Rastro oculto
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Diane Lane pasó de estar ‘Bajo el sol de la Toscana’ a perseguir delincuentes en la red. Este film nos relata la historia de una agente del FBI que convierte en algo personal la caza a un delincuente poco común. Un criminal que usa internet para decidir lo rápido que deben morir sus víctimas. Cuantos más visitantes entren en su web, antes morirá su víctima. Y todo ello en directo a través de la red de redes en ‘Rastro oculto’.

Rastro oculto: La trama.
El FBI cuenta con un departamento dedicado a investigar y perseguir la delincuencia en Internet. Bienvenidos a la guerra contra el cibercrimen. La agente especial Jennifer Marsh (Diane Lane) creía haberlo visto todo… hasta ahora. Un depredador cibernético cuelga torturas y asesinatos en su página web. El destino de sus víctimas depende del público: cuantas más visitas registre su página web, más deprisa morirán. Cuando el juego del gato y el ratón se convierte en algo personal, Jennifer Marsh y su equipo se lanzan a una carrera contrarreloj para detener a un genio de la técnica que parece prácticamente ilocalizable.

Jennifer se suele encargar de encontrar a falsificadores de tarjetas de crédito y acosadores sexuales. Ella y sus compañeros creen que han visto todo lo que este mundillo les puede enseñar. Así hasta que, un buen día, van a parar a una web llamada matasconmigo.es (originalmente www.killwithme.com) que les hará llevarse las manos a la cabeza. Lo que encuentran dentro sólo puede ser obra de un perturbado mental fuera de sus casillas. En dicha web hay un gatito atado a una trampa y cuanta más gente entre en la web antes morirá. Y todo ello grabándose en directo. Obviamente, a la agente Jennifer eso le inquieta totalmente. Ver morir a un animal a manos de un descerebrado es algo realmente horrible y debe cesar. Pero la cosa se complica cuando ella y su jefe empiezan a pensar en más allá de este acontecimiento con el gatito…

¿Qué ocurriría si al presunto asesino la próxima vez se le ocurriera hacerlo con un ser humano en vez de con un gato? Es por ello que el FBI empezará a mover los hilos para dar con alguien que sabe lo suficiente como para no dejar ni una sola huella a su paso. Una sombra capaz de ocultarse entre el ciberespacio para perpetrar crímenes que causarán furor entre la red siendo cada vez más famoso y visitado.

Crítica de Rastro oculto

En su momento, ‘Rastro oculto’ resultó una película poco común debido al tema que trataba: ciberdelitos… y el departamento encargado de ello en el FBI. Esta temática procede de algo que, a día de hoy, ya no es tan nuevo. Sin embargo, cuando se estrenó este film sí que lo era: me refiero al mundo de Internet. No obstante, todavía hace unos años hubiera sido imposible lo que aquí se relata. Eso hace que sean pocas las cintas que tengan un argumento similar a este… aunque al final el tema es el de siempre: el asesinato, ya sea retransmitido y/o cometido por Internet o en medio del mar.

‘Rastro oculto’ bebe directamente de films como Seven(David Fincher, 1995) o ‘El coleccionista de huesos’ (Phillip Noyce, 1999). Especialmente de esta última. Así pues, aquí también tendremos varias escenas con la protagonista enfundada en un chubasquero en plena noche oscura y lluviosa, y corriendo detrás de la pista antes de que sea demasiado tarde y la víctima muera.

El director, Gregory Hoblit, no sólo ha dirigido buenas adaptaciones como Frequency’, ‘Fallen’ o Las dos caras de la verdad’, sino que también tiene una fuerte relación con la ley y el orden. Ha dirigido numerosos episodios de Policías de Nueva York’ y ‘Canción triste de Hill Street’. Además, su padre era agente del FBI. Gary Lucchesi (productor) afirmaba riendo: “Por eso pensamos que era la persona idónea para dirigir esta película”.

Debo admitir que me hice con este film debido a que a mi mujer le encanta la actriz Diane Lane. Al enterarme de que la damisela que adquiría una casa en la Toscana iba a ser una agente del FBI pensé que sería interesante de ver, sobre todo, para mi pareja. Es así como nos pusimos manos a la obra con esta cinta. Su sinopsis era de lo más atractiva y nos gustan este estilo de películas. No nos engañemos, no son películas perfectas pero si que son entretenidas y disfrutables.

‘Rastro oculto’ es un film que, desde el principio y hasta los créditos finales, supura misterio e inseguridad. Nadie sabe quién es el asesino. Nadie está a salvo. No se sabe quién va a ser el próximo secuestrado o cómo va a morir. Esa inseguridad palpable en el ambiente está muy bien lograda y dota al film de un aura de peligro constante que le viene como anillo al dedo.

En el guión de Allison Burnett la protagonista de la película, la agente Jennifer Marsh, es un personaje complejo y a veces contradictorio. Ella es una mezcla de dureza y vulnerabilidad. Para capturar las diferentes facetas de su personalidad era necesario encontrar a una actriz muy dúctil. El productor, Howard Koch, afirma que todos se entusiasmaron con la idea de que Diane Lane hiciera el papel. Y así es como decidieron contactar con ella. Lane se fascinó con la idea de un thriller protagonizado por una mujer: “Me gustan las películas inteligentes encabezadas por mujeres fuertes que dejan atrás el prototipo de la damisela que debe ser rescatada. Además me fascinó el departamento de cibercrimen. Soy una ingenua incorregible. No hace mucho que me enteré de que un virus informático no nace espontáneamente, como el virus de la gripe”.

Lo más llamativo del film, sin duda alguna, es el uso de la red como medio de propagación de los crímenes. Cuanta más gente los vea, antes morirá la víctima. Al principio de todo la web maldita apenas es conocida y las víctimas duran lo suyo. Pero hacia la recta final mueren en tiempo récord. ¡La audiencia está esperando ver cada nuevo crimen! “La unidad de cibercrimen del FBI es relativamente nueva”, decía por aquellos tiempos Gary Lucchesi, productor del film. “Se fundó hace unos seis o siete años. RASTRO OCULTO se centra en un caso fuera de lo común: no se trata de un pederasta o de un fraude de tarjetas de crédito. Trata de alguien que comete un asesinato y lo divulga por Internet. La gente puede conectarse y verlo. Cuanta más gente lo haga, antes morirá la víctima”.

Internet es una fuente de información y diversión, pero el anonimato que permite la red también potencia la curiosidad malsana. El productor añadía: “La mayoría se conecta y lee las noticias, pero muchísima gente busca los cotilleos, ¿a qué actor o actriz arrestaron anoche y quién se acuesta con quién? Una de las preguntas que plantea la película es si estamos dispuestos a observar a alguien matando a otra persona si sabemos que nadie nos ve”.

Para dotar de la máxima credibilidad a la película se entablaron varias colaboraciones con mucha gente importante en el mundillo informático. El objetivo era que cuando la película fuera vista por una persona entendida en informática no pudiera decir que lo que hacen los protagonistas es imposible. El asesino oculta su servidor para que no pueda ser localizado (entre otras cosas) y eso lo han plasmado en la pantalla de una manera bastante veraz.

Conclusiones.
Finalizo esta crítica de Rastro oculto, una cinta que me dejó muy buen sabor de boca. Y esto último no siempre sucede y menos en estos tiempos en los que el maldito PG-13 está destrozando películas enteras. Este film no cedió a ser rodado con algo más de cuidado y esconder escenas violentas, sino que «consiguió» una merecida R o no recomendada para menores de 18 años… y no tiene reparo en mostrar lo que necesita en la pantalla. Bien es cierto que si la comparamos con clásicos ya citados, probablemente, no salga tan bien parada… pero aun así, creo que es una buena propuesta y que posee todos los elementos necesarios para visionarla de vez en cuando.

Tráiler de Rastro oculto

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