Líbranos del Mal
El sargento Sarchie, agente del cuerpo de operaciones especiales de la policía de NY, trabaja junto a su compañero en la investigación de unos extraños casos de violencia protagonizados por unos exmarines de los EEUU. Estos marines vivieron hace tres años un siniestro suceso en una cueva de Iraq que, al parecer, les dejó secuelas muy graves. (Cineycine).
Eric Bana regresa como protagonista principal de la mano de Scott Derrickson. El director de ‘El Exorcismo de Emily Rose’ nos lleva de visita por un NY tremendamente oscuro y ominoso. Un lugar dónde es justo y necesario decir aquello de… ‘Líbranos del Mal’.
“¿Ha superado a Dios?” (Padre Mendoza)
Crítica de Líbranos del Mal
Realmente creo que Scott Derrickson es un director que sabe impresionar muy bien con sus terroríficas y bien escogidas imágenes de horror. Lamentablemente no le sucede lo mismo con las ideas. No olvidemos que también es responsable del guión de sus films. Sucede que sus visiones no le quedan tan bien a la hora de plasmarlas en la gran mayoría de sus películas. Y este es el caso de hoy: ‘Líbranos del Mal’, un buen ejemplo de lo que comento.
Derrickson escribe un guión que es una terrible mezcolanza de temas e ideas. Lógicamente terminan todas atropellándose entre sí. En la película encontramos temáticas tales como: el cine policíaco, las historias personales que parecen encajadas, los dones paranormales, las posesiones, el Bien y el Mal, los demonios, los exorcismos e incluso las referencias musicales. ¡Demasiado! Derrickson las junta todas, las mete en una “batidora” y el resultado no es óptimo porque no puede serlo.
‘Líbranos del Mal’ pretende ser una especie de policíaco de horror sobrenatural. Sin embargo, al final no consigue brillar en ninguno de los dos géneros. No obstante, es cierto que la parte sobrenatural tiene momentos realmente destacados. De esta forma, la película se configura o estructura claramente en dos partes: la primera viene a ser la parte policíaca con Sarchie (Eric Bana) investigando junto a su compañero (Joel McHale) los casos violentos que relacionan a los marines de la sinopsis y reuniendo pistas. La segunda es la parte del horror sobrenatural. Digamos que es una consecuencia de las investigaciones de la primera.
En ese referido «segundo acto» es cuando entra de lleno el padre franciscano interpretado por Edgar Ramírez. Claramente estamos ante el tramo del film más disfrutable para los que somos aficionados al cine de género. Aquí presenciaremos tremendas escenas con un exorcismo incluido (“típico” exorcismo, pero espectacular y espeluznante). Desgraciadamente, para cuando se ha llegado a esto ya es demasiado tarde y el film se ha extendido en un metraje que resulta a todas luces de excesiva duración.
Un aspecto positivo que tengo que recalcar es la atmósfera de la película. Derrickson “retrata” un NY oscuro y tenebroso como un servidor no había visto antes en pantalla. La mayor parte de la cinta transcurre por las noches. Además, los sitios que visitan los personajes son todavía más oscuros, siniestros y repletos de insectos repulsivos como las cucarachas. Por si esto fuera poco, la lluvia es también un elemento desasosegador y casi constante en el film.
Por otro lado, las imágenes de horror cuando aparecen son “disfrutables”. En este sentido, atención al aspecto de un gato que ven los detectives, al estado en el que queda el cuerpo de una mujer o al ya referido exorcismo. La banda sonora es obra de Christopher Young (ya colaboró con Scott Derrickson anteriormente en films como ‘Sinister’) y creo que cumple con una música que en determinados pasajes se vuelve realmente tenebrosa. Por supuesto, incorpora también algunos sobresaltos (escasos, todo sea dicho) para el espectador más fan del «jumpscare».
Los intérpretes están todos ellos bastante correctos. Los principales son un recuperado (para la gran pantalla) Eric Bana que solventa sin mayores problemas y con gran tino su papel de sargento Sarchie. Incluso hoy en día que vive en el ostracismo, Bana sigue siendo un buen actor. Menos destaca Édgar Ramirez como el padre Mendoza, un cura bastante moderno. El menor brillo de Ramirez se debe, en parte, porque su personaje no pasa a ser importante más que en la “segunda parte del film”. Algo parecido pasa con Joel McHale que empieza muy fuerte como Butler, el compañero de Sarchie, para luego casi desaparecer cuando este se une con el padre Mendoza. Finalmente, las actrices Olivia Munn y la pequeña Lulu Wilson hacen de esposa e hija del personaje de Eric Bana. Ambas cumplen bien con sus roles, pero sin ofrecer mucho más.
“La venganza siempre destruye al vengador” (Padre Mendoza)
En conclusión.
Termino esta crítica de Líbranos del Mal, un film que repite parte del patrón de ‘Sinister’. Me refiero a que dedica excesivo tiempo a la investigación y poco al terror/horror prometido, sobre todo en los teasers y trailers. Así pues, Derrickson ha vuelto a repetir errores. Realmente da pena que, viendo la fuerza con la que Derrickson se desempeña en según qué escenas, no se termine de decidir por rodar un film de terror u horror puro y duro ahora que es más conocido que cuando estaba empezando dirigiendo ‘Hellraiser 5: Inferno’. Si sigue mostrando esta indefinición, terminará por pasar como un director con buenas intenciones… pero al que le falla el toque final.
Tráiler de Líbranos del Mal
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