La primera película de Liam Hemsworth
En el cine, los deportes, la política y demás ámbitos de la vida… son varios los casos de hermanos que se dedican a la misma profesión y logran sobresalir. Hoy toca hablar de los comienzos de uno de los Hemsworth Brothers, el segundo en importancia mediática. Nos ponemos ya mismo al volante para recordar cuál fue…
La primera película de Liam Hemsworth
Seguro que el nombre de Chris Hemsworth les suena mil veces más que el de Luke Hemsworth y cien veces más que el de Liam Hemsworth. El caso es que ellos son los tres hermanos Hemsworth. Los tres nacieron en Australia: Luke es el primogénito y Liam el pequeñajo. Y los tres están dedicados a esa profesión tan entretenida y variada que es la de actor.
Hoy nos referimos a Liam Hemsworth, que es el que nos ocupa en este artículo. De él vamos a repasar su primera aparición en cines. Así pues, y tras algunos papeles en la televisión australiana, por ejemplo en ‘Vecinos’ (2007-2008), Liam dio el salto al cine. Su debut acreditado como tal lo tuvo en la película ‘Señales del futuro’. Esta cinta dirigida por Alex Proyas se estrenó en cines norteamericanos el 20 de marzo de 2009. Al frente del elenco estaba el incansable Nicolas Cage.
Recordemos la sinopsis del film: “Un profesor de astrofísica descubre una «cápsula del tiempo» desenterrada en el colegio de su hijo y que contiene una serie de señales/profecías catastróficas que se han venido cumpliendo. Lo más aterrador es que la siguiente advertencia habla del fin del mundo. Esto obsesionará al profesor llevándolo al límite para tratar de averiguar toda la verdad tras estos datos y profecías”.
‘Señales del futuro’ se configura como un thriller de misterio que se apoya en las especulaciones basadas en la numerología. Todo esto sazonado con algo de terror y un poco de religión y elementos sobrenaturales. Lo más atrayente del film es ir descubriendo la trama al mismo tiempo que John Koestler (Nic Cage) hasta llegar a su increíble final. Un clímax que no causa indiferencia.
Respecto al papel de Liam Hemsworth muy poco hay que decir. Sale hacia el minuto 12-13 cuando el personaje de Cage está dando clases en el Instituto Tecnológico Massachuset. Hemsworth hace de uno los alumnos llamado Spencer al que Koestler le lanza una esfera que representa al sol y a continuación le pregunta: “Spencer, ¿cuéntame algo sobre el sol?”. A lo que Hemsworth responde: “Da calor”… (risas en el aula). Evidentemente, y lejos de estar satisfecho con la respuesta, el personaje de Cage le requiere más datos: “Desarróllalo”. La respuesta entonces es esta: “La temperatura es de 5000 grados celsius en la superficie y de 14 millones de grados en el núcleo”. Y aquí terminó la intervención de Liam en la película, no salió más. En consecuencia, y más que una intervención o un papel en el film, esto fue un pequeño cameo en toda regla.
Después de este cameo, Liam tuvo que esperar hasta el 2012 para lanzarse a la fama gracias a su rol en ‘Los juegos del hambre’ (Gary Ross). Ese mismo año también fue reclutado por Sylvester Stallone para ‘Los mercenarios 2’ (Simon West). Su último gran estreno en cines llegó en el verano de 2016 cuando tuvo su gran oportunidad en uno de los roles principales de ‘Independence Day: Contraataque’ (Roland Emmerich). También en 2016, estrenó directamente en VOD el western titulado ‘El duelo’ junto a Woody Harrelson. Actualmente lo podemos ver en cartelera como parte destacada del casting de ‘Poker Face’, la segunda película como director de Russell Crowe. Por último, añadir que parece claro que va a ser el sustituto de Henry Cavill en ‘The Witcher’, la famosa serie de Netflix.
Y así hemos llegado al final de este nuevo “rescate cinéfilo” en La primera película de Liam Hemsworth, un intérprete que sigue trabajando a la sombra de su hermano con la intención de que algún día las tornas cambien y él pase a ser el famoso. Mientras tanto, os invitamos a próximos rescates en… La primera película de ¡No dejéis de seguirnos y corred la voz!
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Para mí siempre será Billy, el chaval de Los mercenarios 2, el de las patas largas. Su encuentro con Vilain es (será) sin duda el punto álgido de su carrera.