Thunderbolts*

Yelena Belova trabaja actualmente eliminando pruebas y objetivos para tapar las operaciones más sucias de la CIA en colaboración con el grupo científico conocido como OXE. Pero la directora de la Agencia no está dispuesta a dejar cabos sueltos y decide tender también una trampa mortal a Yelena. Sin embargo, lo que podría haber sido la tumba de la superespía, dará lugar a su inesperada alianza con otros sujetos con poderes. Acaban de nacer los Thunderbolts. (Cineycine).
“Lo divertido de la historia es que estas personas son un misterio unas para otras y tienen incrustado en su ADN no confiar en nadie. Deben justificarse constantemente entre sí para no parecer que se ocultan cosas. Esa falta de confianza revela mucho sobre sus personajes. Deben aprender que confiar los unos en los otros es la mejor manera de ayudar al mundo y, de paso, ayudarse a sí mismos”. Jake Schreier nos presenta a los ‘Thunderbolts*’.
“Sois un equipo de valerosos antihéroes” (Guardián Rojo)
Crítica de Thunderbolts*
Después de ‘Capitán América: Brave New World’ (Julius Onah, 2025), y antes de ‘Los 4 Fantásticos: Primeros pasos’ (Matt Shakman, 2025), nos llega esta nueva propuesta del MCU. Ante nosotros tenemos un film dirigido por Jake Schreier. Hablamos de un realizador que tiene en su filmografía propuestas interesantes como ‘Ciudades de papel’ (2015) y ‘Un amigo para Frank’ (2012). Sin embargo, ‘Thunderbolts*’ se aleja, y mucho, de estos dos films anteriores para plegarse al estilo Marvel-Disney. Y, como reza el refrán: “Para ese viaje no se necesitan alforjas”.
Con lo anterior quiero decir que un cineasta más o menos independiente como Schreier no era necesario para dirigir un film medio del MCU. Y con esto de “film medio” quiero expresar exactamente eso. Es decir, aquí no estamos ante una película del nivel de, por ejemplo, ‘Vengadores: Infinity War’ (Anthony y Joe Russo, 2018). No, para nada. El nivel de los ‘Thunderbolts*’ habría que situarlo a la altura de la ya citada ‘Brave New World’. Y esto nos recuerda, una vez más, que la época dorada de los superhéroes Marvel en la gran pantalla ya pasó. Ahora nos tenemos que contentar, por el momento, con películas que cumplen pero que no ofrecen más. Cintas que podrían estar dirigidas por Jake Schreier o por Alan Smithee. Rescataría de esta media la gran aportación de Sam Raimi y su Doctor Extraño.
Con una filmación en localizaciones tan diferentes como Utah, Nueva York y Kuala Lumpur, la película presenta, salvo excepciones, una fotografía y ambientación oscuras y con tonos tristes. El ejemplo lo tenemos en la primera mitad del film con predominio de escenas poco iluminadas, o el propio clímax en NY que parece rodado en Bulgaria. Se salvan de esta tonalidad las secuencias filmadas en el desierto de Utah. Esta ambientación no es casual y supone un acertado intento de reflejar el estado anímico de dos determinados personajes, sobre todo en los eventos en NY. También es importante resaltar que la película ha sido “retocada” en post-producción eliminando a ciertos “protagonistas”. Esto es muy fácilmente comprobable viendo determinadas escenas de los tráilers y luego comparándolas con la versión cinematográfica.
En cuanto a la acción y set-pieces decir que están bien rodadas… especialmente los combates cuerpo a cuerpo. Me quedaría con todos los sucesos del búnker y con la entrada en acción de Bucky. Respecto al clímax no es nada del otro mundo porque se centra más en lo traumático que en lo físico. Eso sí, el efecto “sombra” realmente llega a sentirse como algo terrorífico ajeno al MCU. Realmente el hecho de recurrir a otro tipo de «confrontación» era el único modo en el que estos improvisados superhéroes podrían intentar hacer frente al “villano” de la función.
El hablar de los superhéroes y del villano me lleva al guión. El libreto es obra de Joanna Calo y Lee Sung Jin adaptando el cómic creado a finales de los años 90 por el guionista Kurt Busiek y el dibujante Mark Bagley. Eso sí, cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. La pareja intenta adoptar su tono divertido e irreverente a los ‘Thunderbolts*’. Pero el grupo no alcanza la diversión y emotividad de los famosos “Guardianes”… y tampoco llega a los niveles de brutalidad, ironía y dramatismo del “Escuadrón suicida”. Las dos, no por casualidad, “creaciones” para Marvel y DC de James Gunn. Así pues, los ‘Thunderbolts*’ se quedan en tierra de nadie y como un producto para todos los públicos con el humor ya reconocido en Marvel. Eso sí, aquí más controlado y medido… y usado, sobre todo, para quitar hierro a situaciones imposibles.
En cuanto al tratamiento del “villano” no voy a ahondar demasiado en él. Y no lo voy a hacer para evitar spoilers. Aunque en algún tráiler que otro ya se ha ocupado el estudio de desvelarlo. En cualquier caso, estamos ante un “villano” por accidente que tiene dudas de cómo enfrentarse a la vida y a su propia existencia. Respecto a poderes y parafernalia comentar que, más o menos, se ha respetado su mitología de los cómics Marvel (teniendo también en cuenta el tipo de film que es este). Y, desde luego, resulta un rival imparable para este inesperado equipo de superhéroes. Tengo hasta mis dudas de que Los Vengadores originales pudieran llegar a detenerlo…
En cuanto al reparto, y al ser los integrantes de “la banda” ya conocidos por su participación en otras películas y/o series del MCU, no hay apenas trabajo de eso que podríamos denominar como “background”. En este sentido, el fondo más intenso se lo lleva Florence Pugh como Yelena. No obstante, a pesar de su trabajo dramático, su personaje brilla más en las set-pieces donde reparte bien. Florence incluso se atrevió a filmar el salto desde la torre de Kuala Lumpur que abre el film. ¡Infinito mérito y valor para ella! A su lado vuelve a estar David Harbour como su padre, el Guardián Rojo. Harbour es una especie de alivio cómico, aunque también sabe llegar al corazón cuando toca. Recomiendo la VO para notar como el actor trabaja el acento ruso.
El resto del equipo lo integran Sebastian Stan (Bucky), Hannah John-Kamen (Fantasma), Wyatt Russell (John Walker), Olga Kurylenko (Supervisora) y Lewis Pullman (Bob). Sobre ellos decir que Stan y Hannah van a trabajo hecho. Por su parte, Kurylenko es desaprovechada de forma total y absolutamente miserable e inmerecida. Y Wyatt Russell está francamente bien en un rol que más de una vez le hace pecar de sobrado. Al igual que sucedía en el caso de David Harbour, su actuación es mucho mejor en VO dándole, en este caso, más categoría a su personaje. Por último queda Lewis Pullman como Bob, un pobre desgraciado que se une al improvisado equipo en la misión suicida del búnker. Lo más importante de Bob es que viene a ser una trascendental metáfora sobre la depresión y sus efectos.
Finalmente, párrafo al margen para Julia Louis-Dreyfus como Valentina Allegra de Fontaine, la jefa de la CIA. Bien puedo decir que ella es la gran “villana” de la película. La actriz brilla recreando con sobrada personalidad a una mujer que se las sabe todas y que no está dispuesta a que, ni judicial ni políticamente, le arrebaten sus plenos poderes. Valentina siempre es capaz de dar la vuelta a una situación que parece perdida para ella y su lema no tiene término medio: “Los hay malos y los hay peores”.
“¿Ninguno podemos volar? ¿Sólo damos puñetazos y pegamos tiros?” (Yelena)
En conclusión.
Finalizo esta crítica de Thunderbolts*, una película que, vista globalmente, podía haber llegado a situarse entre las tops del MCU porque tiene conceptos muy interesantes. Sin embargo, presenta varias ideas ya repetidas amén de ciertas irregularidades en la dirección y edición. Una pena. Aun así, ofrece lo que tiene que ofrecer para ser una producción entretenida, en cierta manera “adulta” y merecedora de ser vista en cines.
AVISO: Hay dos escenas post-créditos una al principio y otra al final. Esta última podría ser considerada un spoiler por lo que aconsejo no verla.
Tráiler de Thunderbolts*
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Quedé bastante sorprendido para bien con la película. Me gustó el tema de los problemas psicológicos/mentales. La química de los personajes. Los personajes de Yelena y Bob.
No me gustó que los personajes fueran los que fueran (pudieron elegir mejores/más interesantes personajes). La historia es casi una copia de la primera Escuadrón Suicida. Una cosa es que en Marvel los personajes no tengan indentidad secreta y otra es que se refieran a ellos como tal; no se diferencia esto de una película cualquiera de acción en lugar de una de superhéroes. Tampoco me gusta que todos los personajes vistan igual.
De hecho, aunque Kurylenko aparezca acreditada, no es ella, es una especialista.
Dicen que sus escdnas fueron eliminadas del montaje.