Byzantium
Eleanor es una solitaria y tímida joven que vive con la única compañía de una mujer ya marcada por la vida llamada Clara. Ambas mujeres esconden un secreto largo tiempo guardado y están unidas por un lazo familiar en apariencia irrompible. Una noche, Clara entra en contacto con un hombre llamado Noel que les ofrecerá hospedaje en el viejo y abandonado hotel de su madre: el hotel “Byzantium”. A partir de ese momento, Clara pondrá en juego sus habilidades para conseguir dinero… Al mismo tiempo, unos misteriosos individuos siguen la pista de las dos mujeres con intenciones desconocidas. (Cineycine).
Neil Jordan nos presenta a Saoirse Ronan y Gemma Arterton como dos mujeres a la deriva del tiempo que encontrarán refugio en un viejo hotel, dulce hotel. Un hotel que recibe el nombre de… ‘Byzantium’.
“Mi historia nunca puede ser contada” (Eleanor)
Crítica de Byzantium
Neil Jordan vuelve a visitar con esta película el subgénero de los vampiros. Un subgénero que tan buenos resultados le dio en 1994 con ‘Entrevista con el vampiro’. Y, precisamente, en ‘Byzantium’ podemos encontrar cierto parecido con aquel film protagonizado por unos increíbles Tom Cruise y Brad Pitt (amén de cierto guiño en la forma en la que Clara desangra a sus víctimas para luego beberse su sangre). Y, por supuesto, también podemos encontrar algunas influencias de la original película sueca ‘Déjame entrar’ (Tomas Alfredson, 2008). Comento todo esto porque en ‘Byzantium’ también tenemos a una pareja de vampiros y también tenemos una historia cercana al drama social. Además la ambientación se desarrolla en nuestro tiempo.
La historia es obra de la guionista Moira Buffini y nos es narrada en modo presente, pero incorporando unos oportunos y esclarecedores flashbacks al pasado de las mujeres protagonistas. Una historia en la que podemos encontrar varios temas. Esto es así porque ‘Byzantium’ no es “simplemente” una película de vampiros. No, aquí hay mucho más. En la trama hay sitio para temáticas tales como: el amor, la soledad, la amargura, la pérdida de la inocencia, la crueldad, la prostitución y la familia. Todas estas temáticas, y algunas más, están bastante bien desarrolladas en el global de la historia. En este sentido, los secretos totales de la trama no los descubriremos hasta el final. Será allí cuando los personajes de Eleanor y Clara ajustarán cuentas con un pasado que siempre las ha perseguido y que nunca han podido olvidar.
Pero por lo que destaca la cinta es por un nuevo acercamiento al mito del vampiro. Mito que aquí está tratado con respeto y lejos del edulcoramiento de las exitosas sagas para adolescentes. En esta película hay sangre porque tiene que haberla (incluso hay algo de cierto gore en determinadas escenas muy bien filmadas). Y también hay drama y dolor porque tiene que haberlo. Esto es así porque el vampiro tradicional no brilla con la luz del día y no va repartiendo margaritas ni amorosos besos. En pantalla, los personajes son conscientes de la maldición o bendición que tienen. Y, en base a ella, tratan de vivir y enfocar sus vidas. Eso sí, cada cual a su manera. Todo este universo de ‘Byzantium’ es completado con la banda sonora obra de nuestro compatriota Javier Navarrete. Su música sabe adaptarse perfectamente a la sensibilidad, terror y temas de la propuesta.
Los personajes principales del film son las dos mujeres, Eleanor y Clara, que son interpretadas de manera destacada por Saoirse Ronan y Gemma Arterton, respectivamente. En el lado masculino, y con papeles relevantes, nos encontramos a Daniel Mays, Caleb Landry Jones, Sam Riley y Jonny Lee Miller. Vamos con todo el casting importante en los siguientes párrafos…
Saoirse Ronan vuelve a meterse en la piel de un personaje solitario. Su Eleanor tiene cierta frialdad, pero también una innegable dulzura. Estamos ante un alma inocente castigada por pecados que no cometió. Ahora ha hecho de la soledad su escudo y tiende a presentarse como un “Ángel del último momento”… No es ningún misterio que este tipo de personajes se le dan muy bien a Saoirse. Aquí sus increíbles ojos azules van muy bien “acompañados” por el abrigo rojo con capucha que lleva en determinadas escenas cuál “caperucita roja”. Todo un acierto de vestuario. Como curiosidad hay que destacar que Saoirse toca en realidad el piano en la película sin dobles ni trucajes. Eso sí, tan sólo interpreta un extracto de una sonata de Beethoven.
La contraposición a Saoirse es Gemma Arterton como Clara. Su personaje es una mujer marcada y castigada por la vida por un despreciable individuo de esos cuya presencia y existencia ensucia al género masculino. Sin embargo, Clara ha sabido valerse por sí misma y afrontar la vida moviéndose siempre hacia delante con desparpajo, orgullo, valentía y cierto carácter depredador. Estas son las cualidades que Gemma Arterton dibuja francamente bien en su rol.
Otros intérpretes importantes que cabe destacar son: Daniel Mays dando vida a Noel, un pobre hombre que se ve atrapado por la telaraña de Clara. Caleb Landry Jones como Frank, un frágil joven del presente que intenta acercarse a Eleanor. Finalmente, mención para Sam Riley y Jonny Lee Miller como dos hombres del pasado de ambas mujeres. No conviene decir nada más de ellos para no entrar en spoilers.
“Que la paz sea contigo. Que la luz brille sobre ti” (Eleanor)
En conclusión.
Termino esta crítica de Byzantium, una apreciable película de Neil Jordan que cuenta con buenas y cuidadas imágenes, y una destacada música. Además, resaltan las interpretaciones de todo el elenco y la variada temática propuesta. Si os gustaron las citadas ‘Entrevista con el vampiro’ y ‘Déjame entrar’, entonces, seguramente os gustará esta nueva película “vampírica” del cineasta irlandés.
Tráiler de Byzantium
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