Abro este post con la intención de ir repasando un poco la filmografía de este autor con mayúsculas, desde las películas que ha dirigido como The Spanish Prisoner (La trama) como las que ha escrito (Ronin), además de mencionar esa fantástica serie creada junto con Shawn Ryan (The Shield) llamada The Unit.
Empezaré por la última que he visto Red Belt (Cinturón Rojo). A mi las artes marciales siempre me han llamado la atención por su vistosidad plástica y toda la filosofía que existe detrás de estas disciplinas orientales. Yo de pequeño llegué a practicar Judo hasta más o menos los 12 años, en la actualidad aunque en mi gimnasio hay clases de Kárate no he dispuesto del tiempo necesario para lanzarme a ello, pero sigue despertando mi interés. Parece que también a Mamet, porque Red Belt es fundamentalmente una película sobre las artas marciales. No confundir con una película de acción en la que hay artes marciales. Debemos tener esto presente.
No estamos pues ante una película que pretenda o que busque la espectacularidad, todo lo contrario, se trata de una historia intimista, centrada en unos personajes corrientes con una vida rutinaria. Entonces aquí las artes marciales se presentan como unas normas de conducta moral, un manual que permite enfrentar los distintos avatares de la vida y que enseña que siempre existe una salida independientemente de los compleja y dolorosa que sea la situación en la que uno se encuentra. Con esa metáfora de fondo, Mamet construye una historia de engaños y corrupción (algo que siempre ha tratado muy bien), en la que el protagonista deberá enfrentarse utilizando su mejor arma, sus principios.
Chiwetel Ejiofor (American Gangster) interpreta con destreza a ese maestro de Kárate incorruptible, siempre más preocupado del prójimo que de sus facturas, casado con una mujer (Alice Braga) que ambiciona de la vida más de lo que tiene. Luego destacar el papel de Joe Mantegna (un actor recurrente en la filmografía de Mamet) como oscuro conspirador e insaciable hombre de negocios; o Max Martini (Gerhardt en The Unit) haciendo de policia metido en un problema por actuar de acuerdo a su conciencia. También me gustó mucho el personaje de Emily Mortimer, muy enigmático en su entreda en escena y que desencadena el problema en el que se acaba encontrando el protagonista. Incluso Tim Allen, alejado de sus papeles más humorísticos, hace acto de presencia interpretando a una vieja estrella del cine de acción.
Red Belt es una magnífica película, altamente recomendable para aficionados y no aficionados a las artes marciales, con un buen guión (con esos giros tan característicos de Mamet), buenas interpretaciones, entretenida y sobretodo económica con el tiempo, y es que hay que agradecer que no se alargue la historia más allá de lo que pretende contar, algo de lo que podrían tomar nota otros directores.