Corazones de acero
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La Segunda Guerra Mundial llega a su final y este es el momento elegido para que los hombres del sargento Don penetren en pleno corazón de la Alemania Nazi. Allí deberán demostrar que ellos, al igual que su tanque (el Fury), también tienen… ‘Corazones de acero’.

“Le prometí a mi tripulación que la mantendría con vida” (Don)

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Crítica de Corazones de acero

Tras Sabotage’, y en el mismo 2014, David Ayer estrenó este film que hoy nos ocupa. Delante de nosotros tenemos una buena película con grandes aciertos. Ahora bien, esta cinta también presenta “errores” que le impiden colocarse en todo lo alto de la pirámide bélica codeándose con las mejores de todos los tiempos. En la producción, el cineasta contó con el asesoramiento de tres consultores militares y cuatro veteranos de la División Acorazada de la Segunda Guerra Mundial.

Para empezar, Ayer logra una extraordinaria ambientación bélica carente de cualquier atisbo de belleza e idealismo. Esto es la guerra y la misma se nos presenta en toda su triste crudeza. Hasta los propios escenarios naturales están escogidos y fotografiados en momentos sombríos para que casi nunca luzca el sol. En este sentido, la llegada al principio del tanque “Fury” al campamento aliado es toda una declaración de intenciones de esta crudeza que ya nos acompañará a lo largo de todo el metraje. Aquí veremos gente ahorcada, cadáveres y ruinas, barro y suciedad, prisioneros y niños luchando,… Las guerras de los hombres nunca son bellas, no pueden serlo. Ya lo dice el propio Sargento Don en un momento determinado: “Los ideales son pacíficos. La historia es violenta”.

Respecto a la ambientación destacar que la película se rodó durante 12 semanas en los campos de Oxfordshire y en la pista aérea de Bovingdon (Inglaterra). En Oxfordshire se buscó un clima y una luz parecidas a las de los campos de la Alemania invadida por los aliados, además usaron grandes cantidades de lodo y barro. A Bovingdon se fue para poder usar los recursos de su “Museo de Tanques”. Un museo que cuenta con la mayor dotación de carros de combate del mundo.

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Hablando del Sargento Don, en el film nos encontraremos con el retrato de los combatientes de uno y otro bando. Bien es cierto que los mandos de las SS se llevan la peor parte. Se la llevan más por lo que se dice de ellos, y por lo que vemos que han hecho en los pueblos recorridos por los protagonistas, que por su presencia física en la película. No obstante, tampoco el retrato de las diferentes personalidades de la tripulación del “Fury” se adorna.

Ayer quiere dejar claro que tenemos hombres y no héroes. Hombres que, como reza el título español, tienen “corazones de acero”. Hombres con una coraza impenetrable para poder sobrevivir en ese tremebundo escenario que fueron las últimas semanas de guerra en una Alemania tomada ya, casi totalmente, por el ejército aliado. No busquéis aquí héroes ejemplares de las “Hazañas bélicas” porque no los vais a encontrar.

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En esta crítica de Corazones de acero también quiero destacar positivamente todo lo que es el rodaje de las secuencias de acción. En pantalla veremos: tiroteos, los impactos de los obuses en edificios y las ráfagas de ametralladoras en los soldados (los parten, literalmente). Amén de los enfrentamientos entre blindados. Respecto a estos últimos choques, atención a uno en el que “Fury” se verá las caras con un “Tiger” alemán. Como curiosidad destacar que el “Fury” es un tanque Sherman norteamericano. Claramente era menos poderoso que el Tiger alemán (diseñado por orden expresa de Hitler) pero se podía fabricar a gran escala y esto hacía que a la hora del combate casi nunca fueran solos. La producción de los Tiger era más costosa, en consecuencia, aun siendo más poderosos que los Sherman, casi siempre combatían en inferioridad numérica.

Por otro lado, los principales problemas que le veo a esta película son dos: una ausencia de ritmo constante (el film claramente presenta “subidas” y “bajadas” muy acentuadas que incorporan momentos ciertamente “sin chispa” y/o forzados) y un guión con alguna que otra incoherencia importante, sobre todo, hacia el final de la cinta. El tema por supuesto que es discutible (como casi todo) y cada cual tendrá su propio parecer. Sin embargo, no veo que en estos aspectos ‘Corazones de acero’ esté todo lo bien terminada que debería estarlo, y esto hubiera sido fácilmente evitable… pudiendo situar así a la obra en una categoría claramente superior.

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“El mejor trabajo que he tenido”… Corazones de hierro.

Brad Pitt, Shia LaBeouf, Michael Peña, Jon Bernthal y Logan Lerman son los protagonistas principales de la propuesta. A diferencia de que lo que sucedió en ‘Sabotage’, en la que David Ayer fue incapaz de sacarle todo el partido al gran reparto del que allí dispuso, aquí sí que saca el rendimiento esperado a este notable casting.

Los cinco actores citados lucen a gran nivel, siendo complicado destacar a uno sobre los demás. Las caracterizaciones de cada personaje son francamente buenas y totalmente acordes con el actor elegido. De esta forma, en Brad Pitt tenemos a un sargento (Don) totalmente quemado por la guerra, tanto por dentro como por fuera. Shia LaBeouf es “Biblia”, un hombre que intenta ser fiel a la palabra de Dios mientras se ocupa de disparar los obuses del tanque y de rezar por y con los muertos. Michael Peña da vida a “Gordo”, un mejicano que, por esas cosas de la vida, es el conductor del Fury. Un gran Jon Bernthal interpreta a Grady, el mecánico del tanque que es quien mejor conoce las entrañas de «La bestia». Finalmente nos queda un destacado Logan Lerman en el papel del típico novato que es asignado “por error” como artillero al Fury.

Ya digo que estos cinco actores están todos ellos francamente bien. No me atrevo (ni quiero) destacar a uno por encima del resto, lo vería injusto, dado el buen nivel que todos desarrollan a lo largo del metraje. Y esto pese a que sus personajes son o puedan ser algo típicos, lo cual no niego.

“¿Te rendirías tú?” (Don)

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En conclusión.
Llegado el momento de hacer el balance general entiendo que ‘Corazones de acero’ tiene las suficientes virtudes para superar globalmente a sus posibles deficiencias. Así pues, esta cinta de David Ayer merece obtener una sólida puntuación y ser tenida en cuenta de cara a un posible visionado/s. Y, por supuesto, queda recomendada para los fans del género bélico.

Tráiler de Corazones de acero

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