Tenerife Noir 2025: Entrevista a Ramón Langa

Con motivo de la celebración de la X edición del Festival Atlántico de Género Negro Tenerife Noir, tuvimos la grandísima oportunidad de charlar con toda una institución de nuestro país a nivel interpretativo en todas sus ramas. Nada más y nada menos que Ramón Langa. A continuación, repasamos este mágico encuentro con una de las más inolvidables voces de nuestra vida.
Tenerife Noir 2025: Entrevista a Ramón Langa
Dentro del marco del festival Tenerife Noir, en la rama de Talleres, asistimos el pasado viernes al pase del cortometraje ‘El tiempo airado’ (Manuel Vera, 2024). Hablamos de un corto protagonizado por Ramón Langa y Julio Peces que compite en el Festival de Málaga. Y fue gracias al visionado de la citada pieza que tuvimos el gran placer de charlar durante un buen rato con Ramón Langa. Este encuentro también fue posible gracias a su plena predisposición y a la excelente intermediación de la encargada de prensa del festival, Verónica Alemán. Desde estas líneas agradecemos enormemente el trabajo de Verónica. A continuación os dejamos la entrevista realizada íntegramente por nuestro compañero J. Glez.
-PREGUNTA: Primero de todo, gracias por su tiempo. Y no puedo pasar por alto la oportunidad para decirle que en Cineycine hemos crecido con usted en esto del séptimo arte. Imagínese nuestros primeros y flipados recuerdos de la Cannon y saber que usted “era” el malo de ‘Delta Force’.
-RESPUESTA: ¡Hombre! Muchas gracias. Sí, ‘Delta Force’, claro que me acuerdo que yo hacía del villano (puso su voz a Robert Forster) con Chuck Norris.
-P: ¿Cuéntenos en que proyecto está sumergido ahora?
-R: Pues ahora mismo me encuentro de gira con una obra muy bonita que se llama ‘Seis personajes en busca de autor’. Es un clásico de Luigi Pirandello bajo la dirección de Pepe Gamboa y Antonio Álamo. Y estoy encantado. Hemos estado en un montón de sitios de gira con ella… y todavía nos quedan muchos por ir. Para mí, el teatro es la magia de la interpretación real.
-P: Tenga por seguro que muchos lo llamarán maestro por su extenso bagaje y reconocida carrera en teatro, televisión y doblaje. Pero, ¿Cómo se definiría usted?
-R: De maestro nada… yo sigo aprendiendo. He hecho de todo. Más de treinta obras de teatro. Clásicos, series de televisión, más de setenta créditos en cine. Mi vida es un movimiento continuo. Así es como yo me tomo este oficio. Como un aprendizaje constante. Esto es como en la vida. Nunca dejas de aprender hasta el mismo día en que te mueres.
-P: Y pensar que usted empezó seriamente en ‘El caso Almería’ de Pedro Costa en 1984…
-R: Cierto. En ‘El caso Almería’ es donde empezaba Banderas, Echanove… y un servidor. Fue una película muy potente y trabé gran amistad con Agustín González, que me acogió como una especie de mentor. Fue un gran amigo y para mi fue un maestro. Un crack de la interpretación que me enseñó mucho.
-P: Usted, siendo la voz en español de Bruce Willis, ¿Cómo vivió esos últimos años en donde veíamos a Bruce hacer películas como churros?
-R: Pues con mucha tristeza. Con nostalgia agradecida, pero con mucha pena. En esas diez o doce películas que le doblé por último, yo me decía ¿qué la ha pasado a este hombre? Y luego descubrí que estaba enfermo y lo ponían allí y hacía lo que podía. Pero sí, con mucha pena. Después de cuarenta años yo ya le había cogido cariño.
-P: ¿A qué cree que se debe que su voz y la de Bruce Willis lograran esa conexión tan fuerte con las audiencias? ¿Qué actuación y doblaje de Bruce Willis destacaría?
-R: Mi éxito con Willis fue hacer lo que hacía él en pantalla. En eso radica el buen doblaje. Y yo creo que eso con Bruce lo conseguí. El éxito fue ser fiel a lo que el hacía y creo que por eso caló tanto. Y, por otro lado, en ‘Armageddon’ fue donde más emoción y fuerza sentí. Llegado el momento recuerdo que hasta lloré mientras estábamos con una de las escenas cumbres del final. Aquella película fue cojonuda. Me vi tanto en aquella situación que también acabé llorando.
-P: ¿Y qué pasó en ‘La muerte os sienta también’ que usted no dobló a Willis y en su lugar fue Jordi Braú?
-R: Esta no pude hacerla por otros compromisos. Esa y también ‘Cita a ciegas’ fueron dos trabajos que no pude llevar a cabo con Bruce por temas logísticos.
-P: Usted dobló de forma puntual, por ejemplo, a Jack Nicholson, Al Pacino o Christopher Walken.
-R: Sí, pero a Nicholson lo doblaba Rogelio Hernández, que para mi era un Dios del doblaje. Además, tuve la suerte de conocerle y fuimos muy buenos amigos. Sus doblajes eran como una sinfonía. Y por esa película, ‘Ella nunca se niega’, me llamaron a mí y no era muy buena. Y dije, hombre ¿¡para esto por qué no llamaron a Rogelio Hernández!? (risas). Con Pacino fue un trabajo durísimo y era una película muy buena, ‘El dilema’. Recuerdo que tuve que rasgar mucho la voz para acércame a la de Pacino… que parece que se la ha rasgado un tigre. Fue un buen trabajo sí. Al Pacino es un actor tan bueno que se deja doblar bien. Y verlo, estudiarlo… y ¡carajo! lo sientes.
-P: Después de doblarlo en varias películas, entre ellas la oscarizada ‘Bailando con lobos’, ha vuelto usted a ser la voz de Kevin Costner en ‘Horizon: An American Saga’. ¿Vaya bonito reencuentro, no?
-R: Sí. Al parecer van a ser cuatro capítulos. Yo he doblado solo la primera y creo que no ha tenido éxito y no tengo noticias de que hayan doblado más. Pero sí, ha sido un trabajo donde me lo he pasado bien doblando de nuevo a Kevin Costner.
-P: Seguro que le pasa constantemente por la calle eso de que vaya, y le reconozcan, y le pidan una frase de cine… Al margen de la imprescindible “Yippy-Kay Jee” de ‘Jungla de cristal’, ¿Cuáles le suelen pedir más o le recuerdan cuando le ven?
-R: Me piden mucho aquella de ‘El último Boy Scout’ en la que Willis decía: “Si me tocas te mato”. Aquella era una película cojonuda. Y me la piden muchísimo. Y, claro, la de “Yippy-Kay Jee”.
-P: Y qué me dice del dialogo final de ‘Sin City’: “El viejo muere, la chica vive. Me parece justo”.
-R: Pues hace años que la doblé y no me acuerdo mucho, pero sí… esa frase es fantástica. Fue un buen doblaje ¿eh? Es que esa película, no es por nada, pero fue un peliculón. Original y rompedora.
-P: Haciendo balance… ¿De qué trabajos está usted más orgulloso, o diría algo así como: Aquí sí que hemos dado con algo grande?
-R: En teatro: ‘Pregúntame por qué bebo’ (1997) de Juan Carlos Ordoñez. En cine diría ‘La vida de Blasco Ibáñez’ (1998) a las órdenes de Luis García Berlanga y ‘Yoyes’ de Helena Taberna (2000).
-P: ¿Un mensaje final para los amantes del cine?
-R: Que la gente vaya al cine para que toda esta rueda no se pare. Que están muy bien las series y demás… pero hay que ir al cine. Como decía el productor de Milos Forman: “El ahorro del cine es meter a la gente en el cine…”. Es decir, el cine tiene que vender entradas. Este es el negocio. Y eso es lo que vengo diciendo toda la vida. Es lo que hacían los productores antiguamente. Llenar los cines para ganar dinero y volver a hacer otra película. La verdadera industria se ha perdido. Eso lo puedes decir como te lo cuento. El cine tiene que vivir del publico y no del dinero público. Lo que hay que hacer es tener una película ocho meses en un cine y llenarlo. Preocuparse de que el producto sea muy bueno.
Nota: Las fotos de Ramón Langa que ilustran esta entrevista han sido cedidas por el propio actor a través de su sitio personal: www.ramonlanga.com
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