Recientemente me sucedió una situación bastante incómoda donde me hicieron un regalo que definitivamente no iba acorde conmigo.
Estuve buscando en Internet y encontré esto que creo que puede servir para futuras ocasiones...
Hacer regalos siempre es una linda acción y para quien lo recibe será un acto muy valioso. Hacer regalos en las fechas que corresponden, tales como cumpleaños, Navidad, Aniversarios, etc. es casi obligatorio.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que, los regalos realizados porque sí sin una fecha específica, tienen un valor agregado, y es el simple hecho de acordarse de la persona en un momento cualquiera. Se le está diciendo a la persona gracias, te quiero mucho, te valoro, eres parte de mi vida todos los días, y no solamente cuando cumples años.
Hacer un regalo cuando un ser querido está enfermo de salud, o está triste, o sentimos que necesita un apoyo y un aliento, dará mucha alegría a esa persona, y hará que nos vea de otra forma. También cuando se está por realizar un cambio importante en la vida, tal como una mudanza o un viaje. Si bien el regalo es algo material, es un representante simbólico del vínculo, con el que se transmite el apoyo y la compañía.
Sorprender es mejor que preguntar "que quieres que te regale?", aunque conlleva la desventaja de tener mayor probabilidad de equivocarse. Aquí te damos algunos consejos para que esta probabilidad sea mucho menor:
Primero que nada, piensa cuánto quieres gastar. Si no tienes dinero para gastar, piensa cómo puedes hacer tú un regalo. Una artesanía con algún objeto que tengas en tu casa es una buena opción.
Luego, piensa en qué le gustaría a esa persona. Muchas veces los regalos que hacemos, los hacemos desde lo que le gusta a uno, y eso es un error. Debes tener en cuenta los gustos y tendencias del regalado y de nadie más.
Recuerda las últimas conversaciones mantenidas con esa persona. Trata de recordar si te dijo que le faltaba algo, o si quería comprarse algo y aun no había podido. Una linda sorpresa sería regalarle algo largamente ansiado por el regalado, como aquel jarrón que una vez vieron en una vitrina.
Si se trata de indumentaria, asegúrate que se pueda cambiar en el caso de que no le llegara a quedar bien. Es en este caso cuando más cuidado tienes que tener en cuanto a los gustos.
Piensa en el futuro próximo de la persona a la que irás a regalar. Si se va de viaje, si va a rendir un examen, si se va a mudar, si va a cambiar de trabajo, si va a tener un hijo.
En cada momento de la vida, existen infinidad de ideas para hacer regalos, y siempre hay uno o dos que son los más adecuados. Depende de ti sorprender y dar justo en el clavo, apelando a tu memoria, creatividad y empatía.
