Premonición
Nathan es un calculador y prestigioso abogado de NY que vive separado de su mujer Claire y de su hija pequeña Tracey. Un día de improvisto recibe la visita en su bufete de un misterioso médico llamado Kay. Kay parece saber mucho sobre Nathan y le deja un extraño mensaje: “La necesidad de estar preparado”.
A partir de ahí, Nathan, poco a poco irá introduciéndose cada vez más en el mundo del doctor Kay, un mundo que desconocía pero que está ligado a él de forma indivisible.
Señal, sueño, sensación… que se interpreta como el anuncio de un hecho futuro. También puede ser la adivinación de los sucesos futuros. Esto es el significado de ‘Premonición’.
“A veces la muerte aparece inesperadamente y no se puede predecir”.-Doctor Kay.
Valoración:
Bueno, bueno… con más de dos años de retraso llega a nuestras pantallas de cine esta cinta. Y aquí tenemos un film tremendamente irregular y desaprovechado firmado por el francés Gilles Bourdos. En el mismo se nos cuenta la historia de Nathan (Romain Duris) y su relación con el misterioso Doctor Kay (John Malkovich), pero cada tres por cuatro somos interrumpidos por unos dulces y tiernos flashbacks del pasado del primero. Estos flashbacks rompen totalmente el ritmo narrativo de un film que ya de por si se maneja con cierta lentitud (se nos quiere llevar a un sitio pero vamos con la tercera marcha puesta), dan lugar a unos contrastes tremendos (dulzura onírica contra realidad pura y dura) y como digo afectan a la narración central de tal manera que queda totalmente descompensada plasmando en pantalla un film tremendamente irregular, a veces lento y sobre todo desaprovechado en sus ideas y planteamientos iniciales.
Ideas iniciales que daban para haber filmando una cinta bastante más aprovechable pues conceptos o temas como: la vida más allá de la muerte, la premonición, la esperanza, el destino o la muerte son temáticas muy atractivas que bien orientadas pueden dar lugar a estupendos films… pero no ha sido el caso de ‘Premonición’. De hecho, el único tema que realmente queda bien orientado, tratado y concluso es el del milagro de la vida y el momento. Esa idea si que está bien aprovechada en la cinta de Gilles Bourdos, pero es una pena que se haya pretendido ir más allá presentando en pantalla una serie de temáticas para nada bien explotadas o desarrolladas en los 107 minutos que viene a durar la película. Una pena…porque la cinta al final termina siendo fallida por todo esto que he comentado, es decir, me da la impresión de que se pretendió abarcar demasiado y se fracasó en el intento.
“Dicen que el cisne sólo canta una vez… justo cuando va a morir”… Protagonizando la vida y la muerte.
Dos son los protagonistas absolutos de esta película: Romain Duris y John Malkovich. Pues bien, ninguno de los dos me llegó a convencer totalmente por diferentes motivos:
Romain Duris que da vida a Nathan no consiguió que su personaje me calara lo suficiente porque no lo veo transmitir plenamente todas las emociones por las que pasa Nathan a lo largo del film. Es como si no se hubiera terminado de creer su papel y en consecuencia esto lo traslada al espectador con el que no consigue empatizar (por lo menos conmigo no lo consiguió).
Por su parte John Malkovich decepciona como el Doctor Kay más por culpa de su personaje que de él mismo. Y es que estamos hablando de un doctor que tiene tan asimilado su rol en esta vida que prácticamente no tiene sentimientos y se convierte en poco menos que un mueble. Aún así, es justo reconocer que ver a un actor del empaque de Malkovich siempre se agradece… aunque en este caso, pienso que se podría haber ahorrado este papel.
Podemos decir también que destacan en menor medida Evangeline Lilly y la pequeña Sara Waisglass como esposa e hija de Nathan, y quizás Pascale Bussières como una chica rusa con poca suerte… el resto del elenco actoral se limita a salir en sus escenas correspondientes recitando sus líneas de diálogo. Punto.
La BSO corre a cargo del conocido compositor francés Alexandre Desplat que da lugar a unas partituras tan irregulares como el propio film. Eso si, hay que decir que las composiciones de piano que suenan a lo largo de la cinta (especialmente en los flashbacks) y que son a la vez tristes y dulces… son todas ellas verdaderamente agradables de escuchas.
En conclusión:
La conclusión esta vez es muy clara. ‘Premonición’ es una película irregular, por momentos lenta y en definitiva fallida. Es una pena que una propuesta tan interesante como la que se nos planteaba no haya tenido mejor suerte… porque honradamente pienso que ‘Premonición’ podía, tenía y debía de haber dado más de si.
Curiosidades y Declaraciones:
- Una declaración del ex_presidente francés François Mitterrand (1916-1996) fue tomada como inspiración por parte de Michel Spinosa y Gilles Bourdos durante el proceso de escritura del guión: “Lo maravilloso está en el momento y siempre nos damos cuenta demasiado tarde”.
- Además de la lectura de la novela original de Guillaume Musso, otra fuente de inspiración para determinadas escenas del film fueron las novelas de François Cheng por su austeridad y la autorreflexión solitaria.
- Guillaume Musso quedó muy satisfecho con la película basada en su novela: “Estaba emocionado. Desde las primeras imágenes, te sumerge en una atmósfera poética, dramática y misteriosa. La tensión es constante y el ritmo nunca decae. La dirección de Gilles Bourdos me dejó maravillado. Me encanta cómo filma la ciudad y la virtuosidad elegante de sus planos, pero lo que más me impresionó fue la emoción que desprende el film. Algunas escenas son realmente conmovedoras y siguen en tu cabeza mucho después de haber visto la película”.
- Las tres condiciones que Guillaume Musso puso para que su novela fuera llevada al cine fueron estas: 1ª) Tenía que rodarse en inglés. 2ª) Rodarse en parte en Nueva York. 3ª) Contar con un reparto internacional.
“Nadie tiene el poder sobre la hora de la muerte”.-Doctor Kay.
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