Un regalo para ella
Jean-Pierre decide sorprender a su mujer y para su cuarto aniversario le regala lo que nunca sospechó que llegaría a regalar: un cachorrito de Bulldog Inglés. Al principio todo es muy bonito y el perro es muy mono pero pronto se dará cuenta de que Tresor (Tesoro) que es como Nathalie llama al perro va a ser un foco de problemas y quebraderos de cabeza. ¿Hasta donde estás dispuesto a llegar por amor?
Esta semana llega a nuestras pantallas esta divertida y bella comedia Francesa acerca de un matrimonio con un cachorrito de Bulldog Inglés muy travieso en medio de sus rutinarias vidas. Un regalo para ella no solo será recordada por su genial realización sino por ser la última película e su director, Claude Berri, que murió a la semana de empezar el rodaje.
«Podemos llamarle perro, así sabrá cual es su lugar» – Jean-Pierre
«Es mi Tesoro. Lo llamaré Tesoro» – Nathalie
Valoración:
Cuando uno lee la sinopsis de Un Regalo para ella, o incluso cuando ve su trailer, enseguida se da cuenta de que se encuentra ante una película que ya ha visto unas cuantas veces antes y que no aporta nada nuevo al género de familia con animal nuevo y peripecias por descubrir. Y para qué negarlo, esto realmente es así ya que Un Regalo para ella cae en todos los tópicos que puede tener una película de estas características. Los actores tampoco son una maravilla en el sentido de que realmente no parece haber excesiva química entre ellos. Pero si de algo va sobrada esta película es de diversión y de escenas cargadas de humor. No es que sea una película la cual no te dejará parar de reír, para nada. Me refiero a que conseguirá que no paremos de mostrar una sonrisa en nuestro rostro en cada una de las escenas que componen la película. Algunas muy bonitas, otras un tanto emotivas y otras con una dosis de humor estupenda para este tipo de películas.
En la mayoría de sus escenas hará que nos sintamos identificados con alguno de sus personajes (el protagonista, el compañero de trabajo, el tercero en discordia,…) ya que todos tienen sus propios problemas de lo más cotidiano. Es una película más afectiva que efectiva, lo cual no me parece mal del todo.
El hecho de que una mascota aparezca en nuestras vidas y siembre discordia es algo que no suele tener fácil solución. Sí, se puede ser radical como cuando Jean-Pierre quiere devolverlo el mismo día que entra en su casa puesto que se da cuenta que hace ruido, deja un reguero de agua al beber o incluso de su cuerpo emanan gases bastante desagradables. Insta a su mujer a coger otro perrito más tranquilo como un Chiuaua, diciéndole que en menos de un día no se ha podido encaprichar de él. Incluso apurando llega sugerirle que lo cambien por un pajarito. Nathalie no tiene intención de hacer algo así y es cuando los problemas empiezan en dicho matrimonio.
Los actores lo comparaban en una entrevista reciente a los celos que a veces cogen ciertos padres cuando un hijo nace, puesto que quedan un poco relegados a un segundo plano en pro del recién llegado. Una mascota no es un hijo ni mucho menos pero requiere mucha responsabilidad y un gran cuidad. Como veremos en la cinta, todo esto se usa, con humor, para reírnos de los dolores de cabeza de Jean-Pierre y ver que en la vida nos pueden pasar mil cosas, más graves o menos graves, pero si hay amor y nos tomamos las cosas con humor, todo se sobrellevará mucho mejor.
Conclusiones:
Película Francesa que nos muestra un perfil de las comedias distinto al que nos tienen acostumbrados las «made in Hollywood» pero no por ello peor, pues es tan apta como estas. Personajes que si destacan en algo es en el realismo de su interpretación (con más o menos acierto) y un perro como telón de fondo que sirve para causar problemas y quebraderos de cabeza.
Actores bastante desconocidos si no es que hemos visto mucho cine Francés y una dirección lastrada por la muerte del director componen una película apta para toda la familia y que divertirá por igual a todos. No estamos ante la mejor película del año pero sí ante una de las más divertidas y afectuosas que podremos ver.
La última película de Claude Berri
Cuando el director de Un regalo para ella, Claude Berri, llevaba una semana de rodaje tuvo la desgracia de fallecer debido a un infarto vascular cerebral, en el hospital Pitié-Salpêtrière, de París. No es que fuera un jovencito pues ya tenía 74 años pero se encontraba en estupenda forma y estaba muy lúcido en todo momento con lo que cogió por sorpresa a todo el equipo de la película. Tomó el relevo François Dupeyron que consiguió sacar adelante un film con el espíritu de Berri impreso en la cinta. El equipo dice que siempre recordará a Claude Berri y que están seguros que la película es tal y como la habría rodado el propio Claude.
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