Minority Report
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“Imagínense un mundo sin crímenes. Hace apenas seis años, en este país, la tasa de homicidios había alcanzado fases de epidemia. Parecía que solo un milagro detendría aquel baño de sangre. Pero en vez de un milagro se nos concedieron tres. Los precogniscientes. En solo un mes con el programa PreCrimen el índice se redujo al 90%. En un año PreCrimen acabó de forma efectivos con los homicidios”. De la mente de Philip K. Dick, el maestro Steven Spielberg presenta a Tom Cruise en ‘Minority Report’.

“El que haya impedido que pasara, no cambia el hecho de que fuera a pasar. Un PreCog no ve lo que uno piensa hacer… solo lo que va hacer” (John Anderton)

Crítica de Minority Report

El éxito de ‘Podemos recordarlo por usted al por mayor’, la adaptación del relato de Philip K. Dick, dio pie a la realización de Desafío total (Paul Verhoeven, 1990)… y además despertó en varios cineastas el interés por seguir explotando los derechos de relatos del autor en años sucesivos. El propio Verhoeven llegó a pensar en la posibilidad de llevar a la gran pantalla ‘El informe de la minoría’. Hablamos de otro relato de Dick que se adaptaría nuevamente con Arnold Schwarzenegger como protagonista. Incluso se llegó a encargar un guión a Ronald Shusset, uno de los autores de la citada ‘Desafío total’. Sin embargo, por unos u otros motivos, la idea acabó por ser almacenada hasta nuevo aviso.

A mediados de los noventa, Jan de Bont se instaló en Hollywood gracias al éxito fulgurante de Speed (1995). De Bont tenía el suficiente poder como para heredar la historia que dejó colgada Verhoeven. Y el caso es que estuvo tanteando llevarla a cabo. Pero los efectos especiales, y el presupuesto desmedido, para hacerla… acabaron por arruinar los sueños del realizador holandés. Y así llegaríamos hasta finales de los 90…

A finales de la mencionada década entró en liza Tom Cruise. La estrella se hizo con los derechos de los esbozos de guión redactados y se los remitió a Steven Spielberg, con quien lleva años buscando un proyecto para trabajar juntos. Spielberg apreció el potencial en la historia remitida, pero pidió readaptarla con nuevas ideas. Así fue como Scott Frank y Jon Cohen acabaron por firmar el script definitivo. Mientras que Jan De Bont conservó, por motivos meramente contractuales, crédito de productor… aunque sin estar involucrado en la producción final.

Para rodar ‘Minority Report’ se aprobó un descomunal prepuesto de más de 100 millones. Estos costes fueron posibles gracias a que Tom Cruise renunció a su caché por un 15% de los beneficios del film. Matt Damon fue contratado para el papel que luego interpretaría Colin Farrell, no sin que antes Javier Bardem lo rechazará por, en sus propias palabras, no verse corriendo detrás de Tom Cruise… Del mismo modo, Lois Smith sustituyó a la inicialmente prevista Meryl Streep, quien no pudo participar por motivos de agenda. La producción tuvo lugar entre marzo y julio de 2001. El film se estrenó en USA el 21 de junio de 2002 logrando una recaudación mundial de 358 millones $. Este éxito dio pie a una serie de televisión que era una continuación de lo visto aquí. La misma no pasó de su primera y única temporada en FOX TV.

Entrando en la película, resaltar que su título hace referencia al informe en minoría que da parte del posible error, o futuro alternativo, que se puede crear en un crimen inminente que es visualizado por los PreCog. A pesar de estar realizada en el siglo XXI, ‘Minority Report’ capta a la perfección esos futuros llenos de futilidad claramente deudores de la década de los ochenta. Una década en la que brillaron tótems del género como la ineludible Blade Runner (Ridley Scott, 1983), “causalmente”, también surgida de la mente de Philip K. Dick.

Spielberg nos entrega un acercamiento a la ciencia ficción que nos devuelve, en parte, a sus obras clave en los inicios de su carrera. Pero lo hace con un mayor conocimiento del medio. Y, sobre todo, mucho más consciente de que, además de ser una obra suya, la película que tiene entre manos debe ser un éxito… Bien se podría decir que, incluso a un director legendario como Spielberg, le puede pesar estar “dirigiendo” una estrella sin paliativos como Tom Cruise. Y esto es algo de lo que el mismo Spielberg siempre se aseguró de huir. El cineasta renegaba de trabajar con estrellas de cine. Aun con todo, la filmación de ‘Minority Report’ es lo suficientemente frenética como para no dar respiro al espectador. Y eso a pesar de la ingente cantidad de pistas y de sub-tramas que presenta. Para compensar, contiene buenas set-pieces e ideas potentes.

Imposible hablar de la cinta sin resaltar una fanfarria a la altura de una producción de primerísima línea. Aquí nos encontramos con la batuta del maestro John Williams. Su banda sonora es incuestionable y adrenalítica. No puedo decir lo mismo de la fotografía a manos de Janusz Kaminski. Este último ilumina de forma saturada la escena en su mayoría. Eso sí, por petición expresa del mismísimo Spielberg.

En cuanto a los personajes están esbozados, globalmente, de forma inteligente. Al menos presentan una bien llevada dualidad. Nadie es cien por cien como muestra en primera instancia. Algo que agradecen los actores. Desde un Tom Cruise volcado en su papel de protagonista con aristas emocionales… a un muy encantado de conocerse Colin Farrell (ojo a su magnífica exposición, ante el siempre notable Max Von Sidow). Por su parte, Samantha Morton es Agatha, la autentica clave de los PreCogs. En realidad, un bebé nacido con una alteración en su cerebro fruto de una madre drogadicta. Presten atención a los ecos a los efectos de las drogas. Ecos que se acercan al mundo propuesto por Frank Miller enRobocop 2 (Irvin Kershner, 1990).

Además hay espacio para encontrar actores que uno no espera, al menos no en estos roles. Me refiero al papel de peso para Patrick Kilpatrick (Knott) como hostigador de Anderton. Y también al rol del lado correcto de la ley de Neil McDonough (Fletcher), otro experto en villanos. Por su cuenta va el eternamente perturbador Peter Stormare como un médico clandestino que perdió su licencia por abusar de sus pacientes. Y menos inquietante resulta Tim Blake Nelson con un rol de impedido encargo de “la biblioteca de confinamiento”. Por último queda el cameo de un aún no iniciado Frank Grillo visto fugazmente en tres planos.

“Tú aún tienes elección. Los otros no vieron su futuro” (Agatha)

En resumidas cuentas.
Concluyo esta crítica de Minority Report, un blockbuster de ciencia ficción en donde Spielberg, aun manteniendo cierto sentido del entretenimiento tan propio de su cine, parece plegarse al homenaje al Hitchcock más conspiranóico. Curiosa en cuanto le pide a su estrella, Tom Cruise, ir más allá del héroe conocido y explotado en sus películas hasta abrazar el rol de antihéroe total.

Tráiler de Minority Report

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