Kitty Pryde y Lobezno
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Comentario de Kitty Pryde y Lobezno.

Siempre hemos pensado que Lobezno es un tipo muy duro al que no había rival que pudiera achantarlo. También cuando antes pensábamos en Kitty Pryde venía a nuestra mente la imagen de una jovencita adolescente bastante indefensa. Estas dos ideas acerca de estos dos famosos mutantes van a cambiar cuando en su vida se cruce un misterioso individuo llamado Ogùn. Es tiempo de que Kitty y Lobezno hagan equipo en… Kitty Pryde y Lobezno.

“Hay una parte de mí que pocos ven y viven para contarlo. Una parte que no controlo, que está rabiosa. No piensa. Ni siente dolor. Mata” (Lobezno)

Resumen.
A continuación os dejo con una breve sinopsis-resumen de los cómics que componen ‘Kitty Pryde y Lobezno’.

Capítulo 1: Mentiras. (Kitty Pryde and Wolverine nº1 USA).
Acosado por las deudas, Carmen Pryde (el padre de Kitty), se ve obligado a firmar una operación financiera ilegal con unos miembros de la Yakuza viajando a Tokyo para concretarla. Enterada de esto, la adolescente Kitty tomará la arriesgada decisión de viajar a Tokyo de incógnito para ayudar a su padre.

“¿Quiénes son estos tipos? ¿En qué me he metido?”.-Kitty Pryde.

Capítulo 2: Terror (Kitty Pryde and Wolverine nº2 USA).
Kitty cae en las garras del terrible Maestro Ninja llamado Ogùn que la transforma en una fría asesina. Al mismo tiempo, Lobezno, enterado del viaje a Tokyo de Kitty se presenta en la capital con la intención de encontrarla.

“Soy la peor persona para tener como enemigo”.-Lobezno.

Capítulo 3: Muerte (Kitty Pryde and Wolverine nº3 USA).
Ya en Tokyo, Lobezno hace equipo con Yukio para tratar de seguir el rastro y encontrar a Kitty.

“Soy el mejor en lo que hago. Pero lo que hago no es agradable”.-Lobezno.

Capítulo 4: Renacer (Kitty Pryde and Wolverine nº4 USA).
Tras encontrar y enfrentarse a Kitty, Lobezno la entrena física y mentalmente para tratar de borrar de su psique la maligna influencia de Ogùn.

“Tú eliges, nena. Vive o muere, lucha o ríndete”.-Lobezno.

Capítulo 5: Valor (Kitty Pryde and Wolverine nº5 USA).
Kitty deja el abrigo de Lobezno, adopta el nombre de “Gata Sombra” y se dirige a enfrentarse al temible Ogùn. Desgraciadamente, el misterioso Ninja es demasiado poderoso para ella.

“Puedes vencerme… ¡Pero no rendirme!”.-Kitty Pryde.

Capítulo 6: Honor (Kitty Pryde and Wolverine nº6 USA).
Lobezno detiene la dramática lucha entre Kitty y Ogùn para poner a salvo a su amiga adolescente y ser él quién se enfrente directamente al Ninja… haciendo frente así a todos sus demonios y a los de Kitty.

“Soy el mejor en mi oficio. Pero, esta noche, no es suficiente”.-Lobezno.

Valoración.
‘Kitty Pryde y Lobezno’ supuso si no me equivoco la segunda serie limitada dedicada al mutante más famoso de la Marvel, Lobezno. Sin embargo, en esta ocasión, Logan compartiría protagonismo con la jovencita Kitty Pryde, formando con ella un peculiar equipo en el país del sol naciente en una peligrosa aventura.

Una aventura que, por un lado, nos muestra la evolución de Kitty, pasando de ser una adolescente temerosa, alocada e irresponsable a convertirse en una terrible asesina Ninja (¡ojo! con el número 2 en el que podemos ver con todo detalle de guión y dibujo como sucede esto); y por otro lado, tenemos a un Logan que se verá obligado a adoptar dos papeles: el papel de Maestro marcial de Kitty para que la joven logre superar la influencia de Ogùn y el miedo que su recuerdo le provoca (¡atención! en este sentido al número 4 porque es puro caviar), y el papel de bestia salvaje para poder equilibrar la balanza en el enfrentamiento con el maligno Ogùn.

De este guión se ocupó el conocido como “Patriarca de los Mutantes”, es decir, Chris Claremont, un hombre que llevó a los “hombres X” a sus más altas cotas de popularidad nunca superadas. Claremont era un maestro, así de claro, y si alguien tiene alguna duda de esto, basta con que lea la primera página de esta miniserie. En la misma, y con una maestría sin igual, repasa los antecedentes de Kitty y pone al lector/a en disposición absoluta de saborear todo lo que esta nueva aventura nos ofrece… ¡palabras mayores! que tienen su máxima expresión y culminación en el número 4 al que antes me he referido. ¡Sensacional!

Con este “libreto”, Claremont explora varios temas: los miedos personales, el mítico mundo de los Ninjas, la relación Maestro-alumna o la superación de las barreras que creemos insalvables. Un gran trabajo de Claremont que nos entrega una lectura difícil de olvidar que resulta apasionante, absorbente y repleta de grandes momentos y frases… todo ello con la cultura japonesa y el misterioso mundo de los ninjas como telón de fondo.

A los lápices tenemos a un dibujante todoterreno como Allen Milgrom (color de Glynis Wein). Un artista “discutido y discutible”, pero un artista que no puede faltar en cualquier empresa de cómics que se precie dado su carácter de comodín (dibujante, colorista, entintador…). Me he referido a él como “discutido y discutible” porque sus dibujos no son siempre “perfectos” y desde luego no gustan a todos.

Particularmente no me desagrada su arte, es más, casi podría decir que es de los que me gusta (sobre todo a la hora de “dibujar la acción”)… Ahora bien, eso no me impide reconocer su irregularidad, prueba de ello son los dibujos del primer número de esta miniserie, allí combina buenas viñetas con otras bastante regulares. Con el paso de los capítulos sus lápices van mejorando, pudiendo encontrar buenas viñetas de acción en los capítulos siguientes, viñetas llevadas a cabo con una gran agilidad a la hora de plasmar los dibujos en movimiento y los efectos devastadores de las peleas (especialmente en los capítulos 4, 5 y 6). Esta miniserie fue uno de sus mejores trabajos, no me cabe la menor duda.

Conclusión.
Recuerdo lo mucho que de pequeño me gustó esta miniserie cuando la leí por primera vez, algunos de sus diálogos y dibujos se me quedaron grabados a fuego y no los pude olvidar jamás. Esto sólo pasa con las Obras Maestras, y habiendo rescatado la lectura de ‘Kitty Pryde y Lobezno’ para realizar este artículo, tengo que decir claramente que la misma ha envejecido estupendamente, y que me ha alegrado recordar y rememorar las mismas excelentes sensaciones que me produjo cuando era un chaval. ¡Grandes Claremont y Milgron! ¡Gracias, Maestros!

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