El gigante de hierro
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Un robot de treinta metros de altura procedente del espacio exterior que devora metal. Un solitario niño terrestre que vive con su madre. No hay nada imposible para la amistad. No hay nada imposible para… ‘El gigante de hierro’.

“Es un robot de treinta metros de altura y come metal” (Hogarth Hughes)

Crítica de El gigante de hierro

‘El gigante de hierro’ es una maravillosa película que comprende temática muy variada excelentemente resuelta. De esta forma, en la misma podemos ver como se dan cita diferentes temas tales como: el miedo atómico, el miedo a los comunistas, los cómics, los OVNIS, la amistad, el antibelicismo… Todo ello en una sociedad como la norteamericana de finales de los cincuenta en la que muchos de estos asuntos eran algo habitual. Ahondemos ahora en cada una de estas temáticas.

El miedo atómico va estrechamente ligado en la cinta al miedo a los comunistas, ya fueran soviéticos o chinos. Este tema se hace presente a través de las proyecciones informativas que reciben Hogarth y sus compañeros en la escuela. Además, posteriormente hace irrupción en escena Kent. Hablamos de un personaje que es una perfecta personificación de todos esos miedos y paranoias. Recuerdo, por ejemplo, una escena en la que acosa a Hogarth diciéndole que hay que eliminar al enemigo comunista. Un enemigo que además nos espía a través del sputnik. Hay que eliminarlos antes de que sean ellos los que finiquiten a los norteamericanos…

Los cómics hacen acto de presencia cuando Hogarth se los muestra a su amigo el gigante para entretenerlo. Incluso en momentos puntuales del film hay unos hermosos homenajes a todo un icono de la cultura popular norteamericana y mundial como es Superman. Yo no soy fan de los cómics de DC, pero no se puede negar la importancia del personaje en el mundo. En consecuencia, esta película le da un bonito y sentido homenaje.

Los OVNIS también se dan cita no sólo por la presencia física de un gigante de hierro que viene del espacio exterior, sino también por los avistamientos que este produce en las gentes del lugar. Tenemos que tener en cuenta que el año en el que transcurre la película es 1957. Apenas 10 años antes, concretamente en julio de 1947, había estallado el famoso Caso Roswell. Por lo tanto, el fenómeno en esos años estaba ya algo avanzado, y las gentes hablaban de platillos volantes y seres de otros planetas.

Además, todo lo que se nos cuenta en esta cinta es una hermosa historia de amistad entre dos “personas” muy diferentes. Por un lado, un solitario niño terrestre. Y, por otro lado, un gigantesco robot venido de algún lugar del espacio. Este es, sin lugar a dudas, el mejor tema del film o su mejor mensaje: para conseguir una buena amistad no deben importar en absoluto las diferencias ni físicas ni mentales, por grandes que estas puedan llegar a ser.

Finalmente, la película nos muestra un mensaje claramente antibelicista representado en la propia figura del gigante. Un gigante que sólo emplea la violencia de manera inconsciente cuando se le ataca. En este sentido, es muy reveladora la frase que Hogarth le dice a su amigo el gigante: “Tú eres lo que eliges ser”… También reveladora es la frase que le dedica el gigante a Hogarth: “Yo no soy un arma”… Y nuevamente vuelve a surgir aquí la figura de Kent, que antepone el uso de las armas (para aplacar su miedo y cobardía) al empleo del diálogo o el intento de comprensión de algo que se le escapa totalmente.

Como podemos ver, estamos pues ante un film con una temática ciertamente interesante. Un film al que, sin duda alguna, son los más mayores de la casa los que le puedan sacar su máximo partido. Sin embargo, esto no debe ser obstáculo para que la cinta también pueda ser disfrutada por los más pequeños. Los infantes encontrarán en ella situaciones divertidas y buenos ejemplos de lo que puede y debe ser la amistad.

En lo que se refiere a la animación, decir que ‘El gigante de hierro’ ofrece una animación que calificaría de muy suave, cuidada, fresca, elegante, fluida y clásica. Los personajes se mueven en pantalla de forma elegante a la vez que fresca y divertidamente. Los detalles están muy cuidados (ver, por ejemplo, cuando el gigante despliega todo su arsenal). Finalmente, todo el conjunto de lo que vemos en pantalla se nos muestra con una gran fluidez y elegancia al estilo de la animación de toda la vida. En definitiva, estamos ante un film excelentemente animado que en nada tiene que envidiar a los mejores Clásicos de Disney.

Por otro lado, los personajes animados cuentan con un reparto excelente de voces. Un casting que incluye a algunos actores y actrices hoy ya consagrados como verdaderas estrellas. Es el caso de Jennifer Aniston que presta su voz a la madre de Hogarth, o del mismísimo Vin Diesel encargado de dar al gigante su metálica voz. Otros personajes importantes son doblados por actores no tan relevantes. Me refiero a los casos de Eli Marienthal como Hogarth, el solitario chavalín que encuentra en el gigante a su mejor amigo. Christopher McDonald como Kent, el histriónico y paranoico investigador para la seguridad nacional enviado por el Gobierno a indagar los extraños sucesos. Y, finalmente, también destacar a Harry Connick Jr. como Dean, el excéntrico chatarrero local y único apoyo de Hogarth en su tarea de ocultar al gigante.

Tan gran película es rematada de forma soberbia con una banda sonora muy bonita obra de todo un currante y todoterreno como es Michael Kamen. El compositor contó en esta ocasión con la ayuda de la Orquesta Filarmónica Checa. Juntos hicieron un trabajo soberbio. De hecho, originariamente la película era concebida como un musical, pero al llegar el director Brad Bird a la WB le dieron un proyecto a elegir entre los que tenían paralizados. Brad eligió ‘El gigante de Hierro’ y cambió la idea original del musical.

“Yo no soy un arma” (Gigante de hierro)

En conclusión.
Finalizo esta crítica de El gigante de hierro, si te gustan las películas animadas inteligentes y con temática interesante, entonces, te gustará este film. Si además te gustan los comics y valoras la amistad por encima de todo ya no tienes ni qué dudarlo ¡Esta es tu película! Recomendada y ya todo un clásico inmortal.

Curiosidades.
-Fue un amigo del director Brad Bird el que le recomendó a Vin Diesel para ser la voz del gigante. Entonces Brad se interesó por Vin, vio su corto ‘Multi-Facial’ (1995) y supo que Vin era su “gigante de hierro”.
-Joe Johnston, diseñador original del Gigante de hierro, se basó en el popular personaje de Popeye para crear determinados aspectos de la anatomía del gigante como sus antebrazos y piernas.
-En esta película se incluyó por primera vez un nuevo logo de la WB realizado en exclusiva por Andrew Jiménez para los films animados de dicha compañía.
-El nombre del muchacho (Hogarth Hughes) es un guiño a Edward James Hughes (1930-1998), escritor inglés autor de la obra ‘The Iron Man’ en la que se basa esta película de Brad Bird.

Tráiler de El gigante de hierro

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