Capitán Harlock
Tras una guerra larga y sangrienta, la Tierra es declarada un planeta sagrado donde está prohibido vivir. Para prevenir cualquier intento de repoblación, una flota de élite protege el acceso al planeta desde entonces. Pero la nave espacial Arcadia con el Capitán Harlock al mando se presentará para desafiar a la flota de Gaia. (Cineycine).
Tras cinco años de producción y dos de retraso, llega a nuestras pantallas la esperadísima adaptación en 3D del popular manga de Leiji Matsumoto. Tratando de mantener el espíritu de la obra original y con un espectacular despliegue técnico, ‘Capitán Harlock’ parece la adaptación definitiva… ¿pero lo consigue?
Crítica de Capitán Harlock.
En la introducción he apuntado que esta película se postula como la adaptación definitiva del manga de Leiji Matsumoto, y también me he preguntado si lo era realmente. A este respecto, creo que puedo responder ya mismo diciendo que quien espere ver al Capitán Harlock de siempre, aquí no lo va a encontrar. No se trata ni mucho menos de una mala película, pero sí de una adaptación fallida, llena de buenas intenciones y lastrada por los vicios propios de la industria cinematográfica moderna. ‘Capitán Harlock’ es un portento a nivel técnico, podemos afirmar que el trabajo de producción ha sido exquisito, obteniendo unos resultados que poco tienen que envidiar a aquella otra obra visual de la animación que fue ‘Final Fantasy’. Pero le falta alma, le falta chispa, le falta todo aquello que ha convertido al personaje de Matsumoto en un referente mundial.
Empecemos diciendo que Shinji Aramaki realiza un notable trabajo con las escenas de acción, ya no se trata sólo del impresionante detalle a nivel visual sino de una coreografía esmerada que nos permite no perder el hilo durante los combates, algo que ya quisiéramos poder decir de muchas películas con actores reales.
También es destacable el diseño de producción, con unos personajes clásicos bastante reconocibles, unos escenarios espectaculares y una “Arcadia” que nos recuerda lo suficiente a la nave pirata de Harlock, a pesar de que luego hablaré de ella. Obviamente hay licencias, por ejemplo, la obsesión de Aramaki por los exoesqueletos y mechas (recordemos su trabajo en ‘Appleseed’), o que se reinventen unos cuantos personajes, pero creo que en general son asimilables. Otra cosa es que nos encontremos con una fotografía demasiado oscura, un claro intento de seguir esa absurda tendencia nolaniana que tan de moda está. Faltan colores y falta luz, sobre todo teniendo en cuenta que la “Arcadia” es o debería ser el último refugio de la esperanza humana.
Pero vamos a lo grave… Es obvio que Aramaki intenta crear un Harlock para las nuevas generaciones, y eso de por si no es un problema porque Harlock ha sufrido ya varias transformaciones con los años. Lo que sí es un problema es ir más allá de un simple reboot y caer en una perversión demasiado radical. De ahí que la trama de la película no tenga nada que ver con todo lo visto de Harlock durante tantas décadas, si no fuera por los personajes podríamos decir que estamos ante una saga totalmente distinta. Pero, sobre todo, me parece inaceptable que Harlock siempre fiel a unos valores y una ética muy determinados, haya sido reconvertido en un psicópata renegado capaz de las peores atrocidades.
Todo esto deriva en otro problema más, y es que al no existir una clara diferenciación entre buenos y malos nos es difícil empatizar con alguno de los bandos. La flota Gaia son una banda de dictadores y Harlock un sociópata con poderes nacidos de la materia oscura (que esa es otra) y dominado por un oscuro deseo de venganza. Y… ¿qué hay del resto de la tripulación? Pues están pero como si no estuvieran, la que sí es un acierto es Miime, la alienígena compañera de Harlock. Pero la nave Arcadia se lleva la peor parte, está puesta al servicio de la pirotecnia visual y el precio a pagar es que la bohemia nave pirata de antaño haya sido reconvertida en un superacorazado armado hasta los dientes.
Creo que el guión tiene sus puntos positivos y sus errores, por ejemplo la primera parte de la película me parece muy prometedora, nos invita a pensar que vamos a ver algo grandioso dentro del género espacial. Pero en cuanto se revelan las intenciones de Harlock y comenzamos a presenciar un desfile constante de cambios de bando por parte de algunos personajes y de situaciones incongruentes es cuando todo se desinfla. Al final es ese intento de transformar el universo de Harlock en algo que nunca fue lo que se carga la película. El mayor ejemplo de todo esto es la secuencia del reclutamiento, donde los candidatos descartados son arrojados de la Arcadia a una muerte segura, algo que define a la perfección qué Harlock nos vamos a encontrar aquí.
Conclusión.
Estamos ante una adaptación de las aventuras del manga que en esta crítica de Capitán Harlock no me atrevo a recomendar a nadie que sea un fan o que profese especial cariño por esta saga, por lo que pudiera pasar… Es innegable que a nivel visual estamos ante una producción impecable, de hecho, creo que cualquiera que vaya a verla con la única idea en mente de disfrutar de algo espectacular saldrá satisfecho del lance. Pero para los que buscamos una historia emocionante, rica y fiel al universo de Harlock el pirata creo que es una apuesta que debemos dejar pasar.
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