Deadpool y Lobezno

Parece que, por fin, la vida sonríe a Wade Wilson. Ha dejado atrás sus días de superhéroe para estar con aquellos que le quieren. Pero la TVA, agencia que controla la sagrada línea del tiempo, le dice que su universo va a ser erradicado. Por ello, Wilson deberá buscar una solución. Y esto será lo que le llevará a unir fuerzas con el legendario mutante conocido como Lobezno. (Cineycine).
Desde que se hiciera la primera entrega de Deadpool, hace casi 10 años, se habló mucho de que el mercenario bocazas y el mítico mutante de las garras de adamantium deberían haber compartido una película juntos. Ahora, y en un tiempo en el que los superhéroes en general no están para muchos trotes, Ryan Reynolds ha conseguido recuperar a Hugh Jackman como Lobezno para la gran pantalla. Preparad las chimichangas y poneos la licra amarilla más ajustada posible porque ‘Deadpool y Lobezno’ vienen a pasarlo en grande.
“Soy como un mesías… soy el Jesucristo de Marvel” (Deadpool)
Crítica de Deadpool y Lobezno
Cuando se estrenó ‘Deadpool’ (Tim Miller, 2016), mucha gente fue pillada con los pantalones bajados. Estábamos en un tiempo en el que los superhéroes lideraban la cúspide. Pero la entrada de “el mercenario bocazas” como “héroe” incorregible, y totalmente ajeno a los grandes eventos para todos los públicos, fue una gran sorpresa. Su película era un festival de sangre, metacine y mucha diversión. Tal fue su éxito que supuso la recuperación de su protagonista: Ryan Reynolds. Anteriormente a esta cinta estaba de capa caída y destruido en el género superheróico por su ‘Green Lantern’ (Martin Campbell, 2011). Al final de su exhibición en cines, ‘Deadpool’ terminó haciendo la desorbitada cantidad 781 millones de $ mundiales para un coste de tan solo 58. Obviamente la idea de rodar una secuela quedó en el ambiente.
La idea de Reynolds para una continuación implicaba añadir a la ecuación a Lobezno. Pero, tan solo un año después, Hugh Jackman diría adiós al personaje en la magistral ‘Logan’ (James Mangold, 2017). Por ello, ‘Deadpool 2’ (David Leitch, 2018) tuvo que contar con Josh Brolin como Cable en un rol de coprotagonista. Esta secuela ya gozó de un presupuesto superior con Reynolds como máximo responsable del proyecto. Sus 110 millones de coste se vieron recompensados con casi 786 millones de recaudación global.
Tan sólo un año después, en 2019, Disney compró la 20th Century Fox con todas sus películas y personajes… incluido Deadpool. En ese momento la idea de una tercera entrega del mercenario bocazas no era una prioridad. A Marvel Studios le preocupaban más sus producciones para un público global y no parecían dispuestos a apostar por una película para mayores de 18 años. Sin embargo, la crisis del cine de superhéroes provocó un cambio de planes. Ahora el antihéroe regresaría y además Reynolds tendría total libertad para tratar de convencer y traer de vuelta a Jackman y su Wolverine. Y, claro, lo más sólido y brillante de ‘Deadpool y Lobezno’ es ver a Ryan Reynolds mano a mano con Hugh Jackman en los roles que los han mitificado dentro de la industria. Lo demás casi no cuenta…
‘Deadpool y Lobezno’ no aporta nada nuevo dentro de la trilogía de “Masacre”. Tampoco aporta un nivel de calidad superior a la media actual del MCU. Así pues, bien podemos decir que ya han pasado aquellos tiempos donde el estudio de Kevin Feige presumía de todas sus películas. En cualquier caso, el presente film no es propuesta mala ni mediocre… simplemente es el show de Ryan Reynolds y Hugh Jackman. En este aspecto, la publicidad y el film no engañan a nadie. Ver a Deadpool y a Lobezno en pantalla peleándose, escupiéndose mofas, insultos y rajando el uno del otro cumple sobradamente con lo prometido. Los fans querían esto y Reynolds se lo ha dado.
Nadie puede negar que Reynolds y Jackman rebosan química por los cuatro costados. Ellos son lo mejor de un proyecto que se centra casi al cien por cien en sus personajes. A fin de cuentas, estamos ante una buddy-movie en toda regla. Ryan Reynolds está en su ambiente como el ya legendario mercenario con sus metareferencias, chistes sexuales e improperios varios a punta pala. Básicamente su personaje vuelve a ser eso… no hay más, salvo las consabidas escenas dramáticas donde no se sabe si en cualquier momento, Reynolds estallará o no con otro cachondeo. Al margen del show de Reynolds y Jackman… otro detalle importante es que ‘Deadpool y Lobezno’ es una especie de carta de despedida al ya desaparecido universo de la FOX. Y esto es una autoparodia que, en ocasiones, roza el exceso.
Y si acabo de decir que Reynolds está en su salsa, Hugh Jackman no le va a la zaga. Con 55 años sigue exhibiéndose en plena forma para dar vida al enfadado mutante. Jackman mantiene todo su carisma y presencia… incluso más teniendo en cuenta su debut en la ya lejana ‘X-Men’ (Bryan Singer, 2000). Su coprotagonismo en ‘Deadpool y Lobezno’ es enormemente agradecido. Incluso podremos verlo, por fin, vestido con su famoso traje de licra amarilla. Un disfraz que, durante años, los fans han reclamado a tope. El resto del reparto de caras conocidas como Morena Baccarin, Rob Delany o Brianna Hildebrand simplemente “pasan por ahí”.
Y, precisamente, para los fans también hay varios cameos especiales (algunos son de lo más inesperados y te sacan una sonrisa) y homenajes. Pero la sensación que deja la película es la de una producción planita. Y eso a pesar de haber costado, según qué fuentes, entre 200-250 millones. Todo ese dinero no luce ciertamente bien. Incluso viniendo de alguien como Shawn Levy, un realizador eficiente en sus producciones. Aquí nos ofrece una dirección correcta, pero en nada superior a las de Tim Miller y David Leitch. En ‘Deadpool’ y ‘Deadpool 2’ había un mejor cuidado en las secuencias de acción que además eran más imaginativas. En esta ocasión solo destaca la set-piece que abre el film y que se retoma posteriormente… Incluso en el campo de los efectos visuales hay algún desajuste con tomas muy cuidadas y otras que parecen estar hechas a toda prisa.
Por otro lado, es cierto que las películas de Deadpool, en su propio núcleo, no han sido nunca el culmen de la escritura fílmica… pero sí que había cierto esfuerzo en dotarlas de ingeniosidad y frescura en cuanto a su intencionalidad meta. En este sentido, la primera cinta ha quedado como la más trabajada y la que tenía mayor chispa. En esta tercera parte, el guión ¡escrito por hasta cinco guionistas! no deja de ser una excusa demasiado liviana para justificar que “Masacre” entre al UCM. Y todo metiendo por el medio a la TVA… En el libreto también tocaría hablar de Cassandra Nova interpretada por Emma Corrin. Muy a pesar de algún momento bueno, estamos ante otra villana con motivaciones muy genéricas e irregulares.
“¡Vamos, hostia!” (Logan)
En conclusión.
Acabo esta crítica de Deadpool y Lobezno, la peor de las tres entregas… y eso a pesar de la inagotable aportación de Reynolds y Jackman. No engaña a nadie, pero es la más floja de la trilogía, ya no solo a nivel narrativo sino también a nivel técnico. Parece que, salvo excepciones muy puntuales, el género superheroico ya no alcanza los niveles que tuvo hace apenas cinco años.
Tráiler de Deadpool y Lobezno
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