Crítica de Saw

En el año 2004 bien podemos decir que James Wan era un “don nadie”. Apenas había rodado un film que muy pocos saben que existe, ‘Stygian’ (2000), y un corto titulado ‘Saw’ (2003). Este último escrito y protagonizado por su amigo Leigh Whannell. Precisamente, este cortometraje fue el que impulsó a Wan para dar a luz a su primer gran éxito. Para ello convirtió aquel trabajo de apenas 9 minutos en toda una película de 103 minutos con el mismo título y repitiendo colaboración con Whannell. Empezaba así una larga saga y una serie de importantes títulos que han llevado a Wan a ser considerado, en la actualidad, como uno de los grandes referentes del cine de género y padre del “Conjuring Universe”. Inclusive ha saboreado las mieles del éxito también fuera del ámbito del terror con blockbusters como Fast & Furious 7 (2015) o Aquaman (2018).

Con ‘Saw’ la intención de Wan y Whannell era rodar un film que se desarrollara principalmente en un lugar cerrado. Así las cosas, casi toda la película tiene lugar en una sucia habitación de un edificio abandonado con dos personajes como protagonistas. Dos hombres que han sido secuestrados y que deberán colaborar entre sí. Entre los dos tendrán que ir resolviendo algunos puzzles para lograr salvar sus vidas con la dificultad añadida de estar engrilletados. De fondo, el misterio del “asesino en serie” llamado Jigsaw. Esta es la aparentemente simple premisa desarrollada en el libreto por Leigh Whannell y filmada por James Wan.

En el párrafo anterior he puesto la palabra “asesino” entre comillas porque, a efectos prácticos, Jigsaw no mata a nadie. Él lo que hace es secuestrar a personas que identifica que no valoran la vida. A partir de ahí les pone una serie de trampas mortales obligándoles a hacer lo que se sea con tal de salvarse. En todo caso, estos dos secuestrados, el Doctor Lawrence y Adam, se convierten en sus víctimas. Además, y mientras tratan de escapar, se explica el trasfondo de Jigsaw.

Como expuse antes, la trama o premisa desarrollada por Wan y Whannell puede parecer “simple”. Ahora bien, lo cierto es que dio para mucho. Tanto que se transformaría en una saga de siete películas narrando la misma historia y con una entrega adicional ‘Jigsaw’ (‘Saw VIII’ en España). Todo esto sin entrar en el remake/reboot que está planeando Chris Rock. Todas estas cintas se enfocarían en las trampas y el gore. Había surgido así un nuevo icono del terror, Jigsaw, encarnado por Tobin Bell. Irónicamente, Bell aparecía muy poco en esta primera película y su icónica representación era un feo títere. Esta marioneta fue realizada por el propio James Wan como uno de los varios guiños a los films de Dario Argento. Con el paso de las secuelas se convirtió en la imagen más asociada a la franquicia.

Un aspecto muy destacado de ‘Saw’ es la ambientación en el almacén abandonado. James Wan triunfa básicamente con un solo escenario. Un retrete industrial y sucio, con las cañerías al aire, humedad, las baldosas levantadas, sangre y un cadáver separando a los secuestrados. Con tan sólo eso el cineasta nos atrapa en su historia estando deseosos de ver si los protagonistas logran salvarse antes de que el tiempo se agote. En este sentido, Wan dijo que lo que intentaba conseguir era un thriller de misterio que enganchara al público. Ni que decir tiene que lo consiguió.

En el reparto dos son los actores que llevan prácticamente todo el protagonismo del film. Me refiero a Cary Elwes y al propio Leigh Whannell. El primero interpreta al doctor Lawrence Gordon y el segundo a un hombre llamado Adam. Sus interpretaciones cabe calificarlas como sufridoras, ya que pasan casi todo el metraje encadenados y haciendo frente a situaciones inhumanamente límites. Comparativamente, Whannell es el mejor de los dos con diferencia. Por su parte, Cary Elwes apenas roza el borde de lo competente en algunas ocasiones, pero en su mayor parte resulta un poco mediocre. En su descargo decir que ejecutaron sus escenas conjuntas sin casi ensayar previamente pues la película se rodó en apenas 18 días.

Por otro lado, también hay que mencionar a Danny Glover y Ken Leung como dos detectives que tiempo atrás investigaron unos crímenes relacionados con Jigsaw y que ahora creen tener nuevas pistas. El casting principal se completa con Dina Meyer como la detective Kerry y las actrices Monica Potter y Makenzie Vega como la esposa y la hija del Doctor Gordon. Por supuesto no me puedo olvidar de Shawnee Smith como Amanda, una de las primeras víctimas de los macabros puzzles. Su es rol muy importante y, junto a Dina Meyer, repetiría con más trascendencia en posteriores secuelas. Es importante destacar que todos estos personajes están relacionados con el desgraciado y mortal puzzle que han de resolver Lawrence y Adam. Así pues, lo que eleva a ‘Saw’ por encima de todo es su premisa y el misterio a descubrir.

Conclusión.
Termino esta crítica de Saw, una película que acabaría por convertirse en una larga saga enfocada en el terror, el gore y la tortura. Sin embargo, este no es el caso de esta primera y modesta entrega. Una entrega que se enfoca en el misterio y en los puzzles, así pues, cualquiera mínimamente interesado en este tipo de films la disfrutará.

Tráiler de Saw

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