El hombre del saco
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La criatura del horror que presentamos hoy está basada en hechos reales y, de una u otra forma, está presente en la mayoría de las culturas. Su mitología nos habla de un ser que se lleva a los niños cuando estos no están bajo la protección de sus padres. Esta siniestra figura se conoce con el apodo de ‘El hombre del saco’.

“Tu madre quiere que te diga que él no existe… pero me temo que no puedo”

Crítica de El hombre del saco

Para empezar me veo en la obligación de realizar un aviso. No confundan esta cinta con la española de título homónimo estrenada el año pasado y disponible actualmente en Prime Video. Aquella cinta, distribuida por filmax, estaba protagonizada por un grupo de chavales en busca de resolver una serie de misteriosas desapariciones. Su ambientación era rural con chiquillos en bicicletas salvando el día. En cambio, la película que hoy nos ocupa transcurre por otros derroteros…

Expuesto lo anterior, vamos con esta película dirigida por Colm McCarthy. Estamos ante un director inglés conocido por haber dirigido ciertos capítulos de importantes series de televisión. A nivel cinematográfico destacó en 2016 con ‘Melanie: La chica con todos los dones’. Y ahora regresa a cines con ‘El hombre del saco’. Estamos ante una nueva producción de cine de género que, basándose en tan siniestro mito, crea una nueva figura para la galería del horror del séptimo arte.

A raíz de lo expuesto, y los que ya tenemos una cierta edad, conocimos desde bien pequeños este siniestro mito de “El hombre del saco”. ¿Quién no fue “amenazado” y/o “atemorizado” en su infancia con este terrorífico personaje por algún conocido o familiar? Ante los malos comportamientos, los lloros interminables, la negativa a dormir, o el hablar con extraños… siempre pululaba por el ambiente la referencia a tan tétrico individuo. Un ser de las sombras que, supuestamente, se presentaría ante nosotros y nos llevaría con él metidos en su saco. Así fue como “El hombre del saco” se convirtió en el primer monstruo que los niños de mi generación conocimos y temimos. Y su terrorífica mitología no sólo arraigó en España, sino también fuera de nuestras fronteras. Tal y como dicen en el film: “Su leyenda está presente en todas las culturas”.

John Hulme es el guionista debutante que se ocupa de trasladar la mitología de tan perturbadora criatura al guión cinematográfico. Bien puedo decir que su libreto respeta los elementos más básicos de tan siniestra figura, pero no va más allá. Por supuesto, el guión también hace referencia o añade los “tótems” de protección y cómo “cargarlos de poder”. No es un mal libreto este de Hulme, pero la pena es que la dirección se siente repetitiva y que si eres fan del género te vas a dar cuenta muy pronto de las verdaderas intenciones del “monstruo”.

Y la referencia a la dirección me lleva a comentar el trabajo de Colm McCarthy que innova poco o nada. Con esto último quiero decir que sus aportaciones para el cine de terror son nulas. Al igual que sucediera en la reciente Juega o muere (Ari Costa y Eren Celeboglu, 2023), todos los elementos terroríficos que emplea McCarthy se sienten gastados y/o caducados. Y voy más allá… resulta hasta cansino y/o aburrido la manía en la que repite algunos de ellos durante todo el metraje. Me refiero, por ejemplo, al apagado y encendido de luces. Usar este efecto un par de veces es algo aceptable… repetirlo hasta la saciedad termina por hacerlo aburrido. Y, precisamente, la película avanza de manera cansina en sus 92 minutos con el constante acoso de la figura perturbadora al hijito de los McKee.

Dónde sí destaca el trabajo de McCarthy es en el prólogo y el clímax que resultan satisfactorios. También podemos considerar positivos los breves flashbacks al pasado de Patrick McKee. En los mismos, y con un aire cercano a It (Andrés Muschietti, 2017), se nos introducirá en la siniestra leyenda de “El hombre del saco”. Respecto a este último, no lo veremos físicamente con detalle hasta el tramo final. Previamente sólo notaremos su presencia entre la oscuridad y con alguna breve aparición puntual. Eso sí, resulta escalofriante escuchar el sonido de la cremallera de su “saco” al abrirse.

En el reparto la cara más conocida, y la que lidera todo el asunto, es la de Sam Claflin. Tras su paso por la saga de ‘Los juegos del hambre’, el actor inglés se está componiendo una filmografía muy variada y repleta de altos y bajos. Así pues, lo que nadie le puede negar es su esfuerzo por no encasillarse. En ‘El hombre del saco’ realiza un buen papel como Patrick, el padre atemorizado. Lo mejor que puedo decir de Sam es que, pese a su fortaleza física, logra que nos lo creamos en este tipo de rol y sintamos su preocupación y terror por la peligrosa situación que atraviesa su infante, y su agobio por no poder pagar las facturas familiares.

Sufriendo el acoso paranormal junto a él tenemos a Antonia Thomas y al jovencito Caréll Vincent Rhoden. La primera es Karina, la esposa de Patrick, y el segundo es el hijo de muy corta edad del matrimonio. Ambos cumplen como la esposa preocupada y asustada… y el pequeño que no se entera de nada. En realidad, el papel de Caréll es tremendamente sencillo y no destaca por nada. Como aporte curioso resaltar que este film supone su debut en cines.

El resto son todo secundarios que van entrando y saliendo. Entre ellos está William Hope que no se cansa de poner cara de preocupación interpretando al Sheriff Isaacs. También aparece Steven Cree como Liam, el hermano mayor que trabaja con Patrick en el aserradero familiar. Y, por último, Will Davis es el especialista que se mete bajo el siniestro disfraz y prótesis de Bagman. Un disfraz bastante “creepy” todo sea dicho.

“El amor de un niño es algo mágico. Tenla cerca de tu corazón y siempre te protegerá” (Billie)

En conclusión.
Acabo esta crítica de El hombre del saco, una película que tiene como punto de partida una mitología tremendamente atractiva para el horror… pero a la que no logra sacar ni la mitad de su jugo. Es una pena haber desaprovechado esta oportunidad con un film muy simple que no consigue entrar en las grandes ligas del cine de género.

Tráiler de El hombre del saco

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