Golpe de efecto
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Los buenos aficionados al cine tenemos que tener esta película muy en cuenta. Esta es la penúltima película en la que el mítico Clint Eastwood se volvió a poner delante de las cámaras. Y lo hizo para participar con un papel protagonista que le vino como anillo al dedo. Ha llegado la hora de recorrer las tierras de Carolina en busca de un… ‘Golpe de efecto’.

«Los viejos ojeadores son el alma de este juego».-Gus Lobel.

Golpe de efecto

Crítica de Golpe de efecto

Con esta película Robert Lorenz debutó detrás de las cámaras. Lo hizo después de llevar más de 17 años trabajando al lado de Clint Eastwood en Malpaso. Y Lorenz nos entrega dos películas al precio de una. Por un lado, tenemos una película de béisbol que, en cierta manera, se contrapone a lo visto enMoneyball: Rompiendo las reglas(Bennett Miller, 2011). Y, por otro lado, tenemos una cinta que ahonda en el difícil proceso de aceptar la vejez y en la dificultad de las relaciones padres e hijos en la madurez.

‘Golpe de efecto’ se sitúa en el lado opuesto de «Moneyball» y se contrapone a la misma porque allí el personaje de Jonah Hill (Peter Brand) era un ojeador de “la nueva escuela”. Un tipo de esos que a la hora de fichar jugadores lo basan todo en las comparaciones estadísticas de los datos que tienen en sus ordenadores. Sin embargo, aquí Clint Eastwood se sitúa en la acera de enfrente para dar vida a un ojeador de “la vieja escuela”. Un ojeador o cazatalentos que se ha pasado la vida pateando infinidad de campos de béisbol, viendo jugar a miles de jugadores y que jamás en la vida ha encendido un ordenador. Dos formas de entender y comprender el béisbol totalmente antagónicas. “Los que van con un ordenador no saben una mierda de esto…” (Gus Lobel).

Scott y Clint Eastwood

Por otro lado, tenemos una cinta claramente familiar que profundiza en la vejez y en las relaciones padres e hijos. De esta forma, el viaje de Gus Lobel a las tierras de Carolina, para observar a una joven promesa del béisbol, se convertirá en todo un viaje de descubrimiento y restablecimiento de la relación con su hija. El film ahonda en lo difícil que, en muchos casos, se vuelven las relaciones entre padres e hijos. Especialmente cuando estos últimos ya son hombres y mujeres crecidos, y con una vida propia al margen de unos padres que se niegan a reconocer su vejez y rechazan la ayuda que se les pueda dar. Un viaje que también servirá para poner encima de la mesa las heridas del pasado no cicatrizadas y que algún día tendrán que sanar.

Todo esto es lo que nos propone ‘Golpe de efecto’ y creo que estamos ante una buena propuesta. Esta película es bastante más que un simple film familiar de béisbol. No en vano cuenta con Clint Eastwood como estrella principal. A su lado tenemos a la gran Amy Adams y a un Justin Timberlake en estado de gracia. Ellos tres son el alma de la película.

Clint Eastwood y Amy Adams

“Ya he visto todo lo que tenía que ver. Mi hija lanza mejor…”. Buscando promesas.

Clint Eastwood es Gus Lobel. Gus es del tipo de ojeadores de los que ya casi no quedan. Un viejo cascarrabias y pelín machista, que se niega a envejecer. Un profesional que nunca ha encendido un ordenador y que cree que el verdadero talento se descubre viendo a los jugadores en el campo… y no comparando sus estadísticas en las computadoras.

Después de Gran Torino(Clint Eastwood, 2008), el Maestro Eastwood dijo que, probablemente, ya no volviera a actuar. Sin embargo, aquí volvió a ponerse delante de las cámaras para ayudar a su amigo Robert Lorenz. Sobre su vuelta, Clint comentó: “Es un trabajo estupendo. No sé si actuar me gusta más que dirigir, pero me gusta. Y no está mal, porque cuando estás dirigiendo y actuando al mismo tiempo, tienes mucho más trabajo”. Lo cierto es que es un deleite ver a Clint Eastwood en un papel protagonista como este que le viene como anillo al dedo. Gus Lobel le permite lanzar algunas buenas sentencias, coger de la pechera a algún que otro gallito (atención a la escena del bar) e incluso mostrarnos su lado más sensible (esa visita al cementerio).

Gus Lobel

También está francamente bien en su papel Amy Adams que se ocupa de interpretar a Mickey Lobel. Mickey es la hija de Gus que actualmente triunfa como abogada en un bufete de prestigio de Atlanta.

La verdad que Amy Adams desprende calidad por arrobas en su actuación y se desenvuelve a la perfección. Amy triunfa tanto en las escenas del despacho de abogados, como en los campos de béisbol o en los bares de carretera. Ella es de esas actrices que delante de las cámaras se siente muy cómoda y tranquila. Esas sensaciones las sabe transmitir notablemente al espectador. Muy bien, francamente bien.

Mickey Lobel

Justin Timberlake da vida a Johnny “La Llama” Flanagan. Johnny es un ex_jugador que tuvo mala suerte en el campo. Ahora intenta buscarse la vida como ojeador y comentarista (su gran pasión). Atención porque Timberlake sorprende gratísimamente con esta actuación. Está fenomenal y muestra en pantalla una naturalidad increíble. De veras que quedé altamente satisfecho con él. No le pongo ni un “pero”.

Otros actores que también intervienen en la cinta, pero con un rol menor, son gente tan válida como: el siempre sobresaliente John Goodman (Jefe de ojeadores de los Atlanta Braves y mejor amigo de Gus). Robert Patrick (Presidente del club). Matthew Lillard (principal enemigo de Gus en los Atlanta Braves). Y el veteranísimo, poco reconocido y fallecido en 2013, Ed Lauter.

Johnny

En conclusión.
Finalizo esta crítica de Golpe de efecto. Este es un film que no pasaría de ser una típica propuesta sobre relaciones familiares con el béisbol como telón de fondo. Sin embargo, la presencia de esa leyenda viviente que es Clint Eastwood, y las muy buenas interpretaciones de Amy Adams y Justin Timberlake elevan la película por encima de la media. En consecuencia, termina por sobresalir del resto de cintas de temática parecida.

“Eso es lo que se llama tener problemas con la curva”.-Gus Lobel.

Golpe de efecto

Curiosidades y declaraciones.
-En ‘Golpe de efecto’ podemos ver una escena entre Clint y Scott Eastwood, padre e hijo en la vida real. En sus breves minutos en pantalla Scott (también conocido como Scott Reeves) interpreta a un jugador de béisbol que tiene problemas para dar lo mejor de sí.
Robert Lorenz hizo llegar el guión del film a Eastwood. No sabía cómo reaccionaría. Sin embargo, Eastwood conocía el deseo de dirigir de su socio. Al final contestó positivamente: “Creí que sería la oportunidad perfecta para que Robert rodara una película”.
Justin Timberlake ya había coincidido con Clint Eastwood antes de trabajar juntos. Justin lo conoció por su mutua pasión por el golf. Ambos participaron y se conocieron en un torneo. “Trabajar con Clint es como un sueño”, afirmó con verdadera admiración.

Tráiler de Golpe de efecto

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