Chernóbil. La zona
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Comentario de Chernóbil. La zona

El ser humano está arruinando el planeta. Pero no solo arruina el planeta sino a sus semejantes, arruina sus vidas. Lo que ocurrió en Chernóbil fue una muestra de que no estamos preparados para muchas cosas. A lo largo de tres generaciones veremos en esta estupenda novela gráfica como un desastre así te arruina la vida en un momento. Pero también veremos que la convicción del ser humano hacen de él algo único y que en muchas ocasiones se puede volver a levantar tras la caída. Bienvenidos a Chernóbil. La zona.

«…. nadie nos advirtió del peligro que corríamos».

Argumento.
El 26 de Abril de 1986 ocurrió uno de los mayores desastres medioambientales de la historia de la humanidad en Chernóbil, Ucrania. Todo empezó como un simulacro de los operarios de la planta nuclear, que querían ver durante cuanto tiempo seguiría suministrando energía eléctrica la turbina de vapor tras la pérdida de suministro de energía eléctrica principal del reactor. Lo que pasó es que para poder hacer dicha prueba se necesitaba pasar por alto decenas de protocolos del Reglamento de Seguridad Nuclear de la Unión Soviética. Ello llevó a que se produjera el sobrecalentamiento del núcleo del cuarto reactor nuclear, lo que terminó provocando la explosión del hidrógeno acumulado en su interior liberando material radiactivo al exterior. Se calcula que fue 500 veces mayor que el liberado por la bomba atómica arrojada en Hiroshima en 1945. Causó directamente la muerte de 31 personas y forzó al gobierno de la Unión Soviética a la evacuación de 116.000 personas provocando una alarma internacional al detectarse radiactividad en, al menos, 13 países Europeos.

En este novela gráfica seremos testigos de tres generaciones de Ucranianos, de como se vieron sus vidas afectadas por el desastre de la central nuclear y de cómo el enemigo esta vez no era su semejante sino uno invisible con el que no estaban acostumbrados a luchar. Esta familia es ficticia, nunca existió como tal, pero puede ser la representación de cualquiera de los miles de hombres y mujeres que tuvieron la desgracia de pasar por esa experiencia, de la cual uno nunca se recupera, ni física ni mentalmente.

Valoración.
Coincidiendo con el 25º aniversario de la catástrofe, el pasado año vio la luz esta maravillosa novela gráfica que ha intentado retratar una familia cualquiera, como perdió todo lo que tenía, como tuvo que abandonar de un día para otro todas sus pertenencias con la premisa de que regresarían en breve y nunca más pudieron volver.

La verdad es que es un tema peliagudo y podía parecer hecho para aprovecharse del aniversario y vender a su costa pero lo que realmente hace es adentrarnos tanto a lo que los personajes y la catástrofe fue, huyendo de comercialismos oportunistas, que realmente se puede considerar una obra que retrata con mucho cariño hacia los afectados y se centra en el ser humano y sus sentimientos en vez de centrarse en la pirotécnia que hay detrás de todo.

Aun coincidiendo con el 25º aniversario de la catástrofe, la verdad es que la obra no ha tenido intención en coincidir con ello, ha sido casualidad. Todo empezó sobre Septiembre del 2006 cuando el guionista, Francisco Sanchez, acudió al CCCB de Barcelona (Centro de Cultura Contemporanea de Barcelona) a ver una exposición del 20º aniversario de la catástrofe. Todo le impactó tanto que enseguida se sintió interesado y atraído por lo que sucedió ese fatídico Abril del 86. Le llamaba poderosamente la atención el hecho de que una ciudad como Pripiat (donde se alojaban todos los trabajadores (y familias) del reactor de Chernobil) había sido tan próspera, albergando a 47.000 habitantes y de la noche a la mañana se convirtió en una ciudad fantasma. Esa nieve sobre ese paisaje tan frio y desolado, todo transmite un sentimiento de melancolía terrible. Por todo ello, empezó a juntar información sobre el tema y en Abril del 2009 viajó a Kiev en busca de agencia turística que hiciera el recorrido hacia Pripiat, para ver y documentarse de primera mano sobre todo lo que allí existe y en su día existió. Ese es el inicio de esta fabulosa obra.

El siguiente paso ya fue buscar un dibujante que fuera capaz de captar lo que la historia requería, y esa fue Natacha Bustos. Natacha es hija de padre Chileno y madre Brasileña pero su infancia y adolescencia la ha pasado en Málaga, donde ha sido licenciada en Bellas Artes  por la Universidad de Granada. Posiblemente muchos dibujantes podrían haber llevado a cabo los dibujos de esta obra pero solo Natacha ha sabido captar lo que las circunstancias requieren. Ello da como resultado un dibujo fabuloso, en blanco y negro, para transmitir la melancolía y la forma de vida que se podía tener en un pueblecito de Ucrania en la década de los 80.

Como hemos dicho, el dibujo es en blanco y negro y la primera mitad del libro transcurre casi en silencio. Un silencio sepulcral del que el lector se hará aliado al contemplar la pobreza y desgracia que la explosión provocó. La historia no está narrada de manera cronológica sino que da saltos arriba y abajo. Empieza años después de la catástrofe, cuando una familia regresa a su casa en las afueras de Pripiat y a partir de ahí la maquinaria se pondrá en marcha para narrarnos la historia de esta familia a lo largo de tres generaciones. La historia acabará en el 20º aniversario de la catástrofe cuando… bueno, tenéis que leerlo, y sentirlo vosotros mismos.

Poco se le puede reprochar a esta magnífica obra que no debe faltar en ninguna estantería de cualquier amante del 9º arte. Por cierto, la edición viene con varios extras finales como un mapa de las actuales centrales nucleares en activo de todo el mundo, elaboración de las viñetas, diario de trabajo, curiosidades y unas cuantas fotos reales de la zona. Todo un lujazo.

Conclusiones.
No podemos más que recomendar esta fabulosa novela que muestra la cara más humana del mayor desastre contra el ser humano y contra la naturaleza que ha existido hasta el momento. A veces no somos conscientes de lo que nos rodea y tendemos a olvidar a las víctimas de los desastres pasados los años. Chernóbil – La Zona, es una maravillosa historia acerca de todo esto y mucho más, la cual hará que veamos el lado humano tras la catástrofe.

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