Stone
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Un agente de la condicional a punto de jubilarse, un preso que quiere conseguir su libertad y una esposa dispuesto a todo para que lo consiga. Robert De Niro, Edward Norton y Milla Jovovich son lo mejor de esta propuesta de John Curran. Es hora de analizar el expediente ‘Stone’ y ver si cumple las condiciones para conseguir la condicional.

“Este es el procedimiento. Vamos a hablar y fingir que somos amigos” (Jack Mabry)

Crítica de Stone

Aquí estamos ante el claro ejemplo de una película que podía haber dado más de sí. Un film que juega con las creencias, moralidad e ideas de los protagonistas trasladando sus dudas y conversiones al propio espectador. Además de esto, ‘Stone’ nos adentra en el día a día del trabajo de los agentes encargados de revisar los expedientes de libertad condicional. Quisiera resaltar que, en la búsqueda de un mayor realismo en la ambientación, algunas secuencias fueron rodadas en una zona cerrada de la cárcel de Jackson en Michigan (EEUU).

Gracias a todo lo anterior vemos como funciona el tema de las concesiones de la libertad condicional. Una cuestión importante en la que se manejan montones de expedientes a revisar, casillas que marcar, preguntas que hacer como si se tuviera interés en las respuestas que se dan,… Una prueba de cómo funciona todo esto es la frase que Jack Mabry le dice a Stone y que he empleado en la introducción: “Este es el procedimiento. Vamos a hablar y fingir que somos amigos”. Creo que no hay mucho más que decir pues esta frase, por sí sola, ya dice muchas cosas acerca de la deshumanización del sistema.

Personalmente pienso que por lo que realmente destaca ‘Stone’ es por ser un film bastante bien interpretado. Tanto Robert De Niro, como Edward Norton y la propia Milla Jovovich hacen un buen trabajo con sus respectivos papeles. Resaltar que esta fue la segunda vez que Norton y De Niro compartieron casting. Anteriormente participaron juntos en ‘Un golpe maestro’ (Frank Oz, 2001).

Empiezo con Robert De Niro que da vida a Jack Mabry. Mabry es un hombre adicto a los sermones religiosos, al golf y a pasar las noches sentado en el porche con su “sometida” y religiosa esposa. Después de conocer a Stone y, sobre todo, tras entrar en contacto con su esposa Lucetta empezará a cuestionarse todas sus creencias, su moral y sus ideas. Estas dudas en un hombre tan «fanático» son otro elemento interesante de la trama. Unas dudas que llevan al personaje a plantearse si realmente está haciendo lo correcto… Respecto a la interpretación decir que De Niro se basta y sobra para llevar a buen puerto su rol.

A continuación tenemos a Edward Norton que interpreta a Stone, un tipo condenado por encubrir el asesinato de sus abuelos. Ahora está en una situación límite: agobiado, nervioso, estresado y creyendo que merece la libertad. Stone no aguanta ni un día más en prisión. Para ello busca ayuda en su propia esposa y en folletos y libros religiosos para tratar de salir… hasta que un día todo cambia.

La interpretación de Norton es buena, muy buena. A Norton le he visto buenas actuaciones, pero esta creo que es de las mejores junto a la que hizo en American History X (Tony Kaye, 1998). Puedo decir, sin temor a equivocarme, que la interpretación de Edward Norton es de largo lo mejor del film (incluyendo su nueva transformación física con pelo trenzado, tatuajes y cierto trabajo físico). Si pueden, véanlo en versión original para comprobar esto que digo.

Y para terminar de hablar del reparto nos encontramos a Milla Jovovich en el papel de Lucetta, una profesora de niños, “amante esposa” de Stone y una absoluta tentación para Jack… La actuación que nos regala Milla está muy alejada de sus registros accioneros que tanto me gustan. Aquí no reparte estopa ni tiros, nada de eso. En este film interpreta a Lucetta de forma apasionada y bastante sorprendente para sus papeles habituales.

Milla bien puede patearle el trasero a cien zombis, hacer de madre aterrada o intentar seducir al mismísimo Robert De Niro y de paso también al espectador. Este último es su rol en esta ocasión: una mujer seductora que hará uso de sus «armas» para intentar influir en Mabry. A destacar que para conseguir entrar en el elenco tuvo que pasar un casting leyendo el guión con Robert De Niro, Edward Norton y el director John Curran.

“A veces Dios utiliza medios misteriosos para hablarnos” (Cura)

En conclusión.
Termino esta crítica de Stone, una película que realiza un cierto y ligero dibujo del sistema penitenciario de Estados Unidos en un marco de drama, dudas y religión. Al margen de esto, insisto en que el punto fuerte es el triángulo de personajes sobre los que se apoya la trama. Unos protagonistas que cometerán acciones que jamás habrían pensado en realizar (al menos algunos de ellos). La pena es que con este trío de artistas la película tendría que haber dado bastante más de sí.

Tráiler de Stone

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