8 puntos para "El Cazador"
7 puntos para "Depredador 2"
6 puntos para "Pequeña Miss Sunshine"
5 puntos para "La Jungla 2"
4 puntos para "Sin Perdón"
3 puntos para "Men in Black"
2 puntos para " Matrix Revolutions"
1 punto para "Silent Hill"
Comentario:
Vendida como si fuera una del Vietnam y de guerra, pero que en realidad es la macro-epopeya de una generación de emigrantes que ven cómo su amistad queda irremediablemente cambiada con la Guerra al mismo tiempo que es una crítica/elegía al sueño americano, "The Deer Hunter" es una de las mejores películas de la historia del cine que contó con un reparto en estado de gracia (es más, De Niro hace la mejor actuación de su vida muy por encima de "Toro Salvaje": si allí era básicamente una transformación exterior, aquí es una transformación interior), una dirección de fotografía absolutamente acojonante de Vilmos Zsigmond (ojo a las salidas al monte, las escenas de la factoría, ese Saigón infernal o las escenas nocturnas en el pueblecito de Clairton), una banda sonora de Stanley Myers con la justamente célebre "Cavatina" y un director maravillosamente loco y megalómano como era (y sigue siendo) Michael Cimino, que convierte lo que pudo haber sido un vulgar telefilm de sobremesa de Antena 3 en algo "Bigger than life". Ya no es que se codée con sus compañeros de generación Coppola y Scorsese: es que llega a sobrepasarlos por momentos y llegar a las cotas de los más grandes, como Kurosawa, Kubrick o John Ford. Toda la escena de la boda es de por sí un prodigio que no supone ninguna carga: Aparte de hacerte partícipe de la alegría del pueblo y servir para dar a conocer mejor a los personajes (por ejemplo, el de John Cazale, que ya te telegrafía lo cobarde y mierdecilla que es bajo su apariencia de machote y al que De Niro le dará un escalofriante "merecido" en la cabaña), te hace más duro el jarro de agua fría que te lanza Cimino con las escenas de Vietnam. La famosa escena de la ruleta rusa forma parte de la historia del cine y sigue poniendo a uno de mucha tensión hasta llegar al malestar físico (un servidor con 14 años, que fue cuando la vió por primera vez, lo pasó tan mal que tuvo que darle al "pause" del VHS). Poco importa que lo villanos sean "charlies" comunistas o nazis fascistas: el objetivo de "El Cazador" no es hacer un panfleto político antiizquierdista (y quien así lo piense que eche un vistazo a "La Puerta del Cielo", la siguiente cinta de Cimino), sino mostrar lo terrible que puede llegar a ser una guerra injustificada con la metáfora de la ruleta. Hay que mencionar también las escenas en ese pueblecito de cielos grises con la maravillosa Meryl y sus momentos íntimos con De Niro o éste en la soledad de su habitación de Motel al volver de la Guerra. Un clímax en un Saigón en las últimas espléndidamente fotográfiado y en donde Cimino te mete otro jarro de agua no ya fría, sino bajo cero, nos lleva a un epílogo sobrecogedor y emocionante donde los personajes, aún con todo, siguen apoyando a América irremediablemente. Lástima que esa misma locura y megalomanía fueran en buena parte responsables del descalabro porterior de su director y su ostracismo en un Hollywood de saldo. Él sí que fue el rey del mundo. Los nuevos reyecitos de ahora (no daré nombres) que se queden con la corona demasiado grande para ellos y abollada.
Si habéis llegado al final del tocho, felicidades.

Formaba parte de un proyecto de post para mi blog al que aún tengo que dar forma. Mañana comento las otras pelis.