Poltergeist (Fenómenos extraños)
Comparte con tus amigos










Enviar

Hace ya ¡40 años! que se estrenó en cines norteamericanos ‘Poltergeist (Fenómenos extraños)’. Hablamos de todo un clásico indiscutible del cine de terror y fantástico. Este aniversario es, sin duda alguna, una oportunidad única para repasar esta mítica y legendaria película. Un film que aterrorizó tanto a pequeños como a adultos dando lugar a una nueva e icónica franquicia.

“Mamá ¡Ya están aquí!” (Carol Anne)

poltergeist-carolanne

Crítica de Poltergeist (Fenómenos extraños)

Cuenta la leyenda que fue realmente Steven Spielberg, y no Tobe Hooper, el verdadero realizador de ‘Poltergeist’. Rumor que, pese a su obvia extraoficialidad, no deja de ser un hecho más que verídico si analizamos profundamente la película. Y es que sólo debemos comparar la filmografía de Spielberg con la de Hooper para verificar que, efectivamente, ‘Poltergeist’ es una cinta marcada prácticamente en cada minuto de metraje por el inconfundible sello de Spielberg. Esto es algo que se deja ver tanto en el planteamiento de la historia (no exenta de secuencias realmente inquietantes, pero con un tono claramente enfocado hacía todos los públicos) como en los rasgos y características de los personajes (en donde la figura infantil se torna de vital importancia, como era habitual en la carrera de Spielberg).

También están los aspectos técnicos. Me refiero a los depurados y bellos efectos visuales (muy propios del fantástico de Spielberg), los precisos ángulos y elegantes tomas (algo muy usual en la obra del realizador) o la edición y montaje de la película. Todo esto resulta visiblemente opuesto al estilo de Hooper. Un estilo mucho más crudo y sucio de lo que Spielberg hubiera deseado para su producción. Es cierto que, puntualmente, se deja entrever ese estilo un tanto perturbador de Hooper. Esto quiere decir que éste luchó hasta el último momento por mantener parte de su visión sobre la película. Su marca se puede apreciar fácilmente en secuencias de contenido abiertamente visceral. Secuencias como la terrorífica aparición de los putrefactos cadáveres de la piscina, o el momento en el que uno de los parapsicólogos se despedaza el rostro frente a un espejo.

Todo lo descrito anteriormente convierte a ‘Poltergeist’ en una obra un tanto extraña. En cualquier caso, el director acreditado del film siempre fue Tobe Hooper. Aunque, por lo que respecta a un servidor, estamos ante una película con un toque total y claramente Spielberiano.

poltergeist-muertos

La historia de ‘Poltergeist’ se inició cuando Steven Spielberg comenzó a escribir un primer tratamiento del guion durante el rodaje deEn busca del arca perdida (1981). Recordemos que esta película fue producida por su amigo Frank Marshall. Tras plantearle el argumento al propio Marshall, la Metro Goldwyn Mayer decidió hacerse con los derechos de la historia. La intención era la de financiar el futuro proyecto. Pero Spielberg no era el único realizador al que le cautivaba la idea de filmar una película de índole sobrenatural. Una cinta que incidiera en el factor parapsicológico y en el fenómeno poltergeist. Aquí es cuando entra en escena Tobe Hooper, un amante confeso de lo paranormal. El director de La matanza de Texas también planeaba rodar una película de temática fantasmal.

Tras varios años escribiendo su propio guion, Hooper recibió una llamada de Spielberg, a principios de los años 80. Spielberg le propuso dirigir una película sobre extraterrestres. Sin embargo, Hooper rechazó la propuesta. Le comentó al mítico realizador que su mayor deseo era rodar una cinta de fantasmas y contenido sobrenatural. Fue en este instante cuando ambos realizadores unieron esfuerzos para escribir conjuntamente (o eso afirmaba Hooper) el guión definitivo de ‘Poltergeist’. De la producción se ocuparía el propio Spielberg junto a Frank Marshall, aunque no bajo su sello Amblin Entertainment, sino a través de la MGM.

Una vez iniciado el rodaje, en mayo de 1981, comenzaron a circular rumores asegurando que Steven Spielberg estaba dirigiendo ‘Poltergeist’ y no Tobe Hooper. Según se dice, este último se limitaba a recibir estrictas directrices de Spielberg para que la película fuera plenamente de su agrado. Eso cuando no hacía acto de presencia en el set para tomar las riendas del rodaje. Algo que, sospechosamente, contrasta con el hecho de que Spielberg aparezca acreditado como responsable de la historia original y como guionista junto a Michael Grais y Mark Victor… y no Tobe Hooper. Tal y como he manifestado, Hooper se atribuía la historia principal asegurando además que, durante la filmación de ‘En busca del arca perdida’, escribió el libreto definitivo junto a Spielberg. Pero en los créditos oficiales no hay ni rastro de Hooper, ni como guionista, ni como autor de la historia.

La polémica expuesta cuenta con varias versiones. Una de las más famosas fue la de un periodista de Los Angeles Times. Al visitar el rodaje, el reportero comprobó que el jefe de todo era Spielberg. Tan es así que el Sindicado de Directores de EEUU (DGA) ordenó una investigación para aclarar si era cierto lo que el periodista había presenciado en el set. Flaco favor le hicieron a Spielberg algunos miembros del reparto y del equipo de producción. El cast y los especialistas afirmaron que, efectivamente, Spielberg no sólo se encargó de producir y de escribir el guion del film, sino también de dirigirlo. Por si fuera poco, también afirmaron que se ocupó de supervisar los efectos especiales. Amén de controlar al detalle cada aspecto del rodaje. Finalmente, Spielberg fue multado por la DGA con la cifra de 12.000 dólares por asumir de forma ilegal las funciones del director acreditado.

La polémica surgió de una norma establecida por la DGA. Esta norma prohibía a todo cineasta dirigir dos películas paralelamente. Algo que también quedaba reflejado en una cláusula del contrato que Spielberg había firmado con Universal Pictures para dirigir ‘E.T.’ (1982). La intención de Spielberg siempre había sido filmar ‘Poltergeist’. Sin embargo, por problemas de agenda no pudo hacerlo, ya que en el momento de iniciar el rodaje aún se encontraba inmerso en la postproducción de ‘E.T’. Además, y legalmente, no podía desatender prematuramente la dirección de la película, pese a que ya había sido rodada por completo, puesto que el proceso de post-producción sigue formando parte de la fase de realización. Por lo tanto, la solución era sencilla: buscar a un colega de profesión, Hooper, para encargarle la dirección de ‘Poltergeist’. La condición básica era que se dejara guiar por el verdadero creador del proyecto: Spielberg.

Desde una perspectiva más adulta, ‘Poltergeist’ se ha convertido en una película que, sin perder la exquisitez y la esencia que nos cautivó de jóvenes, en los tiempos actuales resulta imposible no observarla desde una mira un tanto más amplia. Esto hace que nos encontremos ante el buen producto de terror que siempre ha sido. Pero esta vez de forma especialmente relativa. A estas alturas es evidente que es una producción invadida por un estilo de horror elegante y refinado para todos los públicos. Esto último algo que, en su época, no era tan sencillo de percibir. Y no lo era porque el público estaba poco curtido y además su temática aún no había sido tan explotada.

No obstante lo anterior, no nos engañemos. A pesar de que es una película excesivamente denostada por relegar sutilmente a un segundo plano el horror en detrimento de la idílica unidad familiar, y de la más espectacular exhibición sobrenatural, precisamente es aquí donde radica el mayor logro de la cinta. Es decir, en su capacidad para ofrecernos algo totalmente innovador y fresco con respecto a las películas de índole fantasmagórica. Me refiero a las propuestas exhibidas hasta esa fecha. Películas donde el terror más clásico y la sugestión eran las piezas angulares sobre las que giraba todo el conjunto. Algunos ejemplos serían: ‘La mansión de los horrores’ (William Castle, 1959), ‘La mansión encantada’ (Robert Wise, 1963), o la magníficaAl final de la escalera (Peter Medak, 1980).

‘Poltergeist’ es una película que pretendía ir un paso más allá. Su intención era mostrarnos, siempre del modo más increíble e impactante posible, una sucesión de acontecimientos paranormales. Y mostrarlos como nadie se había atrevido a relatar anteriormente en una pantalla de cine. Aquí es donde entran los increíbles efectos especiales de Industrial Light and Magic (merecedores de su nominación a los Oscar, así como del galardón BAFTA). Los efectos juegan un papel crucial en la trama junto a la sensacional banda sonora de Jerry Goldsmith, igualmente nominada a los premios Oscar de 1983.

poltergeist-luz

Tampoco me olvido de otros factores destacables. Entre ellos estarían ciertas reminiscencias sociopolíticas presentes en la trama a través de sutiles alusiones a la era Reagan. Sin obviar ese mensaje sociocultural que alude al inconfeso protagonismo de la televisión como elemento peligrosamente indispensable en los hogares de cualquier familia de clase media. Curiosamente, es la televisión el origen de todos los males de la familia Freeling. Esto último, sin duda, es una gran metáfora sobre su extremo poder de dependencia. Y claro… la intachable capacidad de Spielberg/Hooper para fusionar con vigor dos concepciones tan dispares como lo son el cine de terror y el cine familiar para todos los públicos. Todo lo comentado hace de ‘Poltergeist’ una pieza bastante inclasificable. Estamos ante una obra genuinamente única no exenta incluso de pequeñas pinceladas de humor. Esto último logra captar la simpatía del espectador hacía una familia modélica.

En el reparto, la familia Freeling estaba liderada por los entonces desconocidos Craig T. Nelson y Jobeth Williams en el papel de Steve y Diane Freeling. Sus tres hijos (Dana, Robbie y Carol Anne Freeling) fueron interpretados por los jóvenes Dominique Dunne, Oliver Robins y la pequeña Heather O’Rourke. A esta última, Spielberg le otorgó el papel principal infantil tras haber considerado también a una pequeña Drew Barrymore. Sin olvidarnos de una pieza clave en el reparto: la actriz Zelda Rubinstein, que interpreta a uno de los mejores personajes del film, Tangina, la médium que ayuda a la familia Freeling a rescatar a la pequeña Carol Anne del más allá.

poltergeist-medium

En cualquier caso, y pese al tono un tanto edulcorado de la cinta, esto no quiere decir que esté exenta de ese factor que nos atemorizó siendo tan sólo unos críos. Porque ‘Poltergeist’ sigue resultando una propuesta terrorífica y, por momentos, una de las experiencias cinematográficas más inquietantes del género. Especialmente durante la maravillosa primera hora de un metraje que incide en los terrores infantiles que todos hemos experimentado alguna vez: un árbol cuyo tronco parece simular rostros humanos, una tormenta incesante, un oscuro armario frente a la cama, un payaso de juguete que parece observar a su dueño,… Todos ellos, elementos en los que Spielberg hizo especial hincapié al tratarse de miedos que el propio realizador sufrió a lo largo de su propia infancia.

Durante los dos primeros actos del film, seremos testigos de la evolución de una serie de fenómenos extraños a cada cual más sorprendente y estremecedor. Así hasta llegar a un punto en que, durante el último tercio de metraje, cierto exceso de pirotecnia termina por romper parte de ese interesante clímax tan bien construido hasta ese instante. Pero esa exhibición final también forma parte de la gracia de la película. Porque el film es un grandilocuente espectáculo sobrenatural que, durante más de cuatro décadas, nos ha metido el miedo en el cuerpo cada vez que nuestro televisor se estropeaba o la emisión se cortaba de forma inesperada. Quizás haya alguien en el otro lado que intenta comunicarse con nosotros cada vez que nuestro televisor se desintoniza…

En resumidas cuentas.
Concluyo esta crítica de Poltergeist (Fenómenos extraños), uno de esos clásicos imperecederos del cine de terror y/o fantástico más influyentes del género. Una obra de culto que creó escuela y que en los años 80 fue capaz de aterrorizar tanto a pequeños como a adultos resultando tan impactante y eficaz como el primer día. Una cinta que dejó multitud de momentos icónicos para el género de terror convirtiendo a la pequeña Heather O’Rourke en el nuevo rostro del cine de horror de la época. ‘Poltergeist’, a pesar de sus defectos y de no ser el primer film en tratar el tema de los fenómenos paranormales, se convirtió por derecho propio en la película definitiva del género.

Relacionado: La maldición de Poltergeist.

Tráiler de Poltergeist (Fenómenos extraños)

Escucha nuestro podcast