The Fury of Firestorm: Takeover
Ronnie y Jason han decidido dejar de actuar por separado y fusionarse para ser uno: Firestorm. De esta manera los poderes que tenían por separado (Ronnie el fuego nuclear y Jason la transmutación) ahora los dos los poseen. A lo largo de estos cómics será cuando se sientan cómodos en su papel de superhéroe y se enfrenten a varios villanos típicos de los héroes. (Cineycine).
Comentario de The Fury of Firestorm: Takeover.
Finalmente “Los Hombres Nucleares” pasan a ser “El Hombre Nuclear”. De ahora en adelante Ronnie y Jason se fusionan para ser el definitivo superhéroe Firestorm. Estas últimas aventuras que vivirán en solitario serán las mejores de todas pudiendo disfrutarlas en The Fury of Firestorm: Takeover.
Valoración.
De verdad es una lástima que tardasen tanto en hacer de Firestorm lo que siempre fue. Este tomo demostró que nunca debieron separarlos. Es el mejor tomo de los tres que recopilan su serie con diferencia. Al menos el personaje pasó a ser (por un breve tiempo) miembro de la ‘Liga de la Justicia’ y actualmente lo vemos en acción real en la serie de TV ‘The Flash’ y en un futuro próximo en otra nueva serie llamada DC´s ‘Legends of Tomorrow’.
En el tomo “God Particle” nos encontramos con un cómic con un clarísimo problema de identidad y sin rumbo. En el tomo “Firestorm Protocols” tuvimos una historia llena de acción y donde la esencia del héroe se perdió al diluirse cuando se repartió por diferentes países la capacidad de poder crear uno; dejando de ser único e irrepetible. Finalmente, cuando llegamos a “Takeover” es cuando descubrimos quién es realmente Firestorm, lo que lo hace único y las situaciones/aventuras que demostraban por qué merecía su propio título.
Mucho y largo se ha hablado de la «oscuridad»/»seriedad» del universo DC; particularmente en las películas de acción real. Y yo, que leí esporádicamente algunos de sus cómics antes del reinicio (New 52) y en la actualidad que sigo unas siete series puedo dar fe de que este universo es así. No es algo forzado o que esté de moda por parte DC Comics. Ahora bien, siempre hay algún personaje que otro que tiene un contenido o personalidad más ligeros: Flash, Green Lantern/Hal Jordan y Firestorm se encuentran entre ellos. Algo que, no solamente había leído entre las críticas negativas a este cómic, sino que se notaba puesto que al leer lo que vino antes uno como lector no se sentía del todo a gusto y al encontrarse con esta última entrega con sus «cambios» (que en realidad es presentar a Firestorm como siempre fue) te das cuenta que le sienta como un guante y es como debió ser.
¿Por qué Firestorm en esta versión (ya que diferentes «personas» pueden serlo) es tan divertido? No hay que ser genio para descubrir los motivos: por un lado, se compone de dos chicos adolescentes (entre 15 a 17 años) así pues es normal que su entorno y situaciones sean de lo más comunes, en ese sentido es como Shazam donde tenemos a un niño que se convierte en adulto y como superhéroe se refleja esa inmadurez. Y, por el otro lado, porque disfrutan teniendo estos poderes (exactamente igual que Flash), Ronnie lo dice abiertamente pero se nota que a Jason también le gusta. En consecuencia, al meter al Hombre Nuclear en conflictos de terrorismo, muertes, racismo y un pesado contenido científico como pasó en números anteriores fue cuando peor resultó todo.
Aquí tenemos a Ronnie Raymond y Jason Rusch lidiando con el tema de cómo compaginar sus obligaciones de ser superhéroe con sus vidas de estudiantes en el instituto (siendo responsables y encargándose de sus deberes) hasta con establecer relaciones de amistad y ser hijos. Así pues, resulta muy ameno el ver cómo Firestorm lucha «contra las fuerzas del mal» hablando sobre las asignaciones pendientes… y por otra parte la madre de Ronnie y el padre de Jason haciendo lo que pueden para dar la cara por ellos frente a los profesores y también aprender ellos mismos a vivir con un superhéroe. Realmente es lo mejor que nos podía ofrecer este personaje.
El cómic terminó pero lo hizo por todo lo alto. Firestorm llegó a interactuar en estos números con varios personajes importantes. Desde los Teen Titans hasta el mismo Supeman decidieron aparecer por estos lares; muy importante “El Hombre de Acero” ya que explica cómo es que “El Hombre Nuclear” terminó uniéndose a la Liga de la Justicia. Además, también Killer Frost llegó a hacer de las suyas, y siendo una villana actualmente muy popular (aparece en el videojuego ‘Injustice: Gods Among Us’ y su contraparte la dra. Caitlin Frost es personaje recurrente en la actual serie ‘The Flash’) es importante saber que pertenece a la galería de villanos de Firestorm (casi llegando a ser si no lo es ya su principal enemiga).
Y, aunque Killer Frost llegó a aparecer, el hecho de que lo hiciera llegados al final y tuviera que compartir con otros villanos se convierte en algo más de agradecer que de celebrar propiamente. En cambio, de quien sí merece la pena hablar es del Capitán Átomo (también proveniente de una serie cancelada). No solamente porque hiciera acto de presencia sino porque su impacto fue más considerable. Además, resulta muy curioso el incluirlo, no se trata de un personaje de DC más. Se trata de uno de los seres más importantes en este universo y sus poderes nucleares lo emparejan en cierto modo a Firestorm. Así que fue una brillante idea su incursión y se sintió cada momento en el que se encontraba.
Por último decir que a diferencia de los tomos anteriores donde leerlos resultaba en una experiencia incómoda por partes (ya fuera porque trataba con contenido fuerte o porque se hacía pesada la carga científica) este resultó en todo lo contrario. Es un cómic muy ameno que hace que disfrutes con cada viñeta, cada página, cada enfrentamiento… Tanto así que pronto te das cuenta que has llegado al final y que ese final apareció muy pronto.
Conclusión.
Realmente resulta muy lamentable que este cómic se cancelara. En esta ocasión, sin embargo, es imposible no culpar a nadie más que al cómic en sí (o claramente su equipo creativo y la cantidad de cambios que tuvo) por haber tomado tan pésimas decisiones en lugar de respetar lo que el personaje siempre fue ya que de haber ofrecido lo que tenemos en The Fury of Firestorm: Takeover seguro que habría sido un éxito. Firestorm es único en todo el universo DC y es penoso que por esto mismo a este superhéroe no se le dé la oportunidad de ser conocido más ampliamente o explorarse como debiera. Sin embargo, podemos celebrar el hecho de tenerlo en acción real (algo que jamás en la vida pensé que pasaría) en la serie ‘The Flash’ (2014) y próximamente como uno de los protagonistas en ‘DC´s Legends of Tomorrow’ siendo esta versión la fusión entre Ronnie Raymond y el dr. Martin Stein.
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