Cazafantasmas
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En 1984 Bill Murray, Dan Aykroyd, Ernie Hudson y Harold Ramis dieron vida a ‘Los cazafantasmas’. La película la firmó Ivan Reitman y quedó englobada dentro de los films de culto. En 2016 llegó el relevo femenino. Melissa McCarthy, Kristen Wiig, Leslie Jones y Kate McKinnon rompen la barrera masculina y se convierten en… ‘Cazafantasmas’.

“Son esos Cazafantasmas los que nos dan mala imagen” (Abby)

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Crítica de Cazafantasmas

Desde el mismo momento en que se anunció la puesta en marcha de este proyecto la nostalgia, el “odio” y los “haters” se movilizaron contra el mismo. He de reconocer que yo mismo sentía cierta e innegable “aversión” o antipatía hacia este “nuevo comienzo” o “nueva versión”. Sencillamente hay films que no se deberían tocar y Los cazafantasmas es (o era) uno de ellos. Ahora bien, el público manda poco o nada y al final los estudios son los que hacen y deshacen. Así pues, el proyecto se puso en marcha contra viento marea y con protagonistas femeninas. La suerte estaba echada…

Y miren ustedes por dónde que, aun siendo un tremendo nostálgico del film de los 80, este nuevo “reboot” no me ha desagradado y hasta me ha hecho pasar un buen rato. ¿Por qué? Por su tremenda ingenuidad, por no querer intentar superar ni probar nada y porque sus actrices te ganan con sus caricaturescas interpretaciones. Ya nada más sentarme y escuchar de manera breve, a modo de guiño, el viejo pero modernizado tema “Ghostbusters” de Ray Parker Jr., mientras salía el logo, me hizo sentir algo especial.

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Cierto es que ‘Cazafantasmas’ queda a mucha distancia del original. Pero como ya he comentado, Paul Feig no ha intentado competir con el mito (lo cual, dicho sea de paso, sería “imposible”), sino que nos muestra su propia versión. El director nos invita a un divertido show que no se toma en serio ni un solo minuto. De hecho, las continuas referencias cinéfilas o los guiños y cameos al film y al equipo original son una buena prueba de esto que digo. Referencias cinéfilas hay por un tubo: desde ‘Ghost’ hasta Tiburón’. Guiños al film original lo mismo: el logo, el coche, los mocos, Slimer,… Y, finalmente, los cameos del equipo original están muy bien tirados, especialmente el de Bill Murray. Además, se incluye el buenísimo gesto/detalle de una dedicatoria final. Es decir, Paul Feig ha sabido honrar “a su manera” el legado de la película original.

Indudablemente, la línea argumental (o su punto de partida) es muy parecida a la cinta de 1984. Inclusive hay escenas casi calcadas que nos recordarán a la película de Ivan Reitman. No obstante, minuto a minuto, esta cinta de Feig va tomando su propio camino para una nueva generación de espectadores.

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Con respecto a los efectos especiales comentar que todo lo relativo a las nuevas armas/gadgets de “las cazafantasmas” luce de maravilla y con un fenomenal lavado de cara. No puedo decir lo mismo de los aspectos de los fantasmas. Los espectros parecen tan “retocados”, y con una apariencia tan “nueva”, que lo único que consiguen es restarles credibilidad y terror. Al verlos pensaremos inmediatamente en los videojuegos de las consolas. Esto viene a arreglarse un tanto en el logrado clímax final exhibiendo en pantalla “algo superior”.

Al respecto de la recaudación cabe decir que, pese a toda la hostilidad exhibida contra esta cinta, ‘Cazafantasmas’ logró aceptación en USA con casi 129 millones de $. Sin embargo, fuera de la casa del tío Sam las cosas no le fueron tan bien. Especialmente destacado fue el no-estreno en China. Allí la cinta fue rechazada por su temática de “fantasmal” y su jugoso mercado quedó a 0. Así las cosas, para un coste de 144 millones el film se quedó en apenas 229 mundiales. La secuela queda en el aire… y más con el proyecto de Ivan Reitman, el hijo de Jason, retomando las aventuras originales.

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“¡Cuarto Cataclismo!”… Las nuevas Cazafantasmas.

Entrando a valorar las actuaciones cabe decir que el elenco da una imagen caricaturesca totalmente cercana a los dibujos animados. Algo que se acentúa al máximo en sus cuatro protagonistas principales: Melissa McCarthy, Kristen Wiig, Kate McKinnon y Leslie Jones, a la sazón, las nuevas Cazafantasmas. Estas cuatro actrices en ningún momento se toman en serio a sus personajes; algo que se agradece y mucho. Esto, lejos de ir contra del film, juega muy a su favor ya que es parte de su propuesta.

Melissa McCarthy y Kristen Wiig son Abby y Erin, dos antiguas amigas a las que sus carreras separaron. Mientras Abby ha seguido creyendo en lo paranormal… no le ha pasado lo mismo a Erin, que ansía una plaza de profesora seria en la Universidad. Por su parte, Kate McKinnon y Leslie Jones dan vida a Holtzmann y Patty. Holtzmann es la inventora del equipo capaz de crear todo tipo de gadgets para atrapar espíritus molestos. Patty es una empleada de Metro que se encargará del transporte y vestuario, entre otras cosas.

Las cuatro actrices brillan a un buen nivel por lo que he comentado antes, porque son cuatro caricaturas andantes (en el buen sentido) que han venido a pasarlo bien y hacérselo pasar bien al público. No pretenden superar nada, sólo ofrecer un buen rato. Quizás si que podría destacar como Leslie Jones le intenta meter algo de seriedad a su personaje. También a Kate McKinnon que brilla con sus gestos de badass girl y mirada de pirada.

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El resto de intérpretes más o menos destacados siguen esa línea caricaturesca marcada por el cuarteto principal. Especialmente Chris Hemsworth que hace de Kevin, un tipo de buen ver fichado como secretario. Kevin resulta un completo y total inútil elevado a la máxima potencia. Tal es el esperpento que el propio Hemsworth se crece y se atreve con chistes sobre su capacidad actoral y todo. Incluso un tipo serio como Andy Garcia (aquí como alcalde de NY) se une a la parodia. El único que mantiene el tipo y la pose seria e imperturbable es un Charles Dance al que no se le mueve ni un músculo en los minutos (pocos) que tiene en el film. El resto es un desfile de cameos de artistas más o menos famosos que incluyen a casi todo el equipo original de Los cazafantasmas de Ivan Reitman.

¿Y el malo? Bueno, el villano en la misma línea de lo comentado… Otro «personaje de dibujos animados» interpretado por Neil Casey que da vida a un pobre diablo. Un sujeto de esos que van por la vida odiando y echando la culpa al mundo por su situación personal. Nada nuevo.

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En conclusión.
Finalizo esta crítica de Cazafantasmas, una película cuya principal virtud es no tomarse en serio a sí misma en ningún momento. No busca trascender y “sólo” se contenta con ofrecer un rato de simpática diversión. Esto es algo que termina por conseguir en mayor o menor medida… y eso ya es mucho en los tiempos que corren. Sólo recomendada para gente que quiera divertirse de manera inocente dejando el “odio” aparcado.

AVISO: Hay dos escenas post-créditos. Una al principio y otra al final de todo.

Tráiler de Cazafantasmas

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