El Luchador (The Wrestler): Avance
¿Quién lo iba a decir que en pleno 2008 se estaría hablando tanto y tan bien de él? ¿Quién le iba a decir a este rebelde de nacimiento, que en pleno 2009 todos los que le dieron la espalda cuando lo perdió todo volverían a él? ¿Quién le iba a decir que visitaría el Kodak Center, como nominado al Oscar, cuando hace diez años vivía de prestado? Si esto no es el sueño americano, ¿Qué lo es?
¡Bienvenidos al Avance de ‘El Luchador (The Wrestler)’!
Título original: The Wrestler.
País: EE.UU.
Año: 2008.
Distribuidora en España: Wide Pictures.
Estreno en Cines España: Febrero 2009.
Duración: 105 minutos.
Director: Darren Aronofsky.
Reparto destacado: Mickey Rourke, Marisa Tomei, Evan Rachel Wood, Judah Friedlander, Ajay Naidu, Todd Barry, Wass Stevens, Judah Friedlander, Ernest Miller Aka: The Cat, Mike Miller, Dylan Keith Summers Aka: Necro Butcher, Gregg Bello, Ron “The Truth” Killings, “Luscious” Johnny Valiant.
El Origen: Buscando a Randy «The Ram» Robinson.
Las primeras noticias que salieron publicadas entorno a ‘The Wrestler’ (a mediados de 2007) fueron aquellas en las que se anunciaba como la próxima película de Nicolas Cage. Aún no estaba claro si Darren Aronofsky, estaría tras las cámaras o su nombre solamente aparecería bajo el rotulo de “producido por”, ya que Aronofsky se había asegurado total control sobre el film, produciéndolo él mismo, gracias a su productora Protozoa Pictures. Todo por aquella época eran dudas y extrañeza entorno al proyecto. De un lado el siempre irracional Nicolas Cage dando vida a un ajado luchador profesional. Cage un buen actor, que últimamente se está metiendo en numerosos fregados, tanto artísticos (ver como prueba de ello la trilogía del Apocalipsis que es ‘Wicker Man’, ‘Next’, ‘El Motorista Fantasma’) como personales (sus numerosos matrimonios, su obsesión por plantarse peluquines imposibles, su ganada a pulso fama de tío raro que está como una cabra) donde la que siempre sale mal parada es su imagen, que cae en picado y augura un futuro nada esperanzador para el otrora ganador del Oscar a «Mejor Actor» por ‘Leaving Las Vegas’. La presencia del protagonista de la menospreciada ‘Snake Eyes’, se antojaba una mala elección, le faltaba físico y le sobraban tics. Ello llevó a muchos a calificar el proyecto como otra más del “Cage”. Más aún cuando Aronofsky parecía más involucrado en llevar a buen puerto un proyecto con Brad Pitt y Mark Wahlberg titulado ‘The Fighter’, que contaría la historia de Mickey Ward (Mark Wahlberg) un boxeador blanco en su carrera hacia el título mundial de los pesos ligeros. Pitt iba a dar vida a su ex-alcohólico y ex-drogadicto hermano/manager. Y digo lo de iba, porque por segunda vez (la primera fue en la incomprendida ‘La fuente de la vida’), Pitt dejó colgado (y supongo que muy cabreado, por lo menos si yo fuera él, lo estaría) a Aronofsky. Con Pitt fuera del proyecto, las cosas empezaron a tornarse negras y Aronofsky que no quería pasar por otra experiencia el límite como fue ‘La fuente de la vida’ se terminó por decantar por dirigir ‘The Wrestler’. Pero aún no habían concluido los imprevistos para el autor de ‘Réquiem por un sueño’, ya que en plena pre-producción del film, Cage se desentendía de la cinta, sin motivos conocidos, y aparecía en todos sitios el nombre de su sucesor, Mickey Rourke. Cuando Cage se enteró, felicitó personalmente a Rourke, mediante un mensaje SMS que decía: «Enhorabuena, el papel de ‘The Wrestler’ estaba hecho para ti desde el principio».
No mucho tiempo después, empezó el trasiego de fotos robadas del set, imágenes oficiales del film. Y una vez concluido el rodaje, en septiembre de este año, por fin llego su esperado estreno en exclusiva en Venecia, que le reportó a la película el León de Oro y la aclamación unánime de la crítica allí desplazada. Toda la red y las revistas especializadas de cine comenzaron a calificar a ‘The Wrestler’ como la vuelta del infierno de Mickey Rourke. (Rourke actor, boxeador, rebelde y mito de los 80, admirado por los hombres y deseados por las mujeres, y dado por muerto antes de tiempo porque se le metió en la cabeza que partirse la cara contra boxeadores desconocidos en rings de mala muerte, era la mejor válvula de escape para olvidarse de sus problemas con los demás). Había vuelto, o eso decían, porque yo que llevo años siguiendo su carrera sé que nunca se fue, lo suyo fue un paréntesis. Y sé que entre visita y visita a los hospitales para suturar y curar las heridas de guerra, Rourke comenzó a entrar en razón. Los numerosos golpes recibidos en el ring y las cicatrices físicas que se iban acumulando, le encendieron la bombilla. Tenía que dejar atrás su (imposible) sueño de juventud de ser boxeador y debía volver al Cine y dar todo lo mejor de si mismo, mostrar al mundo todo el talento que tenia dentro y dejó ver en films míticos como ‘El corazón del Ángel’, ‘El borracho’ o ‘Manhattan Sur’.
La historia de ‘El Luchador’.
Para ‘El Luchador’, Aronofsky contaba por primera vez en su filmografía (cuatro films en 11 años de carrera) con un guión ajeno, escrito por el desconocido Robert D. Siegel (que debutará este 2009 en la dirección con guión propio, en el drama ‘Big Fan’). El libreto cuenta el viaje vital del wrestler Randy «The Ram» Robinson que en los 80 gozaba del fervor y la adoración masiva del público como uno de los mejores y más famosos luchadores profesionales del país. Ahora, 20 años más tarde, Randy se gana la vida a duras penas con actuaciones para un puñado de fans incondicionales de la lucha en gimnasios escolares y centros comunitarios de Nueva Jersey. Apartado de su hija Sthepanie, fruto de un matrimonio roto en plena época de efervescencia y con la que no se habla desde hace años e incapaz de mantener relaciones serias, Randy vive para la emoción del espectáculo y la veneración de sus fans. Sin embargo, un ataque al corazón en pleno combate le obliga a retirarse. Es en ese momento, despojado de todo, cuando su sentido de la identidad se diluye, empieza a evaluar el estado de su vida, comienza a trabajar como ayudante en un supermercado de pueblo, intenta recuperar el contacto con su hija, y busca a alguien con quien pasar lo que le queda de vida, la “afortunada”, una stripper soñadora, llamada Cassidy, que está dispuesta a comenzar una nueva vida. Pero todo lo que Randy está a punto de reconstruir, amenaza con derrumbarse, cuando le sirven en bandeja la oportunidad de un ultimo gran combate, contra su enemigo más acérrimo, El Ayatolah donde estará en juego mucho más que la fama perdida, estará en juego su propia vida.
Como habrán podido leer, el libreto es una historia tradicional de ascensión, caída y redención, muy en la línea del héroe callejero americano (sirva como ejemplo la saga ‘Rocky’). Algo totalmente inusual en la carrera de Aronofsky, que siempre imprime a sus cintas una atmósfera depresiva y unos personajes extraños y desahuciados. Otro dato más que añadir al proyecto fueron sus escasos 8 millones de $ de presupuesto. Una nimiedad, y una decisión más al frente de Aronofsky, él quería el control total en el rodaje y luego reservarse el derecho del final-cut del film y con un presupuesto bajo y controlado lo tendría. Una vez definido el presupuesto, las localizaciones y el actor principal, quedaban aún dos papeles más de peso en el film. Y estos fueron a parar a la ascendente Evan Rachel Wood (‘Thirthen’, ‘Simone’, ‘King of California’) que tendría a su cargo el papel de la hija de Randy, y la bellísima y felizmente recuperada Marisa Tomei (ganadora del Oscar a la «Mejor Actriz» por ‘Mi primo Vinny’. Y vista en cintas recientes como ‘Alfie’ o ‘Antes que el diablo sepa que has muerto’).
Para los papeles secundarios, el autor de ‘Pí’, se decanto por diversos luchadores poco conocidos de los circuitos independientes. Como Ernest «The Cat» Miller, que tendrá a su cargo el rol de villano de la función, el temible Ayatolah. Y en papeles fugaces luchadores jóvenes como: Necro Butcher, Ron «The Truth» Killings o «Luscious» Johnny Valiant.
Como dato curioso añadir que la canción original del film, es un favor personal y gratuito de la leyenda viviente Bruce Springsteen a Rourke, ambos muy buenos amigos desde hace décadas. El actor, le escribió una carta al Boss, donde le pedía que si podía y cuando tuviera un momento, les compusiera algo para la cinta. Y este les correspondió con una maravillosa canción, titulada igual que el film, que seguramente también tenga mucha presencia en cuanto a premios en los próximos meses. Las razones que adujo la mítica voz de Filadelfia fueron más que entrañables: «Conozco a Mickey desde hace tiempo y quiero ayudarle a regresar al lugar donde debería estar». «Lo hizo por amor y respeto”, declaró al respecto Rourke.
Estreno, repercusiones y cierre.
‘El Luchador’ era un proyecto que estaba pasando muy desapercibido, hasta que llegó su paso por Venecia. El prestigioso festival italiano, llenó de elogios y publicidad inmediata a la cinta. Y por ende a su protagonista, Mickey Rourke. Rápidamente se empezaron a oír palabras tales como “resurrección”, “interpretación legendaria”, “tour de force magistral” e incluso se hacían presagios entorno a la más que posible nominación de Rourke al Oscar, en un año bastante flojo en cuanto a actuaciones masculinas memorables(a falta de ver ‘Gran Torino’, ‘El curioso caso de Benjamin Button’ o ‘Milk’, que seguramente reportarán sendas nominaciones a sus actores protagonistas: Clint Eastwood, Brad Pitt y Sean Penn).
Por las imágenes que han visto la luz, acojonante trailer incluido, la actuación de Rourke promete ser antológica. Algo que no sorprende pues talento siempre ha tenido, otra cosa es que su carácter y su bien ganada fama de buscabroncas le hayan sumergido en un pozo, que casi lo lleva a la ruina. A punto estuvo de trabajar como simple peón de albañil a mediados de los noventa. Le salvaron sus amigos (Coppola, Sean Penn) algunos western para la tele por cable y su aparición estelar en ‘Double Team’ bajo las órdenes del inimitable Tsui Hark y junto (al renacido, gracias al éxito de critica, ‘JCVD’) Jean-Claude Van Damme. Aquella explosiva cinta de acción, devolvió a Rourke a la gran pantalla, en un rol más amplio de lo que acostumbraban los pequeños papeles en films independientes a los que tenia acceso. Después de aquello, los guiones volvieron a llegar a su mesa y los rodajes se unían unos con otros, ya fuera de secundario curtiéndose el lomo con Stallone en ‘Get Carter’, de mano derecha de Willem Defoe en ‘El Mexicano’ bajo la dirección de su buen amigo Robert Rodriguez y otros con menos suerte como su papel en ‘La delgada línea roja’ que se quedó en la sala de montaje olvidado por Terrence Malick. Pero sin duda ninguna la actuación que le devolvió definitivamente a lo más alto fue su tremenda transformación en Marv, en uno de los capítulos de la adaptación al cine de la novela grafica ‘Sin City’. Entre medias se permitió decirle NO a Tarantino DOS veces, ya fuera en el díptico ‘Kill Bill’ o en la fallida ‘Death Proof’.
Este 2009 parece ser el año de su vuelta al Olimpo. Nominado (por primera vez en su carrera) al globo de Oro como mejor actor. Y con una más que posible nominación al Oscar a las puertas, gracias a una historia de esas que tanto gustan en la Academia. Está por ver si Rourke finalmente se lleva la estatuilla dorada a casa, aunque sabiendo como es él, poco le importará. Gane o no, seguirá haciendo su vida, enrolándose en proyectos que le gusten (el Remake de ’13 Tzameti’, junto a Jason Statham y Ray Winstone, entre otros, o la segunda entrega de ‘Sin City’) y haciendo de las suyas, porque esa es la vida que ha elegido el único e inimitable Mickey Rourke.
No se pierdan la reseña de ‘El Luchador (The Wrestler)’ que podrán encontrar en nuestra base de datos de películas.
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