Orgullo + Prejuicio + Zombis
Inglaterra, principios del siglo XIX. El país está sumido en una apocalíptica guerra contra los zombis surgidos del comercio más allá del Atlántico. En estas circunstancias los nobles ingleses intentan seguir con sus “tradiciones”. Entre ellos destacan Mister Bennet y su esposa que quieren ver casadas a sus cinco hijas. Hijas a las que ha entrenado en el arte de matar y en las artes marciales de oriente, siendo las más capacitadas Elizabeth y Jane. Las hermanas pronto conocerán a cuatro apuestos caballeros: Mister Darcy, Mister Bingley, Parson Collins y George Wickman. Pero antes de que las relaciones fructifiquen un gran secreto será revelado. Un secreto que puede cambiar la guerra contra los zombis. (Cineycine).
Nos trasladamos a la Inglaterra del siglo XIX con la hermosa y fiera compañía de Lily James y Bella Heathcote. Ninguna de las dos va a consentir que los zombis hagan caer la isla. Es el momento de evitar que “los podridos” le hinquen el diente al viejo león británico en… ‘Orgullo + Prejuicio + Zombis’.
“El día de los zombis ha llegado. Pronto los tendremos en el Parlamento” (George Wickham)
Crítica de Orgullo + Prejuicio + Zombis
‘Orgullo y prejuicio’ fue una novela publicada en 1813 por la famosísima escritora inglesa Jane Austen. Gracias a su numerosa y cultivada familia, Austen era muy conocedora de las costumbres y cambios de su época, lo que le sirvió para dar contenido a toda su obra. La importancia de la misma logró trascender consiguiendo inspirar miles de libros y, muy posteriormente, seriales de radio, televisión, películas de cine,… No creo que haya nadie que, a día de hoy, no conozca algún libro de Jane Austen.
Ya en nuestra época, autores como Seth Grahame-Smith han “reinterpretado” su obra para “adaptarla a la moda zombi”. Una moda viral que tan fuerte está pegando en nuestros días. Así fue como Smith publicó en 2009 su parodia ‘Orgullo y prejuicio y zombis’, que no era otra cosa que el ‘Orgullo y prejuicio’ de Jane Austen con las hermanas Bennet machacando “podridos”. Del libro pasó a la novela gráfica con los artistas Tony Lee y Cliff Richards. Finalmente, de ahí pasó al cine con esta película. Película con la que esperaba encontrar una buena dosis de bizarra y exótica diversión. Sin embargo, “mi gozo en un pozo”.
Y “mi gozo en un pozo” porque la película se queda entre dos aguas: el romance y los zombis. Al final sale perdiendo la parte zombi y la acción. Esto es así porque no encontré tantísimos zombis como esperaba ni tampoco tantísima acción como la prometida. En ambos casos, estos ingredientes escasean a lo largo de los 107 minutos de metraje. Y, cuando aparecen, lo hacen con resultados desiguales. Los zombis lucen bien con un conseguido maquillaje, siendo de los que corren y además tienen cierta inteligencia que les permite hablar. Tema distinto son las escenas de acción. Las set-pieces no consiguen cuajar y la mayor parte son casi todas nocturnas y con una alarmante falta de sangre (curiosamente, la mejor escena de acción del film es un Vs entre Elizabeth Bennet y Mister Darcy).
En lo referente al apartado cómico-paródico del film, este resulta más bien escaso con apenas tres o cuatro gracias bien tiradas. En este sentido, el personaje que se lleva la palma es Parson Collins con su galantería, frases un tanto ridículas y/o cursis, gusto desmedido por el baile y mal gusto por las armas.
Por otro lado, la parte romántica y de conocimiento de los personajes recibe, “curiosamente”, un mejor tratamiento que “los podridos” y la acción. Ahora bien, todos estos elementos y personajes de la novela de Jane Austen han sido trasladados al “universo zombi”. Esto implica un uso casi continúo, y pesado, de la palabra “zombi”, y el cambio de las referencias originarias por otras más al uso en el tipo de film que es este. Por ejemplo, la conversación sobre el libro ‘El arte de la guerra’ entre Elizabeth Bennet y Mister Darcy.
Comentando la ambientación, vestuario y banda sonora decir que estos apartados están todos ellos muy conseguidos. Así las cosas, no parece que el film haya costado tan sólo 28 millones de $. Por lo menos da una apariencia de unos 50, más o menos. A destacar lo bien que le sientan todos y cada uno de los vestidos a Lily James y a Bella Heathcote. Por supuesto, resaltar las composiciones de nuestro compatriota Fernando Velázquez que le dan un buen e importante aire a la propuesta.
“¡Cuánto esplendor en el aire!”… Mujercitas.
El campo interpretativo es lo que más resalto en esta crítica de Orgullo + Prejuicio + Zombis. Esto es así porque se nota que la mayoría de los intérpretes implicados pusieron todo de su parte en el trabajo de sus personajes, consiguiendo destacar todos.
Empiezo con las cinco hermanas Bennet que están lideradas por Elizabeth y Jane. A la primera le da vida Lily James en un contundente y sorprendente cambio de registro al respecto de su protagonismo en ‘Cenicienta’ (Kenneth Branagh, 2015). Lily nos entrega a una joven firme, dura y totalmente preparada para la acción y el mando. Todo un carácter que se resume en la siguiente frase: “Nunca entregaré mi espada por un anillo”. Su “mano derecha” es Bella Heathcote (Jane) que también lleva a cabo un cambio de rol similar al de Lily James, pasando de la tímida institutriz de ‘Sombras tenebrosas’ (Tim Burton, 2012) a toda una Jane Bennet casi tan preparada como Elizabeth a la hora de liquidar muertos-vivientes. El resto de las hermanas son interpretadas con poca trascendencia por Ellie Bamber, Millie Brady y Suki Waterhouse.
Los protagonistas masculinos también sobresalen, algo raro en este tipo de films en los que se entrega a las féminas casi todo el arte de “dar cera, pulir cera”. Ellos son Sam Riley con su voz cavernosa y vestimenta siempre de negro logrando hacer respetar a su personaje del Coronel Darcy, un experto en detectar y cazar zombis. Su mejor amigo, Mister Bingley, es interpretado acertadamente por Douglas Booth. Y mejor que Booth está Jack Huston dando vida de manera notable al educado teniente George Wickham. También hablar de Matt Smith que es la parte más cómica como Parson Collins.
Terminando, cabe resaltar a Charles Dance y Sally Phillips como los padres de las “criaturas” Bennet. Y, finalmente, pequeña y decepcionante participación para Lena Headey como Lady Catherine de Bourgh. La dura actriz se pasa toda la película sentada y luciendo parche tipo “Princesa de Eboli”. En consecuencia, su presencia es casi testimonial quedando relegada a un papel muy pero que muy secundario.
En conclusión.
Como ya he dejado claro a lo largo del texto de esta reseña, este film se sostiene en pie por el compromiso y la acertada labor de todo el elenco actoral. Amén del conseguido vestuario y ambientación. Más allá de estas cualidades, la película decepciona, sobre todo en aquello que tiene con ver con los zombis, la acción y todo lo que esta lleva aparejada. Finalmente conviene advertir que hay escena post-créditos…
Tráiler de Orgullo + Prejuicio + Zombis
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