Misión Imposible: Nación secreta
Ethan Hunt lleva más de un año tras una organización llamada “El Sindicato”, encargada de una serie de atentados en apariencia aleatorios que buscan crear un nuevo caos mundial. Cuando Hunt está a punto de dar con el cabeza de este grupo terrorista, la CIA toma el control del FMI (la fuerza de misión imposible) y desactiva a todos sus activos. Hunt se convierte entonces en un hombre sin patria. Perseguido y solo, desaparecerá durante seis meses, tiempo suficiente para volver con más fuerza dispuesto a demostrar que sus pesquisas eran ciertas y que las garras de “El Sindicato” llegan hasta la mismísima Agencia. (Cineycine).
Prácticamente nadie ignorara a estas alturas que Tom Cruise se jugó la vida hasta seis veces durante el rodaje de MI5. Ahora, por fin, llega la oportunidad de descubrir si todo era una excelente campaña de promoción o sí “Nación Secreta” eleva la categoría de acción imposible a un nuevo nivel. Es el momento de la verdad. Es tiempo de… ‘Misión Imposible: Nación secreta’.
“Si quieres drama vete al Teatro” (Ethan Hunt)
Crítica de Misión Imposible: Nación secreta
Ethan Hunt y su equipo de Misión Imposible (FMI en inglés) vuelven a ser puestos a prueba. Aquí tenemos la quinta entrega de esta ya emblemática saga de entretenimiento estival de primer nivel. Tom Cruise regresa con más fuerza que nunca en MI: Nación secreta. La película es un fabuloso divertimento de verano que reúne lo mejor de las secuelas precedentes, sobre todo la original de Brian De Palma, la 3 y 4. Todo esto lo «condensa» en dos horas de frenético viaje por el globo terráqueo. Un metraje con Hunt en busca de sacar a la luz el mayor descubrimiento de su carrera como espía.
Hasta siete meses de rodaje tuvo que alargarse ‘Misión Imposible: Nación secreta’. Todo ese tiempo fue necesario para poder llevar a cabo las enorme hazañas que la pueblan con portentosas escenas de acción rodadas a la vieja usanza. Se incluyen aquí su monumental inicio con Hunt “tomando” un avión enemigo. También Hunt introduciéndose en un tanque de agua a pleno pulmón. Y otra en la que lo vemos en mitad de dos persecuciones seguidas y sin respiro a bordo de un BMW y una moto de alta cilindrada. Sobra decir que Cruise llevó a cabo sin ningún tipo de dobles todas estas escenas.
Acompañando a Tom Cruise hayamos a una mezcla de chica bond y espía letal a la vez. Ella es Ilsa Faust interpretada por Rebecca Ferguson, todo un descubrimiento. Ferguson cumple tanto en la parte física de su personaje como en la interpretativa. Atención a la set-pieces en la Ópera de Viena. Ahí también hay que resaltar el uso de la música de Puccini. Unas composiciones que expresan a la perfección los estados de ánimo de Hunt para con el personaje de Faust y su misión.
Recuperados para la causa tenemos a Benji Dunn (Simon Pegg), William Brandt (Jeremy Renner) y el ya mítico Luther Stickwell (Ving Rhames). Todos ellos se unen para luchar contra un enemigo cuya existencia nunca ha sido comprobada: “El sindicato”. Mientras que, al mismo tiempo, la CIA aparece comandada por Henley (Alec Baldwin). La Agencia busca capturar a Hunt y quien colabore con él para que dé cuenta de sus misiones pasadas. Ojo para el tremendamente enigmático y pérfido personaje al que da vida Sean Harris, del que mejor no saber nada.
Christopher McQuarrie, firmante de ‘Secuestro infernal’ (2000) y ‘Jack Reacher’ (2012), y responsable en parte de los libretos de la anterior entrega de la saga ‘Misión Imposible: Protocolo fantasma’ (2011) y ‘Al filo del mañana’ (2014), retoma el punto de partida del final de la cuarta entrega. Partiendo de ese «inicio» entrega un compendio de las set-pieces icónicas de la original, el villano maligno de J.J.Abrams y las épicas escenas de acción ideadas por Brad Bird. Precisamente, Bird fue considerado como el primer director para este film. Todo ello acaba resultado como un acertadísimo mix de MI. Una cinta que da al espectador todo lo que busca en una película de la saga y de un film protagonizado por Tom Cruise. El actor demuestra que, no por casualidad, se mantiene en lo más alto durante tres décadas.
En resumidas cuentas.
Finalizo esta crítica Misión Imposible: Nación secreta, el ejemplo perfecto y absoluto de blockbuster estival. Tom Cruise dando todo de sí mismo. Un equipo de nuevos y viejos colaboradores redondean una ecuación perfecta, fabulosa y tremebunda. Contiene todo lo mejor de las cuatro entregas en 120 minutos de acción. 2 horas que no tienen nada que envidiar a ninguna superproducción del mismo tipo estrenada en los últimos quince años.
Tráiler de Misión Imposible: Nación secreta
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Tras la gorda decepcion de Spectra, llega la redencion para el genero del espionaje este año: Nacion Secreta, con un Tom Cruise dandolo todo, un reparto entregado y un director que, aunque no es Bird, McQuarrie tiene suficiente memorabilidad en su estilo y narracion, ademas meter cuantiosas set-pieces, cada cual potente como pocas, amen a la de Marruecos, leccion total de montaje y musica.
Sin embargo, cojea un poco tras esa MONUMENTAL secuencia y su villano, aunque es mejor que Waltz en Spectra y Cobalto en la cuarta entrega de la franquicia imposible, no termina ser tan tremendo como se prometia, aun asi, la peli de espias de este año, sin ninguna duda.