Godzilla 2000
Un grupo especial comandado por el profesor Shinoda se dedica a seguir los rastros de destrucción de Godzilla por todo Japón intentando recuperar muestras del gigante radioactivo. En esta búsqueda se topa con la burocracia de Katagiri, jefe del CCI (Centro de Inteligencia de Crisis), cuyo mayor propósito es destruir al coloso. A pesar de los innumerables esfuerzos por detenerlo aparece en escena un OVNI que podría cambiar las tornas contra el monstruo… o no. (Cineycine).
Tan sólo un año después del estreno de la cinta de Roland Emmerich, Toho decidió contraatacar a Tristar con un nuevo proyecto de Godzilla, fiel al diseño original y conceptos de la saga, con un nuevo look y mejores efectos visuales. «Godzilla 2000» es un buen ejemplo de cuando Toho hace bien las cosas.
Crítica de Godzilla 2000:
“Godzilla 2000” fue la respuesta nipona ante el desastre artístico que supuso “Godzilla (1998)”, algo que a los fans más hardcore les resultaba un alivio, pues la cinta de Emmerich a estos les pareció un bodrio que no respiraba en ningún momento al Godzilla original. Lo que estos fans no entendían era que el film de Emmerich (tal y como expuse en su correspondiente reseña) nació del deseo de la Toho de extender la popularidad del personaje de manera internacional, gracias al rebufo de “Parque Jurásico”, lo cual implicaba el drástico cambio de diseño del personaje y ciertos cambios respecto algunas de sus particulares atributos.
Tal fue el varapalo, que Toho rápidamente, cambió el nombre del monstruo que aparecía en la cinta de Emmerich y se puso manos a la obra para entregar un film que devolviera la esperanza a los fans del personaje. De esta forma, y tan solo un año después, aparecería en Japón “Godzilla 2000” que iniciaba “la era Millenium” (en Estados Unidos, la cinta, llegó dos años más tarde del film de Emmerich, y distribuida también por Tristar). Esta nueva era bajo mi punto de vista resultó floja y dedicándose a hacer reboots uno tras otro (seis son las películas que componen “la era Millenium”) e incluso se cambió momentáneamente el diseño de Godzilla por razones inexplicables.
“Godzilla 2000”, sin ser de las mejores entregas del personaje (“la era Hensei” resultaba en cuanto a calidad, la mejor de las tres eras), sí que puedo decir que es una película francamente entretenida, con buenas intenciones y que respira por los cuatro costados el enfoque nipón de Godzilla. Esto lo reconozco, a pesar de que no comparto (ni por asomo) las destructoras críticas de sus responsables y lo que llevó a la vergonzante decisión de cambiar el nombre del personaje de la cinta de Emmerich, por temor a que Godzilla perdiera su status de culto (algo que no sucedió ni por asomo) entre el público más fiel y realizar este film con tal de arreglar lo que hizo Emmerich… de hecho, en este film, aparecen ciertas secuencias que hacen pensar que sus responsables estaban demasiado obsesionados con la cinta de 1998 que parecen hasta plagios al film del realizador alemán (desde una huida en coche hasta combates de helicópteros contra el personaje). Sin embargo, y a pesar de estos pseudo-plagios, “Godzilla 2000” es bastante interesante en términos de efectos especiales y de historia.
Aquí Godzilla recibiría su tercer cambio de imagen (si no contamos el que tuvo momentáneamente en “Godzilla, Mothra y King Ghidorah: All Monsters Attack”), un cambio que ofreció un aspecto más agresivo y terrorífico que el que tuvo en las anteriores eras (no obstante, sigo pensando que el mejor diseño fue el de Hensei). A esto se le unieron unos correctos efectos especiales, y aquí es donde hay dos aspectos curiosos: Por un lado, los efectos prácticos (maquetas, animatrónicas y pirotecnia) son sobresalientes y destacan sobremanera en la batalla final de Godzilla contra Orga (uno de los adversarios de Godzilla más curiosos, puesto que se trata de un alienígena, cosa que no se vería a lo largo de la serie, salvo con Gigan). En cambio, los efectos visuales, es decir, los generados por ordenador resultan bastante cutres, ver ciertos momentos de Godzilla bajo el agua o el alienígena (obviamente no en su forma final) resultan cuanto menos cantosos y pobres en términos generales.
Sobre la historia, sus responsables ofrecen un ritmo lo suficientemente dinámico, especialmente gracias a las intervenciones de Godzilla y las intervenciones del OVNI a lo largo de la historia. Por otro lado, aunque los actores no hagan interpretaciones de Oscar, es de agradecer que no resulten molestos e incluso aparece Takehiro Murata, quien ya apareció en “Godzilla contra Mothra”, aunque en aquella ocasión, las intenciones de su personaje eran más diferentes que las que tiene aquí.
En conclusión:
En esta crítica de Godzilla 2000 hemos llegado a una clara conclusión: es una digna película del monstruo atómico que cuenta con unos buenos efectos especiales (no así los visuales), una trama entretenida y un villano cuanto menos original. Lástima que las que vinieran después no fueran sino meros reboots que borraban las películas anteriores.
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