Escape de Absolom
El capitán Robbins fue condenado en el año 2011 por matar a sangre fría a un superior mientras se encontraba de misión en Libia. Ahora, tras dos fugas en sendas prisiones, es enviado a una corporación privada de la que no podrá escapar si no es con los pies por delante. Muy pronto el autoritario alcaide le pone bajo seguimiento. Esto llevará a Robbins a rebelarse y ser enviado a un lugar del que no existe conocimiento: la isla de Absolom. (Cineycine).
En el año 2022, el sistema internacional de prisiones fue absorbido por las corporaciones privadas. Criminales de todo el mundo eran tratados como mercancía con la que lucrarse. Las cárceles se han convertido en un gran negocio. Cuando ya no eres útil para la sociedad te mandan a prisión. Cuando no te adaptas a la vida en prisión te envían a una isla de donde nadie vuelve con vida. A continuación, presentamos a Ray Liotta en… ‘Escape de Absolom’.
“Han llegado aquí desde el mundo entero porque ya no resultan útiles a la sociedad. El sistema internacional de prisiones ya no espera poder rehabilitarles. Este lugar será su casa hasta la muerte, porque la muerte es la única salida. Aquí no hay oportunidad de indulto ni posibilidad de escapatoria. Están condenados. Pueden aceptarlo o morir” (Alcaide)
Crítica de Escape de Absolom
La cinta que hoy nos ocupa siempre me pareció la respuesta a gran escala de las temáticas de cárceles futuristas vistas en ‘Peligrosamente unidos’ (Lewis Teague, 1991) o ‘Fortaleza infernal’ (Stuart Gordon, 1992). ‘Escape de Absolom’ parte del argumento primario de éstas: una cárcel del futuro. Una prisión heredera de una sociedad distópica y, en apariencia, inexpugnable. Se parte de recoger a los peores criminales y llevarlos hasta una isla. Una isla que alberga a los presos que no se atienen a las normas del presidio. Allí viven en dos tribus. Por un lado, unos caníbales conocidos como “Los Outsiders”. Y, por otro lado, “Los Insiders”, una especie de comuna neo-hippie que se ha abrazado a la religión y a la no-violencia para seguir vivos.
El film está basado en la novela ‘The Penal Colony’ escrita por Richard Herley. Para cines, Michael Gaylin y Joel Gross la adaptaron libremente. Estos dos guionistas también se encargaron del videojuego homónimo que fue lanzado el mismo año 1994 para la mítica Sega Génesis.
Detrás de las cámaras encontramos a Martin Campbell. Este fue el terreno en el que se fogueó para dar el salto inmediato a la franquicia de 007 con ‘GoldenEye’ (1995). El neozelandés entrega aquí una rabiosa cinta de acción y aventuras muy de su estilo. ‘Escape de Absolom’ es una de las pequeñas pero míticas cintas de culto de los noventa. Sin embargo, le pesó no ser distribuida por una grande. La extinta Savoy fue quien la movió sin mucha fe en EEUU. Actualmente, la película merece ser editada en Blu-Ray en buenas condiciones para España porque su DVD (Sony) es bastante mejorable…
El buen hacer de Campbell le abrió las puertas de las grandes ligas y, tras firmar su aventura junto a James Bond, llegarían sus mejores años. En ese periodo nos dejaría films como ‘La máscara del Zorro’ (1998), ‘Límite vertical’ (2000) y ‘Casino Royale’ (2006). Sin duda, una década de oro para Campbell. Tan buena ración de películas sería rematada con su obra más redonda en el año 2010, ‘Al límite’.
En la producción encontraremos el nombre de la mítica Gale Anne Hurd, una de las productoras más importantes de la ciencia ficción de los últimos cuarenta años. Gale empezó como asistente de producción del legendario Roger Corman. ‘Escape de Absolom’ fue destrozada por la crítica tras su primer fin de semana como número 1. Al final terminó con unos escuetos 15 millones de dólares para una inversión de más de 20. En el mercado del video fue todo un éxito y gracias a su videojuego pudo doblar su inversión. Sin embargo, esto no fue suficiente para que Ray Liotta hiciera carrera como action-man. Así pues, retornó a papeles secundarios donde sí brillaría a base de talento en la década de los noventa.
La score corre a cargo de Graeme Revell, sin duda una banda sonora que se adapta perfectamente a la acción. Sus partituras son “metálicas” cuando se visita la penitenciaria y salvajes… y de fanfarria militar cuando llegan hasta Absolom. La fotografía la firma todo un habitual de Campbell, Phil Meheux.
El protagonista absoluto es Ray Liotta en un papel muy poco visitado en su carrera. En este film se puso a prueba a sí mismo para ver si tenía madera de héroe de acción. Liotta encarna al antiguo Capitan J.T. Robbins, condenado a cumplir condena en Absolom por el asesinato de un superior.
A nivel físico, lo da todo y nada se le puede criticar. Liotta suelta firmezas, pega tiros, planta batalla en combates ante enemigos poderosos y traza planes para derrotar a “Los Outsiders”. También intentar huir de la inexpugnable isla donde están recluidos para ajustar cuentas con el Alcaide. A nivel interpretativo sólo se le puede reprochar el permanecer demasiado hierático, a pesar de todo lo que va sucediendo. Incluso en algún momento da síntoma de aburrimiento en su rostro. No obstante, consigue salvar el papel con buenos momentos de ira y las sentencias que va largando a los jefazos tanto en la prisión como en la isla. Globalmente entrega un buen papel, pero no lo suficiente como para hacer carrera en el género, como efectivamente le sucedió. Esta fue su gran y única oportunidad como protagonista de una producción de acción importante.
Stuart Wilson (Marek) sería el segundo de a bordo. Aquí estamos ante todo lo contrario que con Liotta. Wilson se lo pasa pipa siendo el líder de “Los Outsider” y no dejando que nadie cuestione a su autoridad. Todo hasta que Robbins aparece y le roba su arma/bastón de mando y pone en duda su liderazgo. Otro que se luce es el gran Lance Henriksen como “El padre”, un líder espiritual que cree en un mundo mejor dentro de una isla/prisión. Henriksen intentará instruir a Robbins en la paz y el ecologismo, pero este tiene sus propias metas…
Del resto del elenco destacar a Ernie Hudson, Ian McNeice, Kevin Dillon, Jack Shepherd y Kevin J. O`Connor. Este último encarna uno de los más curiosos roles: el de una especie de mercachifle que se obsesiona con las botas de Robbins y se jacta de conseguir lo imposible. Por su parte, Ernie Hudson entrega uno de sus roles de tipo duro pero quizá estaba demasiado triste. Acababa de rodar ‘El cuervo’ (Alex Proyas, 1994) y aún estaba muy afectado por la muerte de Brandon Lee. Del resto del cast no puedo dejar de nombrar a Michael Lerner en una interpretación intencionadamente odiosa como el alcaide. Aquí tenemos a un tipo con un chiringuito muy bien montado que subestima el instinto de supervivencia de Robbins.
“No vuelva a darme la espalda” (Robbins)
En resumidas cuentas.
Finalizo esta crítica de Escape de Absolom, una curiosa variación del subgénero carcelario futurista. Destacan sus importantes ramalazos a lo ‘Mad Max II’ y la presentación fugaz de Ray Liotta como jefe de patio en una producción de nivel. Llegó a ser una cita ineludible trimestral en las cadenas nacionales durante la buena época del cine en abierto.
Tráiler de Escape de Absolom
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