This is England
Shaun acaba de perder a su padre en la guerra de las Malvinas. Vive en un barrio obrero de manera muy modesta y es el hazmerreir en su escuela, donde otros chicos se fijan en él para desfogarse y ridiculizarlo. Todo cambiará cuando conozca a un grupo de cabezas rapadas que lo adoptarán en su grupo y cuidarán de él. (Cineycine).
Iré directo al grano: ‘This is England’ es una verdadera sorpresa y una joyita que pasó de puntillas sin que muchos se enterasen siquiera. Y es una verdadera pena, porque la cinta y el mimo con el que se trató merecían mucho. Ahora, estimado lector, todavía estás a tiempo de enmendar el asunto y buscarla en las tiendas/webs especializadas.
La trama: Conociendo a Shaun.
‘This is England’ es una cinta de cine independiente que sitúa al espectador en pleno año de 1983, en un pueblo costero de Inglaterra donde Shaun, un chico de 12 años, vive sus momentos más angustiosos. Su padre acaba de fallecer en la guerra de las Malvinas y en su escuela es el blanco perfecto de los abusones. Todo cambia cuando Shaun es “adoptado” por una banda de Skinheads de la zona. Shaun, sin su padre, necesita una figura paterna a la que seguir, a la que admirar e imitar, y esta tribu urbana será su modelo. Pese a ser cabezas rapadas, en ningún momento se les ve emplear la violencia contra sus semejantes. El problema para la banda y por ende para Shaun, será cuando vuelva “al rebaño”, Combo, el que fuera líder de la banda antes de su ingreso en prisión, donde ha permanecido varios años. Con la llegada de este Skin racista y violento, el mando cambiará de manos y todo empezará a ir a la deriva. Y como decimos, si un niño de 12 años necesita una figura paterna, se fijará en quién más atención le preste e intentará imitar ese modelo. Shaun madurará a pasos agigantados y se dará cuenta que es cuestión de tiempo que las cosas acaben mal.
Crítica de This is England
Shane Meadows, el director de la cinta, supo enfocar la película muy bien. Muy bien, principalmente porque él mismo vivió todo eso en esa época. Él vivió cómo en su país había cada vez más parados, el ambiente estaba enrarecido y en el trasfondo había una guerra contra Argentina. La gente se fue distanciando y empezaron a resurgir grupos racistas alimentados por partidos políticos estilo el «Frente Nacional», partidos que no comulgaban con la gran tasa de paro y la atribuían a la mano de obra barata de los inmigrantes. De ahí muchos se volvieron xenófobos y la violencia florecía en muchas zonas en contra de habitantes no ingleses, en especial en barrios obreros y marginales. Lo cierto es que para plasmar todo esto, se necesitaban unos actores capaces de transmitir mucho en sus respectivos papeles. Y aquí se notó, se notó que nada más ponerse las «Dr Martens» ya caminan hasta diferente, eran una manada. Y para retratar al protagonista, se necesitó a un chico diferente del resto. Diferente porque debía poder transmitir muchas cosas con una edad muy corta.
Transmitir una serie de sentimientos que Thomas Turgoose supo mostrar. Decía el productor que hicieron varios castings para el papel de Shaun y que buscaban chicos donde normalmente no se buscan. Cuando eran preguntados sobre sus motivaciones para ser Shaun, todos decían que querían salir en la película. Thomas Turgoose sorprendió porque él quería hacer la película para que le pagaran por ello, le daba igual o no salir en una película. Parece ser que eso llamó la atención y consideraron que sus motivaciones, para su edad, no eran las comunes y que deberían probar con él. El resto, como se suele decir, es historia.
Todo lo anterior se sumó a la fenomenal ambientación de la época, con coches y vestuario de dicho tiempo, junto con el nivel que se vivía en barrios marginales, donde los Skins representaban a la juventud obrera inglesa. La dirección resultó francamente fenomenal, sabiendo captar los momentos más decisivos y permitiendo algo de improvisación en su elenco, siempre que aportara algo positivo al conjunto.
Llegados a este punto, me gustaría comentar que la película no es perfecta, y que dentro de lo realista que pretendía ser, existieron detalles «indigeribles», en los que no quiero profundizar para no entrar en la trama en exceso y no chafar el film a nadie. Pero viendo que son tan pocos y tampoco fueron algo excesivo, soy capaz de mirar todo lo bueno de la cinta y pasarlos por alto.
Seamos conscientes de que no estamos ante una película de acción donde los Skins dan caza a otros y contemplamos grandes secuencias de violencia y peleas, porque nos llevaremos un chasco. No. ‘This is England’ es un drama que usa la temática Skin para que trabaje a su favor, calando en todos los que disfrutamos con el cine dramático, personal y profundo dentro de unos límites, acabando sus últimos minutos en una espiral insana que el espectador no espera ver.
Conclusiones.
Finalizo está crítica de This is England, toda una sorpresa para mí. La tenía en mi videoteca desde hacía años, pero al igual que con otras películas, me daba pereza y la iba postergando en favor de otras. Cuando por fin la puse, pude comprobar lo absorbente que puede llegar a ser, pese a tener una estructura simple. Eso es debido a lo trabajada que está, al esfuerzo de su director y actores y a que aborda un tema que en su día causó impacto y a día de hoy sigue siendo actual (tasa de paro, xenofobia, tribus urbanas,…). Está claro que no gustará a todos por igual, al igual que no a todo el mundo le gustan los Westerns o la comedia, por poner unos ejemplos… pero a los que nos capte nos dejará con ganas de más. De ahí que me pusiera a investigar sobre el tema, descubriendo que la buena acogida del film hizo que el director y los actores rodaran tres mini series tituladas ‘This is England 86’, ‘This is England 88’ y ‘This is England 90’.
Escucha nuestro podcast
