70 Binladens
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“Cuando me llegó el guión lo leí de un tirón. Tiene todo lo que me gusta en una película de este estilo: un atraco, suspense, acción,… Y encima las protagonistas son mujeres, algo difícil de ver, especialmente en este género cinematográfico”. Koldo Serra cuenta con nosotros para atracar la Nort Caja de Santutxu y hacernos con un botín de ‘70 Binladens’.

“¿Binladens, no? Así es cómo llamáis a los billetes de 500” (Raquel)

Crítica de 70 Binladens

El director bilbaíno Koldo Serra regresa a la gran pantalla con esta nueva película. Serra empezó su carrera en los cortometrajes y en 2016 hizo bastante ruido con ‘Gernika’. Ahora cambia el drama histórico por el thriller puro y duro con aires de los años setenta que es ‘70 Binladens’.

La película rinde un claro homenaje a los films de robos y atracos de toda la vida. Especialmente, Serra reconoce dos claras influencias que quedan muy patentes cuando uno ve el film. Me refiero a la míticaTarde de perros (Sidney Lumet, 1975) y ‘La estanquera de Vallecas’ (Eloy de la Iglesia, 1987). De la primera toma buena parte de su desarrollo con los atracadores acorralados y la comunicación telefónica con la policía. Amén de la banda sonora de Fernando Velázquez que es puro y celebrado sonido años 70. Por otro lado, del film de Eloy de la Iglesia toma el aire de desarraigados sociales de los atracadores. Una pareja de violentos desarrapados nada profesionales y con varios antecedentes que no sabes por dónde pueden salir.

Desde que los atracadores entran en la sucursal el ritmo de la cinta te engancha totalmente no dejando ningún tipo de pausa para el aburrimiento. El metraje está repleto de incidencias, giros y sorpresas bastante bien calculadas. Así las cosas, ‘70 Binladens’ se disfruta desde el principio y hasta el final.

La cierta novedad a los homenajes anteriores la introducen los guionistas a través del personaje de Emma Suárez. Su Raquel se convierte en fundamental en toda la trama y en las comunicaciones con la Ertzaintza usando un lenguaje “encriptado”. Me refiero a palabras claves que van ocultas en sus frases y que los agentes de la Ley deberán resolver a modo de puzle. Esto hace el film se vuelva más interesante y te pone en una situación de ventaja frente a los atracadores. Me refiero a que sabes que dentro del banco ella también se la está jugando porque tiene mucho que perder: su hija. En consecuencia, el interés y la tensión se multiplican.

La ambientación es otro elemento a destacar y es que siempre es un placer ver en pantalla nuevas localizaciones patrias. En este caso, la mayor parte del metraje tiene lugar en la curiosísima Plaza Haro en Santutxu (Bilbao). Esta es una plaza tomada en los laterales por infinitas torres de viviendas. Casi parece una especie de fuerte que convierte a la zona en una ratonera con pocas salidas. Nueva prueba de lo poco preparado y planeado del golpe por parte de la violenta pareja de atracadores.

En el campo interpretativo hay tres artistas que rayan a un gran nivel. La primera es Emma Suárez como Raquel, una mujer desesperada por conseguir un crédito para recuperar a su hija. La actuación de Emma está muy controlada en todo momento. A pesar de la extrema situación de su personaje, la actriz nos entrega una mujer que sopesa y calcula bien todas sus opciones. Salvo en contadas ocasiones, su rostro no se altera y mantiene la presión bajo control y sin sobreactuaciones baratas.

Los otros dos intérpretes que destacan son Nathalie Poza y Hugo Silva dando vida a Lola y Jonan. Atención con Nathalie Poza porque hace una recreación fantástica de una auténtica mujer asalvajada, un monstruo al que incluso le falta un ojo. En este caso, la cara sí que es el espejo del alma. Tan dura es Lola que tiene totalmente dominado a su novio, Jonan. Nathalie recrea a una perfecta delincuente barriobajera encarada con el mundo. Ojo a como la define la suboficial Eva: “Una auténtica hija de puta”. No hace falta añadir nada más al gran trabajo de la actriz madrileña. Por su parte, Hugo Silva hace una muy convincente labor como Jonan, el novio de Lola. Hugo da vida a un yonqui desequilibrado con estallidos puntuales de furia que está sometido por completo al poder de Lola. Gran pareja de atracadores la que interpretan estos dos artistas madrileños.

También es justo resaltar tres nombres destacados y con una buena labor. Me refiero a Daniel Pérez Prada, Bárbara Goenaga y Kandido Uranga. Daniel y Bárbara son la pareja de negociadores (Carlos y Eva) de la Ertzaintza que acuden a solventar el conflicto. A resaltar los choques que ambos tendrán con Kandido Uranga que interpreta a Ledesma, un duro agente de la policía autónoma vasca que desconfía de la forma en que llevan el caso Carlos y Eva.

Del resto del elenco decir que no tienen tanta importancia, pero cumplen bien con lo que se les pide: en este caso ser los sufridos rehenes del atraco. Entre ellos citaré a Juan Viadas como el viejo vigilante que no está dispuesto a jugarse la vida por una miseria. Y también mención para Fernando Albizu como el director de la sucursal. Un tipo que cree haber encontrado un chollo en el crédito que va a conceder a Raquel.

“Lo que más cuenta es la ambición del que tienes delante”

En conclusión.
Finalizo esta crítica de 70 Binladens, un film recomendado para los que somos amantes de las viejas películas de atracos. Un tipo de cine que en estos tiempos superheróicos ya casi no se hace a gran nivel comercial. Por suerte, en España hemos tenido la fortuna de contar con buenas propuestas de este estilo en los últimos años. Es el caso de esta misma, ‘Cien años de perdón’ (Daniel Calparsoro, 2016) y ‘Al final del túnel’ (Rodrigo Grande, 2016).

Tráiler de 70 Binladens

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